Tomorrow [JiKook] [BTS]

Capítulo Especial 1

CAPÍTULO ESPECIAL 1: JEON JUNGKOOK

Salté de la cama en cuanto desperté, cogí mis zapatillas y mi gorrito negro de gatito que adoraba usar y fui corriendo escaleras abajo hasta llegar a la sala, pero estaba desértica, sin borrar mi sonrisa fui hasta la cocina y tampoco había nadie allí...

— ¿Mami? — Repetí varias veces por todas las habitaciones de la casa, pero nadie respondió.

No había nadie y las ganas de sonreír se fueron. Estaba solo de nuevo, me daba miedo estar solo y aunque todos lo sabían seguían haciéndolo.

Cogí de la nevera leche y la coloqué en la encimera. Ahora debía coger los cereales y un bol, pero era tan diminuto que no llegaba a los muebles de arriba. Aunque eso no era problema para mí, me había acostumbrado y ya tenía mis propios trucos para casos emergentes.

Corrí a la sala, cogí una silla y con cuidado de no chocar contra nada la llevé hasta la cocina, "mami me castigará si ve que hice daño a un mueble" "Debo tener cuidado"

Puse la silla pegada a la encimera y me subí, cogí un bol azul del mueble y la caja de cereales de chocolate del otro. Lo eché todo en el bol y me lo llevé hasta la sala para desayunar mientras veía Digimon, "¡mis dibujos favoritos!"

— ¡Vamos, dale fuerte! — Estaba subido de pie en el sofá, me había emocionado demasiado, pero ¿quién no lo haría con esas batallas tan emocionantes? — ¡¡Síííí!!

En ese momento vi cruzar a mami por el marco de la entrada del salón y soltó las bolsas que llevaba en las manos.

— ¡¿Jeon JungKook?! — Oh, oh... que mami me llamara por mi nombre completo no pintaba nada bien. — ¿Qué crees que estás haciendo?

— Veo dibujos... — Bajé mi cabeza arrepentido, de nuevo hice algo malo o al menos eso me decía el tono de mami.

— ¿Cuántas veces te he dicho que los niños buenos no se comportan así? — Puso sus manos en jarra, estaba furiosa. — Bájate de ahí.

— Pero... es que por fin han derrotado a...

— Me importa un pimiento tus dibujos. — Se acercó a mí y me bajó del sofá de un tirón. — Sólo compórtate, ¿entendido?

Asentí, volvió a coger las bolsas y se fue. Me quedé sentado en el sofá pero de repente los dibujos dejaron de ganarse mi atención y terminé apagándola.

— ¡¡JungKook!! — ¿Y ahora que hice?

Seguí la voz de mami y la vi, nuevamente enfadada señalándome las cajas de cereales y leche que dejé fuera.

— Lo siento, se me olvidó guardarlo.

— Guárdalo ahora mismo y en cuanto acabes te vas a tu habitación. — Soltó un suspiro mientras masajeaba su sien con los dedos. — Estás castigado, así que hoy no saldrás de allí.

— ¿Qué?, ¿por qué?

— JungKook cariño, debes ser un buen niño y lo que has hecho no está bien.

— Pero... — No quería volver a pasarme todo el día en mi habitación, era aburrido. — Prometo que no lo haré más, lo juro..., por favor... — Junté mis manos suplicándole.

— Recoge esto y haz lo que dije.

Asentí sin más, sabía que cuando mami se ponía así no había quién le hiciera cambiar de idea. Recogí todo y me fui decaído a mi habitación, cerré la puerta y me tiré en mi cama.