Black | H.S.

XXII

   La semana se ha ido lenta, pero por fin estamos en viernes en la noche. Una semana menos en el mes, una semana menos en el años y una semana menos de vida. Vaya, aún recuerdo cuando iba en la secundaria, no fue la mejor etapa de mi vida, y espero que la preparatoria lo sea. Hasta ahora me ha agradado, lo único bueno de la secundaria fue el conocer a Liliana, y por suerte quedamos en la misma preparatoria.

   Yo aún no decido qué estudiar y tengo que elegir rápido, la preparatoria se pasa muy rápido y luego viene la universidad, y quiero estudiar en el extranjero, quizá podría ser en Alemania o Francia, por eso trato de sacar muy buenas calificaciones.

  Ahora me encuentro estudiando, un viernes en la noche, para el examen de Lenguas Extranjeras, el de Psicología lo tengo casi al final de la semana, así que no me preocupo mucho.

   Escucho que tocan a mi puerta y la abren en seguida. Es mi papá.

   - ¿Hija?

   - Dime, papá. - Me siento en la orilla de la cama y él se sienta a un lado de mí.

   - Tengo que hablar contigo.

   - Claro, te escucho. - Le respondo.

   - Sé que acabo de llegar hace dos semanas de Holanda, y el lunes que fui a la oficina me decían que tendría que regresar a Amsterdam, tengo que regresar lo más pronto posible, así que me voy en dos días.

¿Qué?  Mi papá acaba de regresar y ya nos va a volver a dejar, pero tengo que entenderlo porque es su trabajo. 

Tengo que mostrarle mi apoyo.

   - Oh, claro, papá. Está bien. - Trato de mostrar mi mejor sonrisa posible, y él sonríe de verdad feliz y me envuelve en un cálido abrazo.

   - Gracias, hija. Voy a estar de regreso también lo más rápido posible.

Asiento y me vuelve a abrazar para luego salir de mi cuarto y cerrar la puerta detrás de él.

A Josh no le va a agradar esta noticia.

Me encuentro tan aburrida acostada en mi cama viendo el techo de mi cuarto, necesito distraerme. Supongo que me han levantado el castigo y ya puedo salir, quisiera ir a la casa de Lily, a ella ya le han levantado el castigo. Me mandó un mensaje a mi celular diciéndome que le han regresado su celular y va a poder salir.

Respecto a la cita con Jerry, ella por supuesto que le dijo que no, ya que estaba castigada, él lo entendió y no me ha dicho ella cuando van a salir.

   Salgo de mi cuarto y voy al comedor para decirle a mi papá que voy a salir, y por supuesto que lo hizo, ya que no estoy castigada. 

Me dice que lleve mis llaves y esté al pendiente de mi celular. 

Salgo de casa para ir a la casa de mi mejor amiga. 

Voy pasando por el pequeño parque para poder llegar a la casa de Lily.

Estoy a punto de mandarle un mensaje a Lily a su celular y alguien me llama con "Sh Sh". Me detengo en seco y me giro hacia atras para poder presenciar a un Harry sonriente. Por supuesto que lleva sus lentes oscuros para el sol, sus jeans ajustados que se le ven magnificos y su camisa a cuadros, y no falta esa bandana en su cabeza, ahora es color negra con algunas cosas blancas, supongo que son calavaeras, no las distingo bien.

Guardo mi celular en mi bolsillo de los jeans y le sonrío de regreso.

   - ¿Qué haces aquí? - pregunto y me cruzo de brazos.

Lleva sus manos en los bolsillos de sus jeans y al momento en el que sube sus hombros puedo aceptar que se ve tierno haciendo eso. Pero Harry está lejos de ser tierno.

   - Decidí venir a caminar a este parque - Aprieta los labios y mira a ambos lados, como si estuviera viendo el paisaje.

   - Voy a hacer como que te creo. - Ruedo los jos y río por lo bajo mientras me doy la vuelta para seguir con mi camino.

A lo mejor él ni siquiera sabe que este parque existia ¿quieres decir que Harry te sigue?> Claro que no, o quizá sí. Desde que me lo topé la semana pasada no dejo de verlo.

   - ¿Me dices mentiroso, Samantha? - Lo siento a un lado de mí, caminando a mi paso.

   - Por supuesto que no. - El sarcasmo se nota en mi tono de voz.

   - El sarcasmo no te queda, Samantha. - Niega con la cabeza mientras tiene esa sonrisa ladeada en su rostro. Regresa la mirada al frente y yo lo fulmino con la mirada.

   - ¿Aún recuerdas nuestro trato? - Me preguntó sin voltear a verme. 

   - Por supuesto que sí.

   - Bien. - Se detiene en frente de mí, haciendome detener igual. - Vamos. - Sonríe mostrando su dentadura y pasa a un lado de mí.

   - ¿Cómo? - Giro para verlo y lo veo por lo menos a un metro de distancia de mí. 

   - Vamos, Samantha. Quiero que vayas conmigo. - Se detiene y me hace una seña con su mano para que vaya con él.

   - Le he dicho a mi papá que voy con Lily.

   - Buena idea. - Sonríe y comienza a caminar.

¿Qué? Él piensa que le dije eso a mi papá para que piense que estoy con Lily y no con él ¿está mal de la cabeza?

   - Harry. - Le grito y voy corriendo detrás de él, lo alcanzo pero él no se detiene. - Yo me voy con Lily. - Eso lo hizo detenerse e hizo también que me volteara a ver. A pesar de tener los lentes de sol, puedo sentir su mirada penetrarme. 

   - He dicho que vas conmigo, Samantha. - Lo dice en un tono que hasta mi piel se estremece.

   - No. - Arrugo las cejas y niego con la cabeza. Suelto un bufido y comienzo a caminar en dirección a la casa de Lily.

   - Samantha. - Oigo decir a Harry entre dientes. No me detengo y no pienso hacerlo. - No te vas a librar de mí facilmente, linda. - Es lo último que oigo cuando estoy lo suficientemente lejos de él. 

Giro mi cabeza para ver en dónde se ha quedado y no lo veo más, suspiro aliviada y estoy a una cuadras de llegar a la casa de Liliana.

Llego a las afueras de la casa de mi amiga, trato de abrir el pequeño cancel que se encuentra afuera y oigo a un coche detenerse en la calle, justo afuera de la casa de mi amiga. Quizá haya llegado su mamá.

Dejo de abrir el cancel para saludar a la mamá de Liliana, pero no es ella.

Veo a Harry bajarse del carro y caminar a sancadas hasta mí.

Me toma del brazo fuertemente y me jalonea. 

   - Harry, Harry - Chillo ante la forma bursca que lo hace. Él no dice nada. Abre la puerta del copíloto y me adentra al automovil, y pone el seguro para niños.

Lo veo rodear el coche y adentrarse junto conmigo al automovil.

Iba a bajar el cristal para gritarle a Lily y me viniera a salvar y justo cuando lo iba a hacer Harry me voltea a ver.

   - Ni siquiera lo intentes, Mikesmall. - Suena tan frío, da miedo, tanto que alejo mi mano del botón para bajar los cristales.

   - Quiero visitar a mi amiga, Harry. - Le digo.

Pone en marcha el coche y pongo mi cinturón de seguridad.

   - Yo no recibo un no por respuesta, linda. - Me dice sin quitar la mirada de la calle en la que vamos.

¿A dónde me va a llevar?

Nota: ¡Hola! Años sin actualizar. Aquí nuevo capítulo, ¿a dónde creen que la lleve? VOTEN & COMENTEN.

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