Taehyung es un joven de 22 años que vive como una persona totalmente normal en un pequeño departamento afuera de los suburbios, aunque todo eso queda atrás después de un suceso qué cambió su vida.
¿Magia tal vez? ¿La aurora boreal? Taehyung al caer...
Solamente quiero decir que sí a alguien le molesta el desenvolvimiento de los personajes secundarios qué no son Taehyung y Jungkook pues... hay muchas otras historias en donde solo los leerán a ellos gracias .
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Y ahora Namjoon estaba enojado con Jungkook.
Taehyung no sabía bien qué sentir.
Hoseok imploraba perdón.
Jin cobijaba a Jimin como fiel compañero
Y YoonGi no le hablaría más a quien juraba ser su mejor amigo.
¡Alto, alto, alto! .
Pero....
¿Como llegamos a esto?.
Hagamos un retroceso.....
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Jin se fue de la casa de Taehyung consternado y sintiéndose estresado.
Su pequeño hermanito había pasado por una de las peores cosas que le pueden pasar a los omegas.
Desdichado y con el alma en un hilo pensaba en la forma de como podía ayudarlo pero sus pensamientos negativos lo llevaron a darse cuenta que no podía hacer mucho realmente.
¡¿Acaso su día podía ir peor?!.
Justo después de pensar en eso vio en la calle a un decaído Jimin.
Iba caminando por la calles de Busan con la mirada baja y arrastrando los pies.
– ¿Jimin? – preguntó con asombro mientras dirigía sus pasos hacía el.
El omega levanto la mirada y como si fuera un rayo de luz entre las penumbras se lanzó hacía su hyung mientras sus sollozos salían fuertes resonadores cual trueno en tormenta.
– Hyung – Dijo mientras se acercaba a abrazarlo – Me mintió– Dijo a secas mientras sentía de nuevo la tormenta en su Interior.
– ¿De qué hablas Jimin? – preguntó un desconcertado Jin.
–Hobi dijo que YoonGi debería estar con su ex novia y cuando fui a al parque estaba con ella. No creo poder verlo a los ojos sabiendo que me mintió y-yo se que no tengo mucho en la vida y tal vez soy una carga pero no creo merecer esto...
El omega mayor se quedo en silencio procesando la información.
– ¿Hobi hizo qué?
Jimin abrió los ojos en grande. El realmente no quería causar problemas. — Nada hyung hasta pronto...
– No Jimin. ¿Hobi te dijo eso? – habló fuertemente mientras tomaba del brazo al menor.
– Y-yo...
– Iremos a mi casa, te quedaras conmigo por que si dices que no quieres estar con YoonGi en este momento, alguien tiene que cuidarte. No te dejaré irte solo.
– Jin– Jimin abrazó fuerte a su amigo. Ahora podía sentir realmente qué no estaba solo.
– Creo que podemos hablar con Taehyung y hacer una pijamada. Los dos necesitan cuidados ahora.
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Se soltaron del abrazo y la omega habló mientras se veía radiante.
– YoonGi hace mucho tiempo que no te veía, pasaron... ¿dos años?.
– Eso creo, fue un largo tiempo.
La mujer se puso un poco más seria y trato de acercarse más a el pálido.
– Y-yo... antes de irme intentamos qué funcionará y no lo logramos...
–Fue difícil.
– Tal vez ahora que ambos estamos aquí...
YoonGi entendió hacía qué rumbo iba la conversación y decidió frenarlo.
– Suran. Tú y yo fuimos novios, por casi cuatro años pero nuestro tiempo ya paso. Es todo lo único que tengo para ofrecerte es una amistad.
– YoonGi y-yo... – silenció sus propias palabras y decidió qué la irá la absorbiera –¡Me ofrecieron trabajo y yo lo rechacé por venir contigo!.
El alfa suspiró con pesar. Ciertamente quería evitar esta clase de enfrentamientos. Razón principal por la qué evito decirle a Jimin se este encuentro. El preferia resolver sus asuntos y después poner al menor al tanto. Pues como el lo consideraba estas eran cosas del pasado.
– Yo nunca te pedí que hicieras eso.
– Eres un imbécil. ¿Qué tiene él qué no tenga yo?, yo también puedo hacerte feliz. Se como hacerlo. Fuimos muy felices juntos.
– Yo jamás sentí contigo lo que siento cuando estoy con él. Es mi destinado el ni siquiera debe de esforzarce por hacerme feliz, su simple existencia ya lo hace. Haberlo encontrado fue un milagro. A ti te quise Suran, deberás que lo hice, pero a el lo amo.
Fuerte fue el impacto qué recibió en su mejilla derecha al recibir una bofeta certera de la fémina.
– Imbécil– Dice mientras se va de aquella banca.
– Bruja– contestó al mismo tiempo que sobaba su mejilla con su mano – Siempre quise decir eso– susurro para si mismo.
