CAPÍTULO VEINTIDÓS - DELETÉREO I

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Narrador Omnisciente

San Juan, Puerto Rico

El cielo que cubre el mar caribe se entinta de oscuridad por la magnificencia de la maldad, convertida en hombre, la cual la máxima seguridad existente lleva capturada entre las redes de eslabones de metal porque un ser como él, que ha desafiado la Manifestación Mundial de los Derechos Humanos adoptados por la Asamblea de la Organización Mundial de Áreas Mandatarias con una transgresión absoluta requería de la fuerza más grande para su represión.

La satisfacción que sienten todos los que acaban de cumplir una orden por capturar a una amenaza mundial está agrandada debido a que conciben que los daños previstos para las naciones han sido extinguidos a pesar de que una mirada de gusto se enaltece al cielo porque su genio destructor provocó tanto a los mansos que se unieron para apresarlo cuando todos sus ensueños escritos con los astros se perpetran a través de su conquista.

Las olas se estrellan queriendo alertar las desolaciones que se aproximan, las cuales se encuentran escritas en un firmamento apagado para las víctimas de un hombre que permanece tranquilo, pese a qué está excitado por dentro.

Aunque con sus dedos aferrados a las cadenas hace una inspección a la Bratva que se enfrenta a los agentes del Servicio Internacional de Seguridad de la Organización Mundial de las Áreas Mandataria debido a que por años la preparó para cuando este momento crucial de su existencia llegara.

Observa el vuelco que hacen a un auto deportivo antes de que la rapidez con la que lo elevan le ofusque la mirada, impidiéndole ver como la mujer que ha quemado, pero herido en innumerables ocasiones, para que el amor que sabe que ella siente no la rindiera a todo lo que él significa, se prepara para hacer lo que, en conversaciones a oscuras, después de fundirse en las armas que simbolizan sus cuerpos desnudos para ellos, juraron hacer.

La respiración controlada de Dominika Kaminski en la cima es observada por los agentes del SIS, ya que ha trabajo con ellos desde hace mucho tiempo como colaboradora, sus experiencias en el KGB fueron admiradas por ellos, aunque su participación con el FSB fue lo que le permitió entrar a la máxima autoridad que hay en el mundo porque todos los organismos están regulados por las normativas que ellos, como órgano de seguridad superior, tienen pautadas para mediar los peligros de los ataques militares, a las crisis económicas, a la imposición política y a la opresión social que puedan afectar a la humanidad como los que se encuentran corrigiendo en este instante.

A pesar de que su dirección en una base corporativa de HADO, en la que desempeña la responsabilidad de dirigir a 77 bases, los hizo extenderle la oferta de formar parte de su servicio, ya que todos los golpes de estados realizados con los ataques paramilitares dirigidos por el presunto mandatario de un régimen autocrático mundial fueron motivos suficientes para dirigir a sus agentes a la detención temprana de lo que aún no comprenden que quiere lograr un ex líder de una de las mafias más peligrosas en los últimos tiempos como la mafia roja, si bien, un hombre con negocios notables en todas las naciones en las que se encuentran establecidos.

Descienden en el helipuerto de la Reserva Militar del Servicio Internacional de Seguridad en Puerto Rico, agentes se alinean para sostener al hombre que permanece indefenso porque lo vivido en Elektra lo convirtió en un adiestramiento, ya que tiene la costumbre de trasformar todo lo que sucede en su entorno en favorable para sus propósitos, como lo ha hecho siempre en la vida de la mujer que tiene incrustada desde los espacios más insondables hasta los más convexos de su ser.

A pesar de que pudo evitar su apresamiento por la anticipación que ha tenido en todas las operaciones que se realizan en su contra; como la que realizan ahora, enterándose de lo que planificaban hacerle con ayuda de su enemiga intima, su tentativa de patentizar los ensayos realizados por la élite de las diferentes ramas del poder de la sociedad en la Penitenciaria Federal de Drakonera le permitió obtener las confirmaciones que requería para establecer los derechos legitimados de su régimen.

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