Crossing Roads - Terminada

Its Funny to be mean

Hola Hola Corazones... Esto no es un cap bien hecho y derecho. Soy una basura lo sé. ¿Cómo los dejo en espera durante tanto tiempo? ¿Cómo los dejo en suspenso? Sobre todo después de que apareciera Quíone... Pues este es el momento en que debería darles mi justificación, pero no tengo justificación. Mi inspiración se fue al carajo, mi cerebro se bloqueo por sobrecarga de historias(Crossing Roads, Who Killed that Bitch?, Intituto de delincuentes Juveniles y los Oneshot), de feria está el estudio y mi vida social cof cof no tengo cof cof.

Para incrementar mi culpa, el cap anterior tiene más de 250 comentarios... Soy un ser humano despreciable, no los merezco mis queridos lectores, no los merezco *ahoga un sollozo* Son los mejores del mundo, cuando empecé la historia no esperaba que nadie la leyera y ahora aparece en numero 360 y algo en fanfic, gracias a ustedes *se limpia las lágrimas y se frota los ojos*

Se los compensaré, peeero no estoy segura de cómo hacerlo, así que les doy libre cancha, comenten su deseo, su petición, ya sea para este fic o para cualquiera de los otros(también OneShots si quieren). No se vale pedirme cosas imposibles o me veré obligada a hacer trampa. Pero pidan, lo que quieran, sin vergüenza.

Como dije, esto no es exactamente un cap... Es... una nueva perspectiva. Espero que lo disfruten.

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Cuando Drew vio las fotografías que la perra de McLean publicó en todas sus Redes Sociales, no lo podía creer. Esto simplemente no podía estar pasando. Su fiesta debía ser la mejor fiesta del siglo. ¿Cómo era que ahora aparecían esas perras y arruinaban lo que tanto esfuerzo le había costado? Intentó relajarse, no todo estaba perdido, no tenía por qué ser una fiesta mejor que la suya ¿o sí?

Con todo el descaro del mundo, inició a revisar las fotografías. Parecía ser una fiesta en la playa, no solo estaba la cheroqui esa, sino que también las estúpidas de sus amigas. Y sus extremadamente sexys novios. No solo eso, había un millón de chicos bien marcados, con sus músculos al aire. La piel brillando justo como en esa película "American Pie". Los comentarios decían todo tipo de estupideces: "ustedes si que saben hacer una fiesta", "De haberlo sabido habría ido con ustedes en lugar de a la fiesta de Drew", "Esa fiesta estuvo más caliente que el sol, ¿Como es que no estuve ahí", "Muerte a la Perra, que vivan las reinas". Ese último casi la hizo perder el control, sin embargo, aun pudo retenerse por unos cuantos minutos, hasta que encontró el vídeo.

Con más de un millón de visitas, una grabación encabezaba todas las publicaciones del día, y al parecer se mantendría así durante todo el mes. Según lo que pudo escuchar, todos hablaban acerca del suceso, y estaban tan emocionados por ello como si lo estuvieran viendo en vivo.

"Nico di Angelo vs Leo Valdez", se titulaba el vídeo. Cuando Drew terminó de verlo, los maldijo durante al menos dos horas, hasta que su voz empezó a salir lo suficientemente ronca como para asustarla. Se había jalado tanto el cabello que tenía miedo de quedarse calva. Los comentarios eran lo peor. Nunca había leído a tantas chicas declararse enamoradas de ese par de idiotas. Ella tenía que admitir que había salido una vez con Valdez, y había intentado un movimiento con di Angelo, pero ninguno de los dos se mostró demasiado interesado. Sin embargo, esto ya era una completa exageración. Había incluso una chica que aseguraba haber hecho un trío con ambos. Maldita zorra suertuda.

Sabía que ver todas estas cosas le hacía mal, sin embargo no podía evitarlo. Simplemente no podía parar de leer las publicaciones, los comentarios, las comparaciones entre ambas fiestas. Deseaba encontrar a sus supuestos amigos apoyándola, sin embargo los muy imbéciles no paraban de alabar la fiesta de esas infelices de mierda.

Cuando la puerta de su habitación se abrió, levantó la vista y forzó una sonrisa, a pesar de que lo que más quería justo en ese momento era romperle la laptop en la cabeza a Robert, quien era el que venía entrando. Él tampoco se mostraba muy feliz, a decir verdad, tenía el mismo aura de ira contenida que ella tenía. Tanaka se sorprendió al notar que su nuevamente novio no venía solo. Octavian lo acompañaba.