Te atravesaste en mi camino. (Tom Holland)

16-¡A jugar!

Tomé la decena de huevos que compré y puse a hervir la mitad. Esperamos a que estuvieran listos y los dejé enfriar, después los mezcle muy bien y los volví a poner en su cartón. Nos acomodamos en la mesa del comedor Tom, Jake, Hazza y yo; pero dejamos un gran espacio vacío frente a nosotros.
La dinámica: era una adaptación del juego de caras y gestos, estilo pictureka que uno de los chicos tenía, solo que la peculiaridad era que los dos jugadores con menor puntuación se enfrentarían a muerte en una batalla de preguntas "Cierto o falso". Cada vez que alguno se equivocara tendría que estrellarse un huevo en la cabeza que, podría estar cocido o no. Y como cereza del pastel el que más sucio quedara estaba obligado a tomarse una sesión de fotos con los ganadores y sería el último en poder ducharse.

Empezamos. El primero en pasar fue el osado Hazza. Tomó su tarjeta y empezó a ¿Bailar? Parecía una hawaiana pésima en el baile. Desde ese momento supe que sería una noche inolvidable.
-Moana.- sugirió Tom, a lo que su amigo negó con la cabeza.
Empezó a mover más la cadera y a acariciarse un largo cabello imaginario.
-¡La sirenita!- grité.
-Woo- exclamó Harrison que fue a chocar la mano conmigo y posteriormente a su lugar. Diablos. Por orden de las manecillas del reloj era mi turno. Tomé la tarjeta. "The Greench" ¿Cómo iba a actuar eso? Intenté hacer una sonrisa enorme y muecas como las de el personaje. Ellos se reían y yo sentía como el color rojo se instalaba en mis mejillas. Di pasos y ademanes que recordaba haber visto en la caricatura pero no funcionó.
-Esa sonrisa...¡El guasón! No¡Batman!- ya imaginarán quien dijo eso.
-El payaso Eso.
-La pantera rosa.
¿Tan mal lo estaba haciendo? Los nervios y sus respuestas me hacían reír mucho. Sonó la alarma, mi minuto había terminado. Era la primera ronda y ya iba perdiendo.
-El Greench.- dije rendida.
-Ohh.-exclamaron todos como diciendo "Claro ¿Por qué no lo dije?"
Pasó Jake. Dejó su tarjeta boca abajo y se dirigió a nosotros. Alzó un dedo. "Una palabra" pensé. Se puso firme con una mirada exageradamente seria y puso sus manos a los lados. Después se puso una gorra imaginaria.
-¡Capitán América!
-Soldado...
-¿Cadete?
A todo nos decía que no. Movió sus manos como diciéndonos tontos. Empezó a caminar y parecía estar ¿Cuidando algo? Parecía abrir y cerrar una caja o...una celda.
-¿Policia?
Negó de nuevo. Se metió a la celda y empezó a actuar como un loco, como un mono, tal vez un mono con rabia o algo así. Sus gestos y movimientos me hacían estallar en carcajadas hasta que se me prendió el foco.
-¡Zookeeper!
-¡Si!
Pero justo cuando mis labios pronunciaban la z sonaba la alarma marcando el fin del tiempo de Jake.
-Ñaa. No cuenta.- dijo Haz.
-¿Qué? Lo dijo antes.- se defendió.
-Lo dijo después.
-Lo dijo durante.- se metió Tom.
Jake me miró pidiendo apoyo pero eso no iba a suceder, ya iba perdiendo y no quería undirme en el lodo yo sola.
-Lo dije durante, no cuenta.
-Los odio.- declaró el hawaiano aceptando la derrota.
Ahora era el turno de hacer el ridículo de Tom. Cogió su tarjeta. Una sonrisa perversa se asomó en su rostro y en seguida dirigió su mirada a mi. Algo tramaba, era obvio, pero ¿Qué era?
Se paró y enseñó tres dedos, lo que significaba "tres palabras".
Su mirada y su pose cambiaron en un santiamén. Se veía seguro de si mismo, tal vez egocéntrico. "Si que es buen actor" pensé. Se le notaba una mirada seductora. Empezó a caminar con cierto aire se masculinidad que no le venía nada mal. Se sacó los zapatos de un movimiento ¿Por qué había hecho eso? Parecía muy seguro de lo que hacía. Se detuvo y pasó su mano derecha por su cabello, despeinandolo un poco, mientras la otra la posaba en su cintura. Oh Dios, se veía tan guapo en esos momentos.
Se me secó la boca cuando vi que se dirigía lenta, sensual y provocativamente hacia mi. Bailaba muy sexy mientras se aproximaba a mi silla. Se detuvo cuando estuvo a unos centímentros de mis rodillas. Se quitó la remera blanca que traía de una forma lenta y tortuosa, como todo un profesional, dejando al descubierto su musculoso y tonificado abdomen. Estuve a punto de colapsar cuando me lanzó una jodidamente hermosa sonrisa de las suyas. Volvió a su rutina de baile. Nos bailaba, o mejor dicho, me bailaba mientras se escuchaban los gritos y bitoreos de nuestros amigos. Tomó una de mis manos, la puso en su pecho y la fue deslizando hacia abajo por todo su tórax. Estaba más roja que un tomate y no sabía si era yo o la temperatura había subido mucho de un momento a otro. Mientras las puntas de mis dedos recorrían su piel yo reía como una tonta, como una de esas mujeres de la tele que tienen lentes, brackets y una uniceja cuando les dicen que son guapas. Me maldije internamente por no poder ocultarlo. Justo cuando iba a hacer otro movimiento de striper sonó la alarma. "Maldita alarma", el minuto pasó.
-Era Magic Mike XXL-dijo Harrison.
Ambos lo miramos.
-¿Sabias qué película era y no la dijiste?-preguntó Tom, ya que yo aún no podía articular palabra alguna.
-Si, es que no estaba seguro- dijo con sarcasmo total- además de que no quería interrumpir.
Traté de parecer normal y simplemente rodé los ojos.
Seguimos pasando por turnos pero no recuerdo mucho, siempre que lo intento me encuentro con esa rutina de strip tease al caliente estilo Holland.

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Aun no acaba el juego, esto es solo una pausa para que visualizaran lo que acaba de pasar.
😂😈😍😋
🔥🚒¡Llamen a los bomberos!🚒🔥
😂😆ok no
Espero que la historia les este gustando. No olviden votar y comentar.
Las ai lofiu.