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TZUYU

Las cosas con Sana iban bien. Estábamos aprendiendo a llevarnos mejor -dentro de lo que cabía- y yo estaba descubriendo que su mundo no era tan malo como parecía. Mina y Momo eran muy divertidas y Taehyung y Jungkook eran amables y sencillos a pesar de estar forrados en dinero. Me sentía mal por preguntarme qué diablos hacían como amigos de Sana.

Aunque claro, todo fuera del campus era diferente. Seguíamos hablándonos mal y peleando un poco pero siento que eso se había convertido más en una costumbre que en una batalla verdadera, excepto en ciertas ocasiones en que sus comentarios sobre mi condición económica realmente lograba hacerme sentir mal. Un poco.

Sin embargo, por otra parte, aunque intentaba ignorarlo, era un hecho que había una parte de mí que sucumbía ante sus impulsos cuando se trataba de defender a Sana. Era como si todo lo malo de ella se me olvidara cuando alguien trataba de hacerle daño o hacerla sentir mal. Me pasaba cada vez que Jimin se acercaba a ella o a mí y también con cada insinuación de Elkie.

La tarde en que la rechacé frente a Sana no había sido la primera vez que Elkie había intentado lograr algo conmigo. Me la había topado un par de veces por el campus y siempre era muy sugerente pero yo le había dejado claro desde el principio que no me interesaba tener ningún tipo de relación con ella. Elkie era guapa, de hecho era condenadamente atractiva, pero yo no estaba en posición de iniciar algo con alguien, no cuando tenía un noviazgo con Sana, aunque fuese falso.

Una mañana se lo conté a Momo y ella me dijo que Elkie había sido la chica con la cual Jimin había engañado a Sana en varias ocasiones. Sentí repudio por ambos, sobre todo al recordar lo afectada que se veía el día que los encontré juntos.

Fue esa misma tarde cuando Elkie me abordó, mientras esperaba a Sana y se insinuó una vez más, al principio traté de ignorarla, sólo la escuchaba hablar y hablar acerca de lo bien que podríamos aprovechar el tiempo juntas pero yo ya me había cansado de rechazarla amablemente. Sin embargo cuando Sana llegó y Elkie empezó a decir estupideces sobre nosotras sentí que debía darle una lección.

Me sentí tan satisfecha al ver en Sana esa sonrisa de suficiencia que se dibujó en su rostro una vez que Elkie se marchó enfadada. Era como si gracias a mí hubiese recuperado una parte de sí misma. Claro que eso era únicamente lo que yo creía. Certezas no tenía ninguna, pero aún así me sentí bien. Sentí que por primera vez fuimos un equipo y eso me gustó mucho.

Llevábamos dos semanas de conocernos y de haber empezado a fingir todo. Aunque para todos los demás llevábamos tres semanas de relación y un mes de conocernos.

Todos los días almorzábamos juntas. Bueno, con sus amigos. Aunque en realidad Sana no comía mucho, apenas un jugo y un par de uvas o alguna fruta pequeña como fresas o duraznos. Cuando le pregunté por qué no comía un platillo más fuerte me respondió que porque ya había comido algo antes de salir de casa por lo que me quedaba más tranquila.

Aun así, los almuerzos eran divertidos todos, conversábamos y pasábamos un buen rato y aunque deseaba con todo mi corazón compartir eso con Dahyun, ella aún no quería sentarse a la mesa con nosotros.

Por otro lado las cosas en la universidad, académicamente hablando, también iban excelente. Gracias a Dahyun me había aclimatado perfectamente y ya se me hacían mucho más fáciles las asignaturas. Aunque me pasaba la mayor parte de la tarde y la noche haciendo tareas y trabajando en los proyectos finales que eran encargados casi desde el inicio del semestre para tener tiempo de desarrollarlos a la perfección y no tener problemas después.

En fin. La vida comenzaba a tomar un curso tranquilo a pesar de todas las cosas extrañas e inesperadas que me habían sucedido últimamente.

Estábamos en el comedor compartiendo el almuerzo, yo, como de costumbre, estaba sentada a lado de Sana mientras todos los demás nos observaban, incluyendo a los estudiantes que estaban en otras mesas. Con delicadeza Sana tomaba uvas de su plato y me las daba a comer en la boca, yo las aceptaba con gusto siempre y cuando ella comiera una después de mí. Al parecer esa era la única forma de hacer que se las terminara, no me agradaba la idea de que no se alimentara bien porque cada día sentía que estaba más delgada y Sana, en mi opinión ya era lo suficientemente delgada.

roads¹ | satzu [terminada]Onde histórias criam vida. Descubra agora