Black | H.S.

L

El partido terminó.

Fue entretenido en verdad.

El equipo de Connor había sido el ganador, por tan sólo cinco puntos de diferencia. 

En todo el partido, Harry y yo nos mantuvimos en silencio. Cuando había descanso él se dedicaba a ver a la pantalla de su celular, contestando mensajes. Parecía como si estuviera enfadado de haber venido. Pero él fue quien se ofreció a acompañarme, y no le veo el porque de su enfado. 

Le había dicho a Harry que iba a volver a Connor en cuanto terminara el partido, a lo que él solamente puso los ojos en blanco y comenzó a caminar hacia la salida, y yo comencé a ir tras de él.

          - Si no me quieres esperar, está bien, me puedo ir con Connor de regreso a Los Ángeles - le dije a Harry cuando lo vi cruