El Amante Del Ceo - Kookmin🌹

Capítulo 26

La madre del rubio lo miraba molesta, no estaba de acuerdo con la situación pero desgraciadamente tampoco podía hacer algo. Suspiro y tomo asiento al lado de su hijo, lo abrazo de lado y depósito un beso en su mejilla.

-Estare contigo en todo lo que te propongas.-el rubio suspiro y asintió.- ¿Necesitas el divorcio?

-No quiero soltarlo, lo necesito pero también quisiera olvidarlo, ¿Que puedo hacer?- Su madre suspiro.

-Necesitas perdonarlo y olvidar el daño que te provocó. Es la única manera de poder estar bien con el, olvidando todo el daño.- El rubio se llenó de sentimiento y empezó a llorar.-Llora hijo, saca todo ese dolor, así se empieza a sanar.

-¿Por qué me hizo esto?- se sorbió la nariz.-¿Por qué hacernos esto? No comprendo el afán de enamorarme para luego hacer esto, confíe en el tan ciegamente y termine perdiendo todo.

-Todo toma su tiempo Jimin, no se explicar aquello, no se que pase por la cabeza de Jungkook.- sonrió al decir eso.-Pero si te puedo asegurar que Jungkook no la está pasando bien, llegará el momento en el que vendrá de rodillas a pedirte perdón, todos entendemos la palabra ser padre y aveces el escarmiento viene de otra forma más sutil.

-¿A qué te refieres?-Jimin se soltó del abrazo y miró a su madre.

-¿Permitiriás que tu hijo hiciera daño?- el rubio negó.- Enfócate en sanar ese corazón, el destino se encargará del escarmiento de ese hombre.

Jimin se levantó al escuchar el llanto de su pequeño, lo abrazo e intento consolarlo.

-¿Que paso mi amor, tuviste una pesadilla?-Le depósito pequeños besos en su mejilla.- Ya estoy contigo, nada te pasará.

La señora Park miraba a su hijo tiernamente.

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El rubio iba emocionado hacia la plaza central, su hijo iba atrás en el portabebé jugando con el carro que su padre le había mandado. Al llegar un hombre de mediana edad le abrió la puerta, el rubio agradeció y bajo para sacar a Ha-Ru quien pedía los brazos de Jimin.

-Vamos cariño, tenemos una comida con tu abuela.- saco la pañalera y sonrió al besar la mejilla de su pequeño.

Al entrar un hombre no tan alto se acercó con una sonrisa, era realmente guapo, pero Jimin lo miro con desconfianza.

-¿Puedo ayudarle con su bolso?- El rubio negó y dio pasos hacia atrás.-Una disculpa no quería asustarlo, soy el nuevo guardaespaldas de la Señora Park.

-¿Nuevo guardaespaldas?- ese hombre tenía una cara desinteresada, no cumplía con los gestos de un adorable guardaespaldas.-¿Que paso con Bang-Do?

-Esta en Francia con el Señor Park.-el rubio asintió.

-Gracias por la información pero yo puedo cargar la pañalera.-Siguió su camino hacia la boutique, le pareció molesto ver a ese hombre seguirlo. Cuando pudo ver a su madre se acercó rápidamente.- ¿Quién es el?

La señora sonrió hacia su hijo y miró hacia donde le señalaba, ahí pudo ver a su nuevo y carita guardaespaldas.

-Ven por favor.-ordeno hacia el hombre el cual se acercó enseguida.- El es tu nuevo guardaespaldas.

-¿Que?- miró aquel sujeto de mala manera.- ¿Por que tendría uno yo?

-Por mi nieto, tómalo como una niñera, sin ofenderte -Dijo mirando al hombre.

-No hay problema.- Contesto aquel con una arrogante sonrisa.

-Conozcanse, acaba de llegar mi mejor compradora, ahora vuelvo cariño.-dijo la señora Park alejándose de ese trío.