Evashipping [II]

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 "No estaba mirando! Estoy mirando... Atentamente."

[...]

... Está bien... Regresaré después ...

Hay un momento incomodo entre los dos, un instante en el que se miran fijamente mientras intentan procesar una reacción coherente al momento, sin que ninguno de los dos tenga éxito alguno y, al final, lo más lógico que hace el menor es cerrar de un portazo la puerta, antes de soltar el pomo como si este estuviera quemando y diera varios pasos atrás.

—¡Lo siento, debí tocar primero!

Esta contra la pared, sonrojado, intentando pensar en su acción más reciente y en el "¿Por qué?" su cuerpo decidido actuar de esa manera, no tiene sentido en lo mas mínimo, se supone que su hermano y el son hombres, no hay nada que tenga su hermano que el mismo no haya visto antes, así que su nerviosismo no tenia ningún sentido, bien podía haber seguido con la puerta abierta, unos minutos más, y preguntar la razón urgente por la cual había abierto la puerta con prisas, aunque, en este momento, ya se le había olvidado esa razón.

Sonrojado, y ahora molesto por su reciente olvido, maldijo para si mismo mientras se quedaba con la espalda pegada en la pared... Hasta que la puerta frente a sus ojos se abrió nuevamente.

—Paul, ¿Qué paso? ¿Por qué saliste de esa forma?

Sus ojos viajan, inconscientemente, desde la mirada preocupada de su hermano hacia los pectorales, y, muy nerviosamente, hacia la corta toalla que cubre más allá y simplemente le deja con un hueco vacío que le hace sonrojarse al intentar llenarlo de alguna manera.

Hay gotas de agua que aun caen lentamente del cabello de su hermano mayor, muchas caen directamente hacia el suelo, mientras unas pocas caen sobre su piel y se deslizan lentamente, creando caminos imaginarios que sus ojos siguen cuando suben con la intención de mirarlo de regreso, fallando inútilmente tras seguir las traviesas gotas que lo guían de regreso hacia abajo.

—¿Paul?

—¡No estaba mirando!

Grita, levantando la mirada de inmediato al sentirse descubierto, con el rostro rojo, ya no solo las mejillas, intentando retroceder aún más a pesar de que Reggie ni siquiera hacia el intento por acercarse, simplemente estaba ahí, recién bañado, en la puerta de su cuarto, luciendo...

—Y-yo... ¡No estaba mirando! Estaba mirando... Atentamente...

Siente su lengua hacerse un nudo mientras su hermano mayor lo sigue mirando sin entender, tan confundido como el mismo que ni siquiera sabía que estaba diciendo, así que, a favor de los dos, finalmente se alejo de la pared para moverse hacia el pasillo por el cual había llegado, trastabillando un poco antes de darse bien la vuelta, huyendo del lugar.

—¡Volveré después!

Reggie, desde su lugar en la puerta, simplemente lo vio desaparecer por el pasillo y bajar rápidamente por las escaleras.

Momentos ContigoWhere stories live. Discover now