Capitulo 17.

85 15 4
                                    


Matt.

Sentir la mano de Alison junto a la mía en esos momentos era lo mejor que podía haber. Íbamos caminando por un largo pasillo blanco, con paredes y suelo blanco, las puertas de las habitaciones eran blancas, ¿no conocían otro color en este hospital?

Iba pensando cómo habían cambiado nuestros planes del día, íbamos a ir a comer juntos los tres, mamá, Al y yo. Y en ese momento era todo tan distinto.

Llegamos a la habitación donde me habían dicho que estaba mi madre. La 152. Miré a Alison con gesto preocupado, preguntándole sin hablar si quería pasar y ella asintió, comprendió lo que quería decir. Juntos entramos por la puerta, mamá estaba llena de cables por todos los sitios y tenía una mascarilla para poder respirar, sin darme cuenta noté como empezaba a llorar.

Me acerqué a ella y la cogí de la mano, ella abrió los ojos y me sonrió como pudo por debajo de la mascarilla. Trató de decir algo pero la callé.

-Mamá ahora necesitas descansar, ya habrá tiempo de presentaciones. – Dije sonriendo sabiendo lo que estaba pensando mi madre mientras miraba a la preciosa chica que tenía al lado.

Alison se sentó conmigo en uno de los sillones, por cierto, incomodísimos que había en la habitación, daba gracias porque mi madre estuviera sola en su cuarto.

Noté como se quedaba dormida y la dejé descansar. Pero no me iría de ahí. Quería estar con ella.

Alison apoyó su cabeza en mi hombro y susurrando me dijo.

-Es guapísima, ya se a quién te pareces.

-Ya quisiera yo ser tan guapo como lo es mi madre.

-Matt, todo va a salir bien, ya lo verás. Estoy aquí para ayudarte, aunque no elegí estar desde el primer momento, no me arrepiento para nada de haber decidido ayudarte, tanto tú como tu madre lo necesitáis.

La abracé todo lo fuerte que pude. Agradeciéndole sin palabras como había llegado para convertirse en mi salvación.

Alison.

Apoyada en el hombro de Matt y observando a Amber me di cuenta del amor que se tenían, como Matt miraba a su madre, la sonrisa de esta al haber sentido el tacto de su mano. Mis padres y yo no teníamos esa complicidad ni ese cariño. Los quería, claro que los quería, eran mis padres y me habían dado la vida, pero esto era... distinto a mi familia. Me di cuenta de que no hace falta tener mucho dinero o muchas cosas materiales para demostrar cuanto quieres a una persona o no. Basta con ser cariñoso, comprensivo, tratarse bien, el verdadero amor y la verdadera felicidad se encuentran en los lugares más pequeños, en la habitación de un hospital por ejemplo. Y no en una mansión con 5 baños.

Quería ayudarlos. Quería que Matt pudiera hacer feliz a su madre, quería que esa señora pudiera tener una vida digna. Y no tener que estar en el hospital.

-Matt.- Lo llame susurrando. Cuando el me miro continúe hablando- Estaba pensando, que tenía que hablar con mis padres, se lo que hago Matt.-Dije cuando este abrió la boca para responder.-Quiero hablar con ellos para pedirles dinero. Aunque, aún no me has dicho cuánto cuesta la operación de tu madre, tal vez yo tenga suficiente en mi tarjeta.

-Alison, no me parece buena idea que llames a tu familia. Cuesta entre tres mil o tres mil quinientas libras.

-Vaya, no tengo tanto. Tengo unos mil doscientos. ¿Crees que podrías pagar eso de entrada y lo demás al final? Deberías preguntarles a los médicos. Además, tengo una idea para conseguir el dinero.

-¿Cuál es esa idea?

-Todo a su tiempo Matt. Todo a su tiempo. Ahora ve y pregúntale a los médicos si se podría pagar de inicio una cantidad y el resto cuando terminara la operación.

La sonrisa que tenía Matt era tan bonita y tan sincera que habría pagado todo el oro del mundo para que nunca se fuera, que nunca se borrara, que siempre fuera feliz.

Tenía un plan, y esperaba que diera resultado.

Cuando Matt se fue a buscar a algún médico para preguntarle por la operación de su madre esta se despertó. Mirándome sonrió y se separó la mascarilla de su cara.

-Hola cielo, ¿eres amiga de Matt?-Yo no sabía cómo contestar, ¿era su amiga? Realmente no lo sabía.

-Sí, se podría decir que somos amigos.

-Eres muy guapa. Matt no me había dicho que salía con una chica tan guapa cuando mencionó que venía a comer con una chica a casa.

-En realidad no estamos saliendo, solo somos... amigos.

-Cariño, conozco a mi hijo, y nunca había visto mirar así a una chica. Por cierto soy Amber.

-Yo soy Alison. Encantada de conocerla señora. Matt me ha hablado mucho de usted.

-Por favor no me llames de usted, haces que me sienta vieja. Puedes llamarme Amber o Am si te parece más cómodo.

En ese momento Matt entró por la puerta.

-Vaya, ya os habéis conocido.- Nos dijo mientras nos miraba con cariño y una sonrisa.

-Tu novia es muy guapa hijo, ¿Por qué no me lo habías dicho?

-Mamá... no es mi novia, de momento.

¿De momento? ¿Había oído bien? Ser la novia de Matt, no quedaba tan mal. Tener a Matt como pareja seria genial. Es muy considerado. Muy bueno conmigo. Y tiene unos detalles que realmente me encantan. Podría enamorarme de él. Porque aún no lo estaba. ¿Verdad?

Cuidado con lo que eliges.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora