Adult Ceremony (Jikook)

05

—¡Mierda!— exclamé al ver la cocina hecha un desastre. No sé es qué pensaba TaeHyung.

—Sabes que, mejor vamos a fuera y te compro algo para que comas— le dije enojado.

—Pero no fue mi intención JungKook— trata de disculparse pero ya no hay nada que podamos hacer.  

—Yah, no te preocupes— tomamos nuestras cosas y salimos.

No puedo invitarlo a Starbucks a desyaunar porque tengo que ir donde mi padre, no pienso atrasarme más así que espero que se conforme con un café y galletas integrales en la empresa.

—¡JUNGKOOK!— gritó TaeHyung, se ha dado de cuenta que no vamos a alguna cafetería en especial.

...

—¿Cómo estás hijo? Toma asiento— me dijo amable mi padre.

—Buenos días padre— le dije a mí padre al ver a otro señor dentro de la oficina.

—JungKook te presento al señor Park—dijo mi padre la cerrar la puerta tras de mí.

—Mucho gusto señor Park— le extiendo la mano cordialmente.

—El gusto es mío— se nota que es alguien muy serio y gruñón.

—JungKook, el señor Park aquí presente desde ahora va a trabajar con nosotros. — creo que me quiere involucrar en algo —Sin embargo eres un experto también en negocios así que cualquier cosa para que llame tendrás que venir

—¿Dónde queda mi trabajo en la agencia?— no puedo retirarme del modelaje, sería mi perdición, no quiero involucrarme en negocios.

—Oh vamos, eso no es nada, además el hijo del señor Park también nos colaborará.

Ya quiero conocer a su hijo — bueno padre, te ayudaré en lo que quieras.

—No tengo más que decirte así que retirate— fue algo cortante pero no me importa, creo que ya quiero empezar esto. Solo espero que aquel chico sea gay.

—Adiós padre, adiós señor Park— creo que soy un chico muy amable, como no me pueden amar.

Salgo de la oficina corriendo hasta donde dejé a TaeHyung.

—¿Te gustó el café?— dije con burla, aquí solo hay café negro o con leche normal. TaeHyung ama su café con ese vaso con su nombre.

...

—¿Cómo te fue con aquel chico?— suelto de repente.

—No sé de que hablas JungKook— estos temas le pone súper incómodo.

—No te hagas, vi como se besaban.

—Estabas muy borracho, de seguro me confundiste.

—Solo tomé dos vasos, nada fuera de lo común— por culpa de los otros no pude disfrutar mucho.

—Somo novios— se toma las cosas muy enserio con los hombres —¡PON TU OJOS EN CARRETERA!

—¡Yah! Me colocaste nervioso— dije sin más, me importa más quien es el novio de TaeHyung que si le sucede algo al auto.

Llegamos al supermercado, compramos comida chatarra pero al final TaeHyung terminó de convencerme de llevar carne, definitivamente va a ser un largo día.

...

Luego de haber llegado un poco tarde a la reunión, mi padre me presentó al señor Jeon. Pobre hombre lo que le espera con mi padre como socio.

—Te pondré al tanto— dijo mi padre al estar detro de su auto — mi plan es verder droga a Jeon, lo rechazará pero luego no la podrá dejar al probarla. Voy a convertirlo en un vicioso hasta que tenga que sacar dinero de sus negocios, tendrá deudas, la empresa caerá en bancarrota. No va a tener con que pagar así que tú tienes que ir por su hijo.

—Pero tenemos que sacar dinero de ello.— hay que pensar en lo más importante.

—Por eso está su hijo. Mañana empezará todo—.se está colocando nervioso— sal de mi auto ahora.

...

Después de comer todo lo que teníamos, TaeHyung saca las cervezas frías de la nevera. Ahora nos encontramos en el patio trasero escuchando algo de música mientras nuestros cuerpos semidesnudos reciben la brisa fresca.
De un salto mientras la noche cae, entramos a la piscina; el agua tibia cubre nuestros cuerpos.

—Toma JungKook— TaeHyung en la orilla de la piscina me extiende una lata de cerveza.

Mientras tomamos cerveza tras cerveza contamos nuestras anécdotas pasadas sobre rechazos; sacamos en conclusión que nadie nos quiere.
Yo solté unas cuantas lágrimas de las cuales nos llevó a esta situación: Tengo a mi amigo contra la pared de la piscina mientras el me toma de la nuca, nuestros labios se unen una y otra vez.

Por necesidad de un respiro separamos nuestros labios y nuestras miradas se encontraron.

—Tal vez nosotros si no podamos amar— dije en un susurro. Mirando sus labios de nuevo decido salirme de la piscina con él tomados de la mano hacia el sofá.

El resto de la noche pasó entre gemidos, sudor y roces de placer.