PURIFICAR

898 44 0
                                    

Purificar es una práctica que consiste en usar el humo sagrado de hierbas y plantas para limpiar la energía de un lugar o de una persona. El proceso es bastante sencillo, pero muy intenso.

A pesar de que existe un sinfín de hierbas y tipos de incienso que puedes utilizar para limpiar y purificar un espacio, a continuación encontrarás los más conocidos. Algunos podrás adquirirlos ya preparados en tiendas metafísicas:

·Salvia blanca o salvia del desierto: ayuda a deshacerse de la energía negativa y a restablecer las vibraciones de una sala.

·Palo santo: es similar a la salvia, pero un poquito menos potente. Ayuda a despejar la mala energía de una habitación.

·Cedro: ayuda a purificar un espacio o una persona, manteniendo los niveles de energía.

·Si es necesario, puedes utilizar una estantería o un bol de alabastro como incensario para quemar las hierbas y una pluma para propagar el humo. 

Para purificar una habitación:

·Abre todas las ventanas.

·Empieza en la entrada del espacio. Enciende las hierbas y utiliza la pluma o tu propia mano para propagar el humo.

·Muévete por la habitación y asegúrate de que el humo alcanza todos los rincones y grietas, pues es ahí donde suele estancarse la mala energía. Visualiza el humo despejando toda la energía negativa y un resplandor dorado ocupando ese espacio. Puedes recitar, en voz alta o en silencio, algunas de las siguientes frases:

''Limpio y purifico este espacio de cualquier energía que no actúe en mi favor. Este es un lugar sagrado que venera la bondad de todas las cosas. Que toda forma de energía negativa se desplace hasta la luz''

Puedes proseguir con otra habitación, empezando por la puerta, prestando especial atención a los rincones. Si es necesario, vuelve a encender las hierbas.

También puedes purificar a una persona utilizando el mismo método; asegúrate de que el humo le llegue hasta las palmas de las manos, la garganta, la parte superior de la cabeza, lasplantas de los pies, el torso, los brazos y las piernas.

Para purificar un objeto, pásalo por el humo de las hierbas que hayas elegido. Esto funciona con casi todo: grimorios, cristales, objetos sagrados para rituales, tu teléfono, ordenador o televisor, etc. Da rienda suelta a tu creatividad: cualquier cosa que tenga energía necesita una purificación de vez en cuando.

Puedes purificar una habitación o a una persona en cualquier momento, pero lo cierto es que hay momentos más apropiados que otros:

Después de una luna llena o nueva, o sabbat.

Después de un día o de una interacción agotadores a nivel energético.

Si alguien a quien no aprecias ha estado en tu casa. 

Cuando te sientes abrumado a nivel emocional.

Antes de empezar un trabajo o un proyecto nuevo. 


Como ser una bruja modernaحيث تعيش القصص. اكتشف الآن