--- UN LITRO DE PENAS ---
— ESA MISMA NOCHE —
El reloj del celular marcaba las 8:40 p.m.
La casa estaba en silencio.
Demasiado.
Jungkook no encendía la televisión ni ponía música como solía hacer. Ni siquiera hablaba con Bam, que yacía dormido a los pies de su cama, con las patas dobladas y el pecho subiendo y bajando con calma. Lo había dejado bañarse, le había dado de cenar, incluso lo había peinado un poco con los dedos. Todo con el piloto automático encendido.
Y aún así, no lograba despejarse.
Había pasado menos de dos horas desde que volvió del parque, y sentía que habían sido años. Sentado sobre el borde de la cama, con una camiseta ancha y pantalones de entrenamiento, sostenía el celular entre los dedos como si pesara una tonelada.
No lo había abierto. No había respondido ningún mensaje. Había dejado a su madre en visto. A Yoongi también. Incluso ignoró el último recordatorio de su productor sobre la entrevista del día siguiente.
Solo una conversación lo seguía persiguiendo, palabra por palabra, retumbando en su cabeza como un eco que se negaba a morir.
> —"La gente te ama así. No la cagues."
—"Te aceptan como eres ahora."
—"Una cosa es que la gente crea que eres sensible. Otra muy distinta es que piensen que eres… demasiado diferente."
Jungkook apretó los dientes.
Se había esforzado tanto por cumplir. Por adaptarse a lo que todos esperaban de él. Por sonreír cuando debía, por mantenerse recto, atractivo, atento. Y ahora todo eso parecía desmoronarse por la forma en que un chico común —con una mirada extrañamente tranquila y honesta— le había hecho sentir cosas que no entendía.
Taehyung.
Ese nombre era como una nota musical encerrada en su pecho.
No lograba olvidarse de su risa, ni de cómo lo miró cuando estaban en la montaña rusa, o cuando compartieron algodón de azúcar, o cuando se recostó en su hombro al final del paseo.
Pero tampoco podía olvidar su propia confusión. El miedo que sintió cuando, por un momento, deseó tocarle el rostro. Cuando quiso decirle algo que no se atrevió ni a formular en su mente.
—No puede estar pasándome esto… —susurró.
Se reclinó hacia atrás, recostando la cabeza contra la pared, los ojos cerrados con fuerza. En su pecho, un nudo se apretaba más con cada recuerdo.
Taehyung riendo.
Taehyung viéndolo sin juicio.
Taehyung escuchándolo de verdad, sin hablar de contratos ni fama.
—Esto no… —Jungkook apretó los ojos—. Yo no soy así.
Lo repitió como un mantra. Como si las palabras pudieran revertir lo que su corazón empezaba a gritar en silencio.
“Soy heterosexual. Siempre lo he sido.”
“Solo fue un día bonito.”
“Me estaba desahogando con alguien amable, no significa nada.”
“Solo fue… compañía.”
Pero no lo era. Lo sabía.
Porque desde que volvió, no podía dejar de pensar en él.
No en Daniela. No en sus fans. No en la carrera que había estado persiguiendo desde niño.
Solo en él.
—Maldita sea, Taehyung… —murmuró, cubriéndose el rostro con ambas manos.
La habitación se volvió más pesada.
La noche caía sin perdón por la gran ventana de su cuarto, cubriendo todo con un azul apagado y frío. Bam hizo un leve ruido al moverse, pero Jungkook ni lo notó. Estaba atrapado en su propio torbellino interno.
ESTÁS LEYENDO
: ~~|• DUMB MISTAKE •|~~ :
FanfictionTaehyung viaja con su familia los Ángeles para ver a su abuela. Su hermano mayor Jimin, está contentísimo pues piensa conocer a su ídolo El joven y guapo cantante Joen Jungkook . A Taehyung le parece una idea ridícula y no entiende Jimin pues , siem...
