Capítulo 35: Volviendo a casa

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Una pregunta... ¿Cuántos se sintieron engañados con la portada? Que pensaron que iba a ser una historia de amor bonita 😂🤔 pero venga, no pueden negar que entraron buscando cobre y encontraron oro 😂😝

- Sabes, a ti si que te pueden matar a las millas de lo despistado que eres - la voz de Calle se escuchó detrás del chico.

Este se dió la vuelta exaltado, viendo a la castaña apuntándole con una pistola, y un pedazo de pizza en la otra mano, mientras le daba un mordisco. Sonrió y apretó el gatillo, dejando salir un dardo, que hizo contacto con el hombro de este, dejando al chico inconsiente. Se terminó de comer el pedazo de pizza, levantándose de la cama y dirigiéndose al inconsciente cuerpo que yacía en el suelo, arrodillándose para recoger la memoria que había caído unos centímetros alejados del cuerpo.

La puso en la televisión, y se sentó en la cama - Que sera esto que tanto buscabas - Comentó con curiosidad tomando el control y cogiendo el plato de pizzas que el chico había calentado.

Le dió a reproducir el vídeo, mientras comía, y debes en cuando desviaba la vista hacia el chico. Mientras más veía del vídeo; que aquellas imágenes se grabaran en su mente, más su sangre empezaba a arder dentro de ella,  dejando ver una que otra vena en sus brazos y cuello. El enojo se aumentaba, prácticamente gruñiendo a lo que veía, y con disgunto dejaba mostrar una que otra mueca. Apagó el vídeo una vez terminó, extrayéndolo de la televisión, y agarrando al chico por un brazo, sin piedad arrastrándolo por todo el suelo de la casa, llevándose enredados una que otra decoración. Salió de la casa, continuando hacia el lado de la casa, donde se encontraba su vehículo estacionado detrás de unos arbustos. Abrió el baúl, y metió al chico con brusquedad en este, lo observó por unos minutos dejando ver unos rasguños a causa de su acción, hundió los hombros desinteresada, cerrando el baúl.

------ Con Poché (siguiente día) ------

Esta se levantó por una alarma perruna, pues el pequeño estaba sollozando desde los pies de la cama, peleando por qué tenía hambre.

- Ya voy, ya voy - Está refunfuño, aún sintiendo el sueño dentro de ella, volvió a cerrar los ojos, antes de escuchar el quejido más percistente - Ya me levanté, vez, ya voy - Está Finalizó, arrojando la sábana hacia el lado irritada, sentándose en la cama. Desvío la mirada hacia el reloj al lado de ella, leyendo las 7:43 AM.

Rodó los ojos » ¡Odio madrugar! « pensó mientras observaba al cachorro entremedio de sus piernas, lamiéndole la pierna izquierda, causando una leves sonrisa en los labios de esta, antes de levantarse, y caminar hacia el baño, haciendo sus deberes, para luego salir, tomando al pequeño en sus manos.

- Ramón, deberías aprender a molestar más tarde - Está regaño al pequeño, lo que solo recibió que le lambiera el rostro.

Dejó escapar una risita, antes de llegar a la cocina, depositando el cachorro en el suelo, buscando algo para darle de comer. Frunció la nariz al no encontrar comida para perros, decidiendo servirle un envase con leche, dejándose lo al lado del mostrador, mientras ella se preparaba algo de comer.

- Buenos días - Juliana comentó con un tono soñoliento, en un estado moribundo, al aún tener parte de ella en la cama, bostezando mientras entraba a la cocina.

- Buenos días - Poché respondió, haciendo avena - ¿Quieres? - Está le ofreció, a lo que la chica asintió, sentándose en el taburete de la isla.

Se quedaron calladas por unos segundos, en lo que Juli se levantaba más consiente, y Poché terminaba de hacer el desayunó.

- Iré a casa - Poché comentó de la nada, mientras sacaba la avena y las dejaba en platos.

