Capítulo 19: Persigue ese auto

110 57 67
                                    

—Bueno, creo que es mejor que nos vayamos rápido —se apresuró a decir Bradley, algo asustado, y con intención de huir inmediatamente

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Bueno, creo que es mejor que nos vayamos rápido —se apresuró a decir Bradley, algo asustado, y con intención de huir inmediatamente.

—Oigan, esperen un momento. Nosotros vinimos en limusina, pero no la alquilamos para la vuelta —dijo Michael pensativo, mientras observaba la helada calle, atestada de copos de nieve.

—Bueno, si quieren los puedo acercar, ¿dónde viven? —preguntó Bradley.

—En la calle Hanover 243, vivimos nosotros tres —contestó R.J, refiriéndose a Michael y a Dan.

—Está bien, me queda cerca, vamos —propuso Bradley, guiándolos hasta su auto.

No obstante, las chicas aún seguían allí.

—Amor, ¿y tú en que te irás? —le preguntó Nick a Kumiko.

—Yo, Sophie, Tiffany y Jessica nos iremos en el auto de Amul, él vive cerca a la casa de mis padres —contestó ella.

—Esta bien, entonces te veo mañana —le dijo Nick, y luego la beso—. ¡Feliz año a todos! —proclamó, en un tono alegre.

En ese momento, Bradley abrió las puertas de su auto, mientras se escuchaban unos: «feliz año» que volaban por el aire oscuro.

De inmediato, Dan subió ocupando toneladas de espacio, después lo siguió R.J, Nick, y seguramente, Michael tendría que sentarse encima de alguno de ellos, como consecuencia del peso de Dan.

Y, fue en un segundo tan veloz, de esos que no se ven, de aquellos que son casi invisibles, de esos que parecen fugaces y extraños, cuando Charlotte estaba a punto de abrir la puerta delantera, y un sujeto de piel oscura y rostro difuso, la agarró por la espalda. De pronto, le cubrió la boca intempestivamente, con un pañuelo color blanco de aquellos que tienen «presuntas sustancias peligrosas», cosa que efectuó que ella cayera en un profundo sueño, y que Bradley, que de repente se puso pálido, saliese del auto con intención de luchar contra el misterioso sujeto. En ese mismo santiamén, otro hombre alto y de ojos azules tan claros que daba la ilusión que no tuviese iris, le lanzó un curioso polvo púrpura en el rostro, lo que efectuó que él, entrase en un peculiar estado de confusión, mientras Charlotte ya era metida en el baúl de aquel auto un Ford Mustang 1967 color negro que estaba justo enfrente.

Los demás estaban petrificados, presenciando un atroz miedo imprevisible, con los ojos tan abiertos que lucían redondos.

Si bien, fue mala suerte que el auto misterioso arrancó, con prontitud.

—¡Bradley montate, tenemos que seguir ese auto! —gritó Nick, con terror pintado en el rostro—. Bueno, y también llamar a la policía...

Bradley se quedó inmóvil y frotándose los ojos, como si no escuchase las palabras de Nick. No obstante, fue empujado por R.J a la parte trasera del auto, en cuanto Nick pasó al volante, arrancando a tanta velocidad que hasta sus manos sintieron adrenalina.

Sicretum (algo oculta Salem)  Where stories live. Discover now