Despedida de soltero.

Capítulo 37: Al revés.

- ¿Qué estoy haciendo? ¿Qué me está pasando? -Se decía Stan a si mismo.

En esos momentos, escuchó unos golpes en la puerta del baño.

- Stan... -Dijo Kenny desde afuera.

- ¿¿Qué mierda quieres?? -Le gritó Stan.

- ¿Puedo pasar? -Dijo Kenny.

Stan suspiró y se incorporó. Limpió las lágrimas de sus ojos y abrió la puerta.

- ¿Qué pasa Kenny? -Dijo Stan.

Kenny entró al baño.

- Te veo triste, quiero ayudarte. -Dijo Kenny.

- ¡Vamos Kenny! -Stan cerró la puerta del baño- ¡Si estoy así, es por tu maldita culpa!

- ¿Cómo? -Dijo Kenny.

- ¿Por qué nos llevaste a ese cabaret? ¿¿Por qué hiciste eso?? -Dijo Stan- ¿No ves como estoy?

- No quería que te pusieras así, Stan. -Dijo Kenny-. Quería que la pases bien...

- ¡¡¡Kenny!!! Estaba siendo feliz, me estaba por casar y ahora... Ahora no sé que quiero. -Dijo Stan.

- ¿Seguro? -Dijo Kenny-. Yo no recuerdo eso.

- ¿Cómo?

- Recuerdo escucharte decir, textualmente: "¿Sabes? Siempre estuve con Wendy, fue la única persona con la que estuve en toda mi vida. Y ahora pienso que eso no fue tan bueno...". Creo que una persona segura y feliz no hubiese dicho eso... -Dijo Kenny rascándose la cabeza.

- ¿Y no tenías una mejor idea que llevarme a un cabaret para confundirme aún más? -Dijo Stan.

- ¿Y que crees que habría pasado si no hubieses ido? -Dijo Kenny- ¿Todas tus dudas desaparecerían el día de tu boda? 

- ¡No! -Dijo Stan- ¡Pero por lo menos no tendría a Kyle en la cabeza! ¡Torturándome, todas las noches!

- ¿Cómo? -Kenny no pudo evitar sonreír.

- Sueño todos los días con él... -Los ojos de Stan se volvieron a humedecer-. Nadie me había impactado de esa manera, y ni siquiera hace una semana que lo conozco. Estoy a una semana de mi boda y solo puedo pensar en Kyle...

- Y... ¿Por qué no se lo dices? -Dijo Kenny.

- ¿¿A Kyle?? No, no podría...

- A Wendy. -Dijo Kenny.

- ¿¿QUÉ?? -Gritó Stan- ¿Estás loco? No puedo decírselo a Wendy, yo le pedí que se case conmigo y ahora a una semana no puedo cancelar todo porque estoy... Ligeramente confundido.

- ¿Ligeramente? -Dijo Kenny levantando una ceja.

- Bien, muy confundido. -Dijo Stan-. No sé que hacer...

- Bien, ya que no le dirás a Wendy lo mínimo que podrías hacer es posponer la boda. -Dijo Kenny.

- ¡Kenny! ¡Es una boda! No es tan sencillo. -Dijo Stan- Además ¿qué le diría a Wendy? Disculpa, estoy muy confundido, necesito pensar las cosas... -Stan se tomó los cabellos-. No sé que hacer... 

- Oh, Stan relájate... -Dijo Kenny rodeándolo con los brazos.

- ¿¿Cómo puedo estarlo?? -Dijo Stan-. Kenny... Hoy casi beso a Kyle. 

- ¿¿De veras?? -Dijo Kenny sonriendo.

- ¡No sonrías! ¡Casi engaño a Wendy, con un hombre! -La respiración de Stan se comenzó a acelerar-. Pero quería Kenny, quería besar a un chico... Pero no puedo... Estoy con Wendy y siempre me sentí heterosexual pero ¿ahora? No sé que hacer, no sé si debería besar a Kyle, no puedo, pero quiero, per...

El monólogo de Stan fue interrumpido por Kenny. Que lo tomó de los hombros y lo besó en los labios. Stan se congeló por unos segundos. Cuando reaccionó, empujó a su amigo.

- ¡KENNY! -Comenzó a gritar Stan- ¿¿QUÉ MIERDA??

- Listo, ya besaste a un chico. -Dijo Kenny-. Ahora ve y besa a Kyle.

- ¡¡Kenny tienes suerte de que ser mi amigo o te estaría pateando el culo!! -Dijo Stan.

- Hazlo, no me molesta, me lo merezco. -Dijo Kenny.

- ¿¿Por qué mierda hiciste esto?? -Dijo Stan limpiándose los labios.

- ¡¡Porque me duele ver como te engañas a ti mismo!! -Dijo Kenny agarrando a Stan de los hombros- ¡Besar a un chico y a una chica es exactamente la misma mierda! Lo importante siempre será con quien te estás besando... Si en vez de mi, hubiese sido Kyle el que te robaba un beso, no te habrías puesto así ¡Y lo sabes! ¡No estás molesto porque te di un beso, estás molesto porque no soy Kyle! 

- ¡Sí, estoy molesto porque acabas de besarme! -Dijo Stan.

- ¿Y cuál es la razón? -Dijo Kenny-. Sé sincero.

- Porque, no tuviste mi consentimiento.

- Lo sé, por eso me separé ni bien sentí tu rechazo. -Dijo Kenny-. Si te hace sentir mejor, lo siento. Ahora dime Stan... -Kenny apoyó su mano en el hombro de Stan- ¿Qué piensas en estos momentos?

- Que... Que... ¡Me gustaría ser como tu! -Stan abrazó a Kenny-. Querría ser tan libre como tu Kenny, siempre te tuve envidia ¡Y ahora más que nunca!

Kenny se quedó callado, abrazó a Stan. Se quedaron así por unos segundos. Kenny acariciaba el pelo de Stan, tratando de tranquilizarlo.

- Tranquilo Stan...

- ¡¿Por qué me cuesta tanto, Kenny?! ¿¿Por qué?? -Dijo Stan.

- Porque haces las cosas al revés... -Dijo Kenny-. Piensas mucho en ti mismo, pero actúas como quieren los demás. Deberías pensar más en los demás y actuar como tu mismo. 

- ¿Qué? -Dijo Stan.

Kenny suspiró y se despegó de Stan.

- Ya lo entenderás Stan. Ahora deberías descansar...

- No quiero, quiero estar con ustedes. -Stan suspiró-. Por más de que diga lo contrario su compañía me hace sentir mejor...

- Bien, en ese caso ¡Será pijamada! -Dijo Kenny-. Hasta que Token y Damien vayan a tu cuarto a coger...

- ¿¿Qué?? -Dijo Stan- ¿Dormirán en mi cuarto?

- Ya lo reclamaron... -Rió Kenny.

- Esos hijos de put... -Stan suspiró-. Está bien, puedo dormir en otro lado.

- Puedes dormir con Buttes y conmigo. -Dijo Kenny guiñándole el ojo.

- Kenny, si sigues así sí te patearé el culo.

- ¡Era broma! -Rió Kenny mientras abría la puerta del baño- ¿Vamos?

- Sí... -Contestó Stan.

Kenny comenzó a salir.

- Ah, Kenny... -Dijo Stan-. Gracias. 

Kenny sonrió.

- No tienes nada que agradecer. -Dijo Kenny- ¿Vamos por las cervezas?

- Sí. -Sonrió Stan.