- Daniela me dijo que no te dejará ir, hasta que no estuvieras mejor - Juli comentó observando a la chica.

Poché hundió los hombros - Primero que nada, Daniela no es mi dueña, puedo irme cuando quiera, segundo, ya me encuentro mejor - Está finalizó colocando el plato al frente de la menor, con una expresión seria.

- Alguien se levantó del lado izquierdo de la cama - Juli burló, tomando su plato y acercándolo un poco más hacia donde ella, mientras con la cuchara empezaba a coger un poco de la orilla.

- Tal vez - Poché comentó simple antes de mirar a Ramón - Tengo que tambien ir a comprarle comida al pequeño - confesó.

Juli asintió - ¿Quieres que te lleve? - Está comentó y la chica negó rápidamente.

- No soy muy fanática a los carros, así que no gracias - Está explicó, terminando de comerse la avena, depositando el plato en el fregadero.

Se arrodilló tomando el envase vacío del cachorro, y lo coloco de igual manera en el fregadero, tomándolo a él en las manos.

- Me iré desde ahora, tengo que hacer unas cuantas cosas en la casa, además de comprarme un nuevo móvil, no tengo ni la más mínima idea de dónde paró el anterior - Está comentó, sintiendo un escalofrío al recordar donde exactamente lo había perdido, retirándose de la cocina segundos después.

- Ten mucho cuidado - Juli anuncio- ¿Le aviso a Calle? - La chica preguntó después.

- Si tú quieres - Está contestó, saliendo de la casa, y cerrando la puerta detrás de ella.

Dejó al perrito en el suelo, dejando su mano recorrer la cabecita de este, mientras luego  volvía a enderezarse, para seguir caminando. Esta se mantuvo caminando al lado de ella, por todo el recorrido hasta llegar a su casa. Al tocar, la puerta no tardó en abrirse dejando ver a su hermana menor.

- ¡POCHE! - Está grito con los ojos cristalizándose, brincando le encima sin medir el pesó que le ponía, haciendo que ambas cayeran al suelo. Ramón corriendo alejándose de las chicas, dejando salir un leve chillido al no querer ser aplastado por las dos gigantes.

- Cuidado Vale, por poco lo lastimamos - la peli-azul comentó observando al cachorro.

- Te eh extrañado tanto, pensé que te había sucedido algo, no has contestado tus mensajes, ni tu llamadas, ¿Donde has estado? Papá no deja de tomar desde que desapareciste - Está preguntó rápido, miedo y tristeza en los ojos.

- Eh estado en casa de Calle, se me ha perdido el móvil, por eso no pude contactarte, lo lamento - Está sonrió, omitiendo la parte de los cuatro chicos, para no preocuparla más de lo que estaba - y tú, ¿Te encuentras bien? ¿No te ha hecho nada? - Esta preguntó, observando a su hermana por encima, buscando alguna marca.

- Él apenas a estado en la casa, solo llega a dormir a cualquier hora antes de irse de nuevo - La menor confesó - ¿Quien es el pequeño? - Comentó parándose del suelo, y tomando al cachorro.

- Ramón, fue un regalo de Daniela - está confesó, levantándose del suelo - Vamos a entrar, tenemos cosas de que hablar - Está finalizó pasándole por el lado a la menor y entrando, con su semblante serio nuevamente.

------- Con Juanpa -------

Juanpa se levantó de la cama dirigiéndose a la ducha, y bañándose, unos minutos luego salió, envolviendo la toalla a su alrededor en la parte baja, saliendo del baño. Entró a su habitación sus pasos frenando al ver, a la castaña con una cámara en la mano grabándolo, mientras con la otra tenía la misma pistola que uso con Mario.

- A la verdad que las cámaras engañan con el tamaño de las cosas - Comentó con un tono de burla, viendo como la toalla del chico se aflojaba y caía al suelo.

Te Entregare Mi Corazón - [Completado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora