Puta Boda

4K 192 35
                                    

-Vamos. -Mimi tiró de mi mano, sacándome a rastras del fotomatón.

-¿Dónde vamos?

Mimi se paró en seco.

-¿Cómo que dónde vamos? -Me miró como si fuera obvio. -A casarnos.

-¿Pero qué dices?

-¿No querías casarte ahora? -Sonrió.

-Pero...Mimi, estás loca...

-Sí, por ti. -Yo reí como una boba y negué con la cabeza, sonriendo con ella. -Tú déjamelo a mí.

Y claro, quién le decía que no a Mimi, y más con esa sonrisa...

—-

Prácticamente corrimos por las calles hasta llegar al hotel. Mimi rebuscó en su riñonera la tarjeta de la habitación y, antes de entrar, se paró en seco y me miró.

-Eres consciente de que es la última vez que vamos a entrar por esta puerta siendo novias, ¿verdad?

-Pero... -Reí un poco nerviosa. -Mimi, que es precioso pero no podemos casarnos ahora, por Dios, no tenemos ni...

-Shh, shh, shh... -Puso un dedo en mis labios y me miró con esa sonrisa que no se le había quitado de la cara en todo este rato. -Te dije que me lo dejaras a mi... ¿confías?

-Claro que confío pero...

-Pues ya está. -Resolvió, y me besó con los labios apretados, un beso contenido. -Pase usted, futura mujer de Doblas...

Entramos a la habitación, y Mimi suspiró profundamente, como liberada. Yo no tenía muy claro cuáles eran sus planes, ya casi estaba anocheciendo y aunque estaba emocionada, la idea loca que habíamos tenido ahora me tenía un poco ansiosa.

-Voy a bajar a hacer unas gestiones... -Acarició mi cintura, frente a mí, y besó mi frente. -Tú... Ponte lo que quieras, porque vas a estar preciosa igual, pero dame al menos media hora, ¿sí?

-Pero Mimi...

-En media hora, bajas a la recepción, y me esperas allí. Yo subiré y terminaré aquí todo, y bajo, ¿sí?

-Mimi...

-Ana, porfa. -Pidió. -Porfa...

-Vale. -Concedí. -Sí. -Le sonreí.

-Te quiero tanto, tanto. -Me miró arrobada, sus ojos verdes brillantes y una sonrisa inmensa.

-Y yo a ti, tonta...

Negué con la cabeza, sonriendo, y la besé despacio, casi saboreando que ese sería nuestro último beso de novias, a sabiendas que lo que quisiera hacer Mimi iba a ser lo más perfecto que podría hacer, porque así era ella, y con cualquier tontería conseguía robarme el corazón un poco más...

Cuando Mimi salió de la habitación, dándome muchos más besos y demostrándome que, efectivamente, no era cierto y no sería nuestro último beso hasta hacer lo que fuera que quisiera hacer, me quedé sentada en la cama, mirando a la nada. Ya era completamente de noche, debían ser más de las nueve, y no tenía claro con qué vestirme. No tenía nada que pudiera ser digno de una especie de "casamiento" y tampoco había venido preparada para esto. Ni siquiera estaba preparada para darle el anillo, fue algo loco y que pensé que tendría que pensar más adelante, pero es que era tan nuestro. Así me sentía cuando estaba con Mimi, desenfrenada, loca. Podría hacer cualquier cosa precipitada, porque sabía que sería siempre lo correcto con ella, y yo, tan acostumbrada al orden y a la planificación, no sentía que lo que hubiera hecho fuera un arrebato. Más bien algo que quería hacer y que sentía que era lo correcto.

Don't you worry about a thing -Warmi-Where stories live. Discover now