Someday Mine |ZM| En Edición.

Capítulo 25

Capítulo 25

Suspire pesadamente removiendo mi cuerpo entre las acolchadas sábanas, hacia frío pero las sábanas de algodón calentaban mi cuerpo, no era del todo consiente, aún seguía dormida, y ahí estaba de nuevo un sonido a lo lejos que me esta obligando a salir a la realidad. Uno... Dos ... Tres, golpes molestos en mi puerta, abrí los ojos de golpe, se cerraron al instante cuando la luz choco contra ellos. Obligue a mi cuerpo a levantarse, con pasos perezosos y torpes me dirigí a la puerta hasta abrir la puerta.

-Permiso.

Todo fue tan rápido mi cuerpo dio un giro hasta quedar otra vez en su lugar, parpadee un par de veces y eche un vistazo a Zayn que corría hacia el baño. Mire el reloj y marcaban las 6:12 am.

-Lo lamento me urgía ir- salió del baño- Necesitaba ir. Espero que puedas recobrar el sueño- palmeó mi hombro y salió de mi cuarto.

-"Me urgía ir"- repetí mofando imitando su voz con fastidio.

¿Qué se puede hacer un sábado a las 6:12am? Ya que la opción más lógica que sería dormir, ya ha sido estropeada. No soy de las personas que pueden recobrar el sueño tan fácilmente.

***

Había pasado mucho tiempo desde que no me sentaba en la vieja banca del parque, en realidad había pasado ya mucho tiempo que no venía al parque. Simplemente lo había olvidado y no se porque mis pies me llevaron allí, mi hermana detesta este sitio simplemente no podía mantenerse tranquila cuando venía aquí y mi madre no necesita muchas razones para odiarlo sólo lo hace. Y creo que no sería bien visto por ella encontrarme aquí. Sólo no se que me hizo regresar, de igual manera el pasado siempre estará presente en todo momento de cualquiera de nuestras vidas solo que muchos deciden simular no recordarlo, yo nunca podré escapar de él porque a pesar de todo el daño que me hizo y me hace al recordarlo quisiera volver a vivir algunos de esos viejos momentos en el que algunas vez hubieron tiempos felices.

Camine por la larga vereda sin un rumbo fijo, tenía todo el tiempo que quisiera, podía hacer lo que quisiera, podía pesar con tranquilidad. Solo faltan unos cuantos meses para la graduación, y aún no se que estudiare en la universidad ¿debería preocuparme? No lo se. Mi hermana tiene claro su futuro y el mío cada vez se nubla más, mi madre quiere que sea el ejemplo, y yo sólo quiero ser yo.

Veía a la gente caminar a los alrededores, rostros que jamás vi en mi vida y que quizás jamás volveré a ver.

-Disculpa- un leve toque en mi hombro me hizo sobresaltar y girarme a la derecha.

Un chico mucho más alto que yo, ojos claros de unos diecinueve años de edad si no me equivoco, y algo en su rostro que me gritaba que había algo en él familiar. Eso me paralizo por completo.

-¿Si?- pronuncie débilmente.

-¿Como se llama esta calle?- pregunto con su ceño levemente fruncido.

Lo mire detenidamente en busca de ese algo.

-No soy de la ciudad estoy de visita y me perdí- explicó rascando su nuca.

Me di cuenta que aún lo miraba, y trate de sonar casual.

-Oh por supuesto- trate de disimular, para no verme más extraña- Estas en la calle trece, a unas cuadras está el Starbucks ¿lo conoces?

-Claro, por lo visto no estoy tan perdido.

Le sonríe como si lo conociera de toda la vida y eso se me hizo extraño.

-Por cierto me llamo Derek- dijo extendiendo su mano hacia mi.

-_________ un placer- le tome la mano, estrechándola suavemente.