Epílogo

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–Y esta es la cocina –presumió Heechul mientras dirigía el recorrido por su nuevo nido de amor.

–Debes odiar a Hangeng, ¿por qué le hiciste invertir tanto en esta área si no sabes siquiera cocinar? –comentó Kyuhyun conociendo las aberraciones culinarias de las que eran capaces esas manos delicadas.

–Me gustan las cosas lindas –respondió–. Además, las cocinas no solo sirven para cocinar.

–¿A qué te refie...? –iba a preguntar Donghae hasta que su mirada se cruzó con la de Kyuhyun y este movió la cabeza diciéndole en silencio que no continuara.

En esos días Heechul desprendía un olor dulzón casi asfixiante cuando se emocionaba al hablar sobre su futuro al lado de Hangeng y por esa razón había comenzado a llevar un ambientador con él porque a diferencia de Donghae y Kibum, su rango alfa lo hacía susceptible a sus molestas feromonas.

La casa era linda a pesar de su abrumante tonalidad blanca y aunque Heechul se había ganado el mote de "loco Kim" en la compañía por muchas razones, le sorprendió ver lo meticuloso que era con la limpieza.

"Siempre creí que sería un flojo con complejo de princesa fuera de casa, pero me equivoqué"

–Hannie dijo que yo podía decorar la casa como quisiera, pero insistió en encargarse personalmente de la habitación de las gemelas, ¿no es linda?

"Buena suerte Hangeng" pensó recordando su experiencia cercana con gemelos debido a su noona, el pobre sujeto la tendría difícil incluso después de casarse con alguien loco como Heechul. Vio a Donghae emocionarse y curiosear en el espacio y se preguntó si su instinto de omega estaba activándose porque de pronto ambos compañeros de categoría estaban demasiado emocionados, tanto que creía que sobraba ahí.

–Espero que tus bebés sean más lindas que ese de ahí o el médico se va a asustar al recibirlas.

–¡Oye! –se quejó Donghae–. Yo era lindo de bebé.

–Exacto, eras –se burló.

Risas, maldiciones y algunos empujones comenzaron a agitar las cosas hasta que una presencia fuerte se hizo presente y bueno, tener que explicarle a un alfa en espera de cachorros que su esposo en una pose comprometedora con otro omega no estaba haciendo nada mientras un sujeto los miraba de repente pareció algo complicado de explicar.

–Bienvenido, cariño –soltó Heechul con su aire de sinvergüenza de siempre.

–¿Hyung?

–¿Dongsaeng? –soltaron los otros cuando vieron a sus compañeros aparecer detrás del alfa felino.

Y de pronto una visita se convirtió en una reunión en donde para suerte de Kyuhyun, se encontraba su pequeña bolita de masa que solía protegerlo de la ira de su padre en momentos donde hacía algo que no debía. Se despidieron temprano porque Hayi necesitaba dormir y luego de llegar a casa, Kyuhyun puso en marcha uno de sus tantos planes para seducir a su compañero.

–Acabas de tener tu celo el fin de semana, ¿no fue suficiente?

–Lo dices como si te hubiera follado toda la tarde –sonrió–. Cierto, lo hice.

–Deja tus juegos para después, en dos días tengo un viaje de negocios –le dijo mientras terminaba de colocarse su pijama.

–¿Vas a dejarnos?, ¿cuándo pensabas decírmelo?

–Hayi irá conmigo.

–¿Qué?, ¿me van a abandonar?

–No seas dramático, solo será por unos días.

Fraternizando con el alfa {KyuSung}Where stories live. Discover now