LION ALPHA ×태국/Omegaverse×

22🦁

☁️☁️

Al siguiente amanecer, Khal despertó a TaeHyung de un rugido. Este a pesar de estar despierto, se removió entre las sábanas de seda de su cama y notó algo. Abrió los ojos y vió a JungKook, quien abría sus ojos con lentitud, su tan brillante azul, observándolo con detenimiento.

-no me mires así, niño... - comenta con suavidad, casi con tristeza, riendo algo tenso-

-es posible que pasen años, y cada día que despierte no te vea a mi lado... - dice y Taehyung posa sus hermosos ojos en JungKook nuevamente, con seriedad- no me quites el gusto de admirar a la persona que amo.

TaeHyung negó, acercándose, tomando las mejillas del menor y besar su frente, mientras este se acomodaba en su pecho. Khal seguía rugiendo por lo que ambos lo miran, sentado en una esquina en un gran almohada con bordados de  muchos colores, la cual era su cama.

-que dice? -pregunta Kook, sabiendo que el único que le entendía era TaeHyung-

-dice que tiene hambre y que tenemos que ir al salón del comedor, ahí nos esperan para el desayuno.

-quienes?

-mi familia y embajadores. Quizás tus padres. No lo sé realmente.

JungKook se levantó y casualmente aparecieron sirvientes, los cuales trajeron dos conjuntos de ropas. JungKook fué al baño conjunto a la habitación y uno de los sirvientes lo siguió con sus ropajes, mientras que TaeHyung le pidió privacidad al otro, para poder vestirse solo, como siempre lo ha hecho cuando niño.

El rubio se encargó de colocarle una nueva cadena a HyunKhal. La cual era regalo de Taeyong y Yuri, una cadena de oro, a la cual le colocó aquella piedra ámbar que los unía a ambos. Tae terminó de colocar su camisa, dejando su pecho descubierto para colocarse su cadena conjunta que tenía con khal ahora de oro. Miró el saco de color rojo tendido en la cama, tan formal y distinguido, lleno de bordados y emblemas. Sus iniciales en  la manga derecha, justo sobre su muñeca. Detuvo sus movimientos, meditando.

-pasa algo? -JungKook apareció, curioso de ver al rubio mirando la ropa, mudo. -

-aún no me siento cómodo de volver a esto.... -comenta y mira a JungKook quien comienza a sacarse su saco negro con azul- hey hey no. No quiero que te sientas obligado a esto.

-que? Yo no soporto este calor. Me puse el saco porque aquel sirviente me estaba ayudando. Yo tampoco disfruto de la ropa formal -dijo, colocando un pañuelo azul de seda en su cuello y aprochar los bordes de su manca, luego acomodando su camisa dentro del pantalón- solo colocate el chaleco bordado, no es necesario el saco para un desayuno, ¿no es así?

Luego de unos minutos, ambos listos con los ropajes a su comodidad, salieron del cuarto. Pero TaeHyung aguantó pocos segundos, abrazando a JungKook por la espalda, apretando su cintura al ver que sacó un frasco de sus bolsillos.

-por favor... Aún no.... - pidió en un susurro, acariciando su cuello con su aliento, respirando profundamente su exquisito y afrodisíaco aroma.- déjame disfrutar del aroma que desprendes, tan dulce. Así como yo te dejo admirar de la vista que te doy.

Y eso bastó para detenerse en medio de los bastos pasillos del gigantesco castillo León, suavizando a su lobo con la voz cálida de su Alfa, guardando el frasco de fragancias híbridoras de aroma, también dejando de lado sus supresores en su bolsillo.

-alguien podría venir..... -susurra, al ser acorralado en una de las paredes, detrás de un pilar de mármol, para que no sean vistos tan fácilmente van a decir cosas de nosotros si alguien viene...