Alerta Mujeriego.

17. Alerta Ex-novia.

Ryder.

¿Quién quiere ir a cenar con su Ex-novia? Y aún mejor ¿Quién quiere cenar con su Ex-novia junto a tú nueva novia? Espera que aún se pone mejor ¿Quién quiere cenar con su Ex-novia junto con su nueva novia y el idiota del Ex-novio de mi novia?

Yo, claramente no.

Así que todo esto me parecía una real estupidez, aparte de Hayley no paraba de hablar en ningún momento y Jake saltaba algunos temas estúpidos, eran la pareja perfecta.

— ¿Y cuanto llevan saliendo? — Preguntó ella cinicamente, Oh Dios tenía muchas ganas de golpearla.

¿Por que no era un jodido hombre al cual le pudiera romper la mandibula?

— Dos semanas. — Dijo Savannah timidamente y sonreí, era tan linda.

— Oh es reciente. — Ella sonrió como sí le hubiesen dicho la mejor noticia del mundo.

— Pero ella me gusta mucho. — Dije orgulloso y besé su frente, amaba besarla, cada parte de ella.

Hayley me fulminó con la mirada y yo hice lo mismo. 

Trataba de odiarla todo lo que podía, aparte de darme cuenta que su noviazgo con Jake me había caído como un balde de agua.

¡Dios! ¿Como pude enamorarme de alguien como ella?

Una canción conocida interrumpió la historia de Jake, Savannah buscó en su bolso rápidamente hasta dar con su teléfono.

Se disculpó alejándose de la mesa, ví su trasero moverse de aquí para allá mientras caminaba y mordí mi labio, sí seguía flirteando conmigo así, iba desnudarla en la mesa sin importar quién no esté mirando.

— ¿Ya te la haz llevado a la cama? — Jake levantó una ceja y fruncí el seño. — Cuando estaba conmigo se hacía la muy santa cuando se notaba a kilómetros lo zorra que era.

¿Espera? ¿El dijo? ¿Es que acaso no ha visto a su novia? 

Me eché a reír, y me paré de la mesa, esto iba a ser lindo, tenía ganas de golpear a alguien desde que empezó está cena.

Llevé mi puño hasta su madibula haciendo que cayera hacía atrás con todo y silla, Hayley gritó de sorpresa y fue en ayuda en su noviesito.

Tomé el bolso de Savannah, y me acerqué a ella tomándola del brazo.

— Nos vamos.

Ella colgó el teléfono y me miró confundida, la ví mirar hacía atrás y abrió la boca.

— ¿Que hiciste Ryder? — Me preguntó deteniendose a mitad de camino.

— Se lo merecía, ha dicho cosas de ti que... ¡Me hubiese gustado verlo en el hospital!

Ella me abrazó sin decir nada, la estreché en mis brazos, era tan linda y pequeña, era un pequeño ángel, mi voladora.

— Creo que deberíamos volver y dormir. — Ella beso mi mejilla.

— Oye me prometiste algo está noche.

— Oh sí. — Se sonrojo y comenzó a caminar hasta la habitación.

La seguí sonriendo, estaba listo para esto, estaba nervioso y eso no es normal, me he acostado con muchas de chicas y con ninguna me había puesto nervioso, ni con hayley.

Quizás por que nunca me he acostado con una virgen, ¿Era muy extraño eso? no me consideraba ser el privilegiado de robar la tarjeta V de una chica, yo no era el indicado de cada una de ellas aunque ellas crean lo contrario.