"Speechless" - TERMINADA-

"I need you"

A solo dos capitulos del final muchas gracias por el apoyo!!! besos enormes disfruten su dia! se les quiere <3 <3

Entramos a nuestra habitación, Mike tomó mi bolso y lo dejó en un lado. Me abrazó tan fuerte... podía sentir sus latidos confundirse con los míos. Hundí mi rostro en su pecho y cerré mis ojos, me sentía tan protegida. Como una niña en sus brazos. Su respiración era una música celestial, y su aroma me hacía sentir que él es mi hogar. En el calor de su pecho me perdí.

— No amor, no quiero que tengas más pena, ¿qué pasa? — Pregunto Mi-chael percibiendo mi tristeza.

— Pasa que te amo tanto Michael, tanto que no me cabe esto adentro, no puedo contenerlo, es tan grande que me supera. Me ormes siento tan pequeña en tus brazos...

Sin decirme nada secó mis lágrimas, sonrió conmovido y me besó. Senta-dos en la cama sonreímos nerviosos no sé por qué. Quizás por que me sentía tan niña, tan dócilmente entregada a él. Lentamente y sin ninguna prisa la pasión nos invadía, la ropa era un problema que impedía a nuestros cuerpos estar juntos. Pacientemente nos dejamos llevar.

Michael jugaba con mis cabellos, a mí me gustaba tanto tenerlo así de cerquita... busqué sus labios que respondieron con suavidad. Me abrazaba a su cuello y él acariciaba mi espalda, y de a poco me fue recostando. Nos sacábamos la ropa casi sin darnos cuenta, luego él se detuvo para quedarse mirándome fijamente...

— ¿Te dije que te amo?

— Creo que no —Respondí.

— Si te lo dije, te lo digo cada vez que te miro.

— Repítelo...

Sus tiernos labios se acercaron a los míos y muy delicadamente nuestros cuerpos se unieron. Sólo bastaba cerrar mis ojos para sentir que estaba en el cielo, mis manos recorrían su piel suave y frágil mientras que los latidos de su corazón resonaban en mi pecho. Esa forma de hacerme sentir amada, su voz susurrando quejidos al unísono con los míos. Luego de ese sublime momento volvíamos a la tierra, recuperando el aliento envueltos en caricias y besos.

— Si pudiera hacerte saber todo lo que te amo. —Dijo susurrando con su dulce voz.

— Siempre me lo demuestras, acabas de hacerlo y fue más hermoso que nunca.

— Aún así, siento que no es suficiente. Pase lo que pase, tienes que saber que te amaré siempre. Que tú y los niños son lo que me salvó la vida, que nunca imaginé ser tan feliz como lo soy contigo.

— Mi amor...

— Eres un tesoro tan valioso para mí. ¿Te acuerdas de esa noche... cuándo llovía y nos conocimos?

— Claro que si, todos los días me acuerdo.