Capítulo 4

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Los gemidos y gruñidos estaban presentes en ese despacho, las cosas del escritorio estaban regadas en el suelo mientras que esos dos hombres con los pantalón a las rodillas se entregaban hasta el alma, un suspiro a causa del orgasmo de ambos fue suficiente para detener las envestidas dadas por el mayor el cual estaba impregnado de lo placentero que le daba el menor. Se alejo subiéndose el pantalón, se acomodo el cinturón y obligo al menor para hacer lo mismo, cuando termino de arreglarse jalo al castaño y se fundió en un beso muy necesitado.

-Hoy llegaré al departamento, te quiero ahí después de la ocho.-El castaño bañado en esa aura de placer asintió mirando al mayor.- ahora vete, déjame solo.

Jungkook observo salir a Taehyung, suspiro y entro al baño para asearse un poco, al limpiar cualquier residuo de ese niño salió para recoger todo lo del escritorio, lo acomodo y tomo asiento. Abrió uno de los cajones, donde saco la foto de su boda, en ella estaban solamente Jimin y el, por supuesto el estaba completamente feliz pero en cambio el rubio tenía una cara inexpresiva y llena de resentimiento. Había sido casado con alguien que no amaba.

Acomodo la foto y suspiro, no sabía exactamente porque acabo teniendo varios amantes a lo largo de su matrimonio, pero sentía intriga de este pequeño, era con el cual había durado ya dos años y se negaba dejarlo libre, no se imaginaba estar sin el. ¿Era egoísta? Por supuesto que lo era, engañaba al ser que toda su vida amo y ahora está de amante con un niño que jamás logrará amar, solo lo usaría y cuando llegara el momento lo abandonaría, aunque no estaba claro cuando llegaría ese día.
Pero algo tenía claro, no estába obligando a Taehyung hacer las cosas que su retorcida cabeza pide, su placer era infinito y aparte de su amado esposo, Taehyung también sabía cómo apagar ese fuego en su interior.

Miró por milésima vez su teléfono, no estaba seguro de como podría asegurar el resultado final, tantas veces defraudo al pequeño castaño, sin en cambio este siempre lo recibía con los brazos abiertos, tal vez era por el sentimiento del placer en esa ardiente cama.

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Dejo las llaves del auto al valet parking, suspiro al ver el edificio, camino hacia el elevador, no presto atención en absoluto a nadie. Presionó el número y el elevador se dirigió a dicho piso, al abrirse camino por el largo pasillo, suspiro y decidió sacar de su saco las llaves y abrió esa puerta, un olor delicioso inundó sus fosas nasales.

Sonrió al imaginar lo que el castaño hacia, suspiro y al llegar a la sala no vio a nadie, pero escucho ruidos en la cocina, así que se dirigió a ese lugar. Se recargo en el marco de la puerta y observó por mucho tiempo a ese castaño, la forma en como hacia gestos agradables a la comida, el como sonreía, en un descuido acercó demasiado el brazo a la pequeña cacerola haciendo que esté gritara levemente a causa del dolor.
Jungkook se acercó para tomar a Taehyung y acercar su brazo al grifo donde abrió levemente, el agua fría le dio alivio al ardor.

-¿Te encuentras bien?-El castaño sintió extraño la pregunta pero sonrió y asintió.-Debes de tener más cuidado.

Mientras que Taehyung seguía con el brazo bajo el chorro de agua, Jungkook se acercó a la estufa, tomó la cuchara y meneo levemente el contenido de este.

-Huele delicioso.-Tomo el mandil y se lo coloco dejando inmóvil al castaño el cual lo miraba asombrado e inquieto, era una vista demasiado hermosa.-¿Cuando aprendiste a cocinar?

El castaño se aclaró la garganta.

-Vivo solo así que tuve que aprender, no soy tan bueno pero hago el intento.- suspiro y miró su brazo.- ¿Tu desde cuándo.....

-Mi madre me enseñó, antes de que falleciera fui su pinche en todo lo relacionado de la gastronomía.-Sonrio ante el recuerdo.-En mi casa de vez en cuando le cocino a....

Guardo silencio al darse cuenta de la estupidez que iba a decir, se aclaró la garganta, se quitó el mandil poniéndolo en su lugar correspondiente, saco de la alacena dos platos y sirvió con mucho cuidado el líquido de esa grandiosa sopa.

Le hizo señas al castaño y se dirigió hacia el comedor, no era tan grande pero si demasiado cómodo, el castaño llevo los utensilios para a continuación sentarse y empezar a degustar la cena. Jungkook comía en silencio pero estaba tan a gusto al lado de ese castaño, encontraba esa tranquilidad que necesitaba en ese momento.

-Se que es difícil nuestra relación clandestina.-El castaño miró a Jungkook el cual había terminado de cenar.

-Si es algo relacionado con mi vida privada no hagas preguntas.-Este lo miro molesto.-Estamos simplemente para satisfacer nuestras necesidades básicas, solo busco eso Taehyung, para escucharme y darme consejos está Namjoon.

-No me refería a eso.- Jungkook lo miro confundido.- No te exijo nada en absoluto, todo lo que me has dado es porque así lo quieres tu.

-¿Cual es el problema?-Jungkook se estaba cabreando por tal situación.

-Hay que poner días exclusivos para los dos, algo que no solo nos lleve al placer del sexo.- El castaño suspiro al decir esto.-No hay amor en ninguno de los dos y tarde o temprano terminará, así que podemos llevarlo a otro nivel, al menos hasta que sea hora de decir adiós.

-¿Otro nivel?-El mayor soltó una risa desagradable.- ¿Que otro nivel Taehyung?

-No quiero afectar en absoluto tu matrimonio, y estando cerca es despiadado por como tenemos sexo en tu despacho, ¿No tienes miedo que tu esposo nos encuentre?

-Tiene prohibido ir a la empresa.-Taehyung comprendió porque el descaro de Jungkook.- Y no le gusta en absoluto la empresa desde hace varios años.

-¿Por que los obligaron a casarse?-Eso detonó la molestia del mayor.

-¿Quién te dijo eso?- Dejo caer sus manos en la mesa haciendo un ruido demasiado estruendoso.- ¡¿Quién dijo tal estupidez?!

-Todos dicen eso.-El castaño miró las manos temblorosas del mayor.-Pero ahora me doy cuenta que es verdad.

-Es irremediable hablar sobre ello, es mi privacidad y por supuesto de mi familia nadie debe de opinar.

Se levantó y tomo su saco antes de salir dando un portazo dejando nuevamente al castaño solo.

Este suspiro ante este gran drama, dejo todo arreglado antes de marcharse nuevamente a su departamento, al llegar se fue directamente a su habitación donde se acostó y abrazo su almohada para reparar un vacío en su pecho.

-Ahora estarás con el disfrutando sus brazos.

El Amante Del Ceo - Kookmin🌹Where stories live. Discover now