Te Entregare Mi Corazón - [Completado]

Capítulo 42: Sola con mis recuerdos

Las lágrimas recorrían la blanca y rojizas mejillas de la peli-azul, mediante caminaba hacia la casa con pasos lentos y arrastrados. La caminata fue agonizante pensando que cada vez se hacía más larga la calle que conocía de memoria.

Cerró la ojos y las imágenes de su madre llegaron a su mente, aquella sonrisa que la mantenía cálida, el amor maternal que sentía, los besos frescos en su mejilla, y el cálido, seguro abrazo que le otorgaba, con palabras susurradas en tonalidad confortante. En un punto el tiempo se detuvo, y con el, los pasos de la chica, llevando su vista hacia el cielo, observando las grises capas que cubría este. Sintió las gotas empezando a caer, dejando el cantar de las gotas al tocar el suelo apoderarse de ella.

~ ¡Mamá! - Poché gritó, al ver el carro provenir del lado de la madre, demasiado tarde para reaccionar, impactando con el.

El carro perdió el control, la explosión del cristal afectando a ambas mujeres más a la mayor quien estaba más cerca, bruscamente siendo meneadas. El suceso paso tan rápido, llevándose la vida de una y dejando a la otra al borde de la muerte. ~

El dolor en el pecho se le hizo insoportable, empezando a correr, intentando huir de sus recuerdos.

~ – ¡Esto es tu culpa y tus malditos videos! – La voz del padre se escuchó con furia, dolor y tristeza reflejándose en los ojos, al entrar a la habitación asignada en el hospital.

– Papá, yo no quería que esto pasa... – La voz débil, sorprendida de la chica, estaba dificultada por el dolor que sentía en el cuerpo.

– ¡NO QUIERO TUS EXPLICACIONES! – Este gritó fuerte, dejando sus palabras retumbar en las paredes de aquella pequeña habitación.

La peli-azul cerró la boca, mordiendo su labio, mientras sus ojos se ponían borrosos viendo la actitud que había tomado su padre con ella. ~

La chica sacudió la cabeza, continuando su recorrido, sin saber hacia donde se dirigía. Entre el sonido de la lluvia, las amenazas de sus recuerdos y el miedo que la invadía, agarrado de mano con el trauma.

~ – ¡María José! ¿Que puñetas estás haciendo con mi novio? – La voz de Erika se escuchó, apareciendo con dos vasos en las manos.

Poché levante una ceja, levantando la vista de su móvil – ¿De qué hablas? – preguntó antes de percatarse de Mario al frente de ella, observandola, con el móvil de el en mano.

– No vengas con esas, pensabas darle tu número – Está comento incrédula, caminando hacia ella.