Capítulo 35

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Conforme JungKook esperaba la respuesta de San, este parecía cada vez más triste. Su mirada caída, y sus dedos jugando sin muchas ganas era lo único que el castaño y EunBi podían ver.

—Te vimos correr hacia JieUn, pero luego ella fue la primera que se fue.— dijo EunBi y se sentó al lado de San.— ¿Discutieron y por eso estás triste?

—JieUn es mí alma gemela.— hubo un silencio y mientras JungKook tapaba su boca lentamente mirando a EunBi, que miraba atónito a San.

—¡Eso es fantástico!— exclamó EunBi y JungKook luego de despabilarse de la noticia asintió.— ¿Cómo lo descubriste?

—Tirones del hilo.— mencionó San y JungKook junto con EunBi se miraron al instante.— Lo sentimos cuándo estábamos bailando, y bueno... ella luego salió corriendo.

—Wow...— solo llegó a decir JungKook y escucharon la puerta de su casa ser tocada tres veces.— Iré a ver quién es.

JungKook tomó el picaporte, y al ver a JieUn sonrió al instante haciendo que la castaña frunciera el ceño levemente.

—Hola chicos.— saludó la castaña y JungKook se hizo a un lado para que pasase, pero esta al ver que San se encontraba con ellos se giró hacía JungKook con una sonrisa.— Oh, adiós chicos.

—Oye, espera...— quiso decir JungKook pero al ver qué JieUn cerró su puerta detrás de ella. JungKook miró a San junto con EunBi y mordió su labio inferior.— Esperen un minuto, hablaré con ella.

Entonces cuando la puerta fue cerrada, EunBi miró sorprendida a San y murmuró.

—Esa es la visita más corta que tuvo JungKook.— entonces San sin poder aguantarse, soltó una carcajada.









JungKook compartió asiento con JieUn en la banca del parque y esta miró al suelo.

—No esperaba que estuviese él.— murmuró la castaña y JungKook solo se dedicó a mirarla con curiosidad. Ella era el alma gemela de San, de su amigo. Ella tenía un hilo idéntico al suyo con TaeHyung, era impresionante.

—Pues él vino primero a comunicarnos eso. De igual manera, sospechaba si vendrías o no luego del festival, creo que todos teníamos un poco o mucha curiosidad, a decir verdad, de que había pasado aquel día.— el castaño miró al cielo por un momento, al radiante sol y sonrió levemente.

—¿Qué miras?— preguntó JieUn y este suspiró.

—Creo que el anochecer me hizo recordar a mí historia con TaeHyung, tuvimos que pelear por nuestros sentimientos, casi lo mato realmente cuando estaba en coma y cuando me enteré, me dieron tantas ganas de protegerlo, que no quise que pasará más al otro plano, pero él no lo sabe aún.— JungKook suspiró profundamente y miró a JieUn.

—¿Cuándo supiste que estabas enamorado de TaeHyung?

—Cuando tuve miedo de perderlo.

Hubo un silencio y JungKook pareció despabilarse dándose cuenta de que no era su historia de la cuál hablaría, si no la de JieUn.

—Pero no es de mí de quién debemos hablar, si no de ti.— dijo el castaño picando la frente de JieUn haciéndola sonreír.— ¿Qué ocurre con San?

—Supongo que está un poco ilusionado de saber que yo soy su alma gemela, pero yo no siento nada por él. En realidad jamás me enamoré de una persona, ni siquiera sé porque mí corazón latió de esa forma cuando él, tomó mis manos y...

Al ver qué JieUn cada vez más parecía esconderse las palabras, JungKook sonrió.

—No diré que ustedes están unidos por el hilo, olvidemos eso.— comenzó a decir el menor y JieUn lo miró.— Así comenzó mí historia con TaeHyung, yo estaba había comenzado a encariñarme con San, pensando que era amor, pero en realidad siempre sentí cosas por TaeHyung, aquella vez en la que me quedé dormido viéndolo dormir, luego de salir del otro plano, luego de recordar su historia y todo lo que le intentaron hacer. Ahí supe que en mí corazón, cabía la posibilidad, aunque no lo podía ver, de que me terminase enamorando de TaeHyung.

—¿San sentía cosas por ti?— preguntó sorprendida y JungKook asintió.— Oh, ya veo porque había tanta tensión en aquella cena que tuvimos en el restaurante del primo de EunBi.

—Quizás, sabiendo que tú eres su alma gemela, las cosas cambien y todo sentimiento que él pudo haber sentido por mí, se haya esfumado completamente.— los ojos de JungKook miraron a JieUn con esperanza y picó nuevamente la frente de la castaña.— Por ti.

—Ay, JungKook. Es el hilo rojo del destino, no del amor.— bufó la castaña y JungKook soltó una carcajada.

—¿Es acaso que tienes miedo de enamorarte de lo encantador que es San o me equivoco?— preguntó JungKook haciéndola frenar sobre sus pasos a la castaña que volvería a su coche.— Porque jamás vi, a una persona tan reacia al amor.

—No soy reacia.— respondió JieUn y se giró a verlo, pero no había muestra de arrepentimiento en lo que decía. Realmente parecía que no estaba enamorada de San.— Solo que quizás, estoy hecha para estar sola, no acompañada, JungKook.

—¿Quieres apostar?— preguntó el mayor y sintió un pequeño mareo al levantarse de golpe.

—No se trata de apostar, JungKook.— murmuró JieUn y miró algo apenada a el menor.— Se trata de quién es realmente el que se va a enamorar, y temo que sea San.

—¿Por qué temes?— preguntó JungKook frunciendo el ceño.

—Porque no me veo enamorada de él y no quiero ilusionarlo, como...

—Lo hice yo.— concluyó JungKook y sintió como su corazón se estrujó.— Pero aquí es muy diferente la cosa, JieUn, yo no era su alma gemela, tu lo eres.

Hubo un silencio y JungKook se sintió apenado, porque no quería meterse en la vida de San o JieUn, no era correcto.

—Entiendo lo que dices.— JungKook la miró y esta tragó saliva.— No quieres que le haga daño a San, que después de todo, es alguien a quien tienes mucho aprecio.

JungKook miró al suelo y JieUn mordió su mejilla interna para luego decir.

—Pero si llego a estar equivocada, y el hilo hace que me enamore de San, me tragaré cada palabra que te dije aquí.

Entonces JungKook sonrió.






































































¡Holass!

¿Qué opinan de JieUn y San?

Espero que les haya gustado el capítulo de hoy gracias por leerme.

Se despide Cami. xoxo

𝐒𝐎𝐅𝐓𝐋𝐘𝐎𝐎𝐍𝐆𝐒©

𝗢𝗵! 𝗦𝗔𝗩𝗘 𝗠𝗘 ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏWhere stories live. Discover now