Alerta Mujeriego.

26. Posesivo

26.

     Posesivo

  Creo que mi estado era de shock, ni siquiera sabía como sentirme y la lágrimas salían sin permiso alguno, me abracé a mi misma por el frío de la noche, solo quería llegar a mi habitación.

— ¡Oye! Hey, hey. — Jack se detuvo frente a mí obstruyendo mi paso.

— ¿Que sucede? — Pregunté sin ánimo alguno.

— Ví lo que Ryder te hizo, es un idiota. — Se encogió de hombros. — No llores por él, no lo merece. — Se acercó a mí y limpió mis lágrimas.  — Pero, oye, tengo una buena, podemos vengarnos, sabes. — Sonrió con malicia y yo alcé una ceja. — Podríamos llenar cubos de excremento y echarselo mientras duerme, o tal vez esta, pintar su auto de rosa, le dará un ataque.

Me eché a reir, fue imposible aguantarlo, Jack mostró una sonrisa de alivio cuando me vio reír. 

— Me gustaría, pero ahora mismo solo quiero llegar a mi habitación. 

— Espera, Espera, que tal esta, llenar su habitación de ¡Gatos! — Exclamó, Ryder era totalmente alérgico a los gatos. Y como si mi mente lo hubiera llamado, allí estaba él detrás de Jack y con los puños apretados. — Es alérgico a ellos, le empezarán a salir ronchas y...

— Jack. — Lo interrumpí.

— Y podemos tomarle fotografías y subirlas a internet, hasta podemos venderlas.

— Jack. — Volví a Interrumpir, alguien estaba muy cabreado atrás. 

— Y durará toda una semana con ellas y ninguna chica querrá pegarse él, y luego crearemos el rumor "Ryder ronchatoro" — Eso no suena tan mal ahora que lo pienso.

— Jack...

— ¿Qué? ¡Joder! ¿Qué? — Me miró con el ceño fruncido por haber interrumpido su gran venganza. 

Traté de hacerle muecas para que se diera cuenta quien estaba detrás pero el solo me miraba confundido, hice una pequeña seña para que mirara atrás y él se volteó rápidamente. 

La cara de Jack cambió a sorpresa y terror.

— Oye Ryder, hermano, sabes que no hablaba en serio, vamos, nunca te haría algo así, somos hermano. — Dijo riendo para alivianar el momento, escondí la risa que estaba a punto de salirme.

— Piérdete Jack. — Gruño Ryder.

— Claro sí, claro. — Jack se acercó a mí antes de irse. — No dejes que te intimide solo llámame y tu superheroe vendrá.  — Susurró y se fue con la manos dentro los bolsillos.

Negué con la cabeza y me dispuse a seguir con mi camino y por fin llegar a mi deseado destino.

— No quiero volver a verte con Jack. — Ryder gruño detrás de mí, y lo miré incrédula. 

— ¿Hablas en serio? — Lo miré sin poder creerlo, por Dios, voy a matarlo.

— ¿Me ves cara de estar jugando? — Levanté una ceja y me crucé de brazos.

— Como quieras. — Me dí media vuelta para irme. — Pensándolo bien, no, no voy a dejar de hablar con Jack porque tu me lo pides, voy a hablar con quien quiera y cuando yo quiera, porque tu no tienes ningún derecho de prohibirme nada.

— Eres mía, de mi propiedad ¿Lo entiendes o tengo que marcarte?

— ¿Por qué no vas y marcas a Thalia? ¿¡Tu puedes besar a todas y yo no puedo tener amigos!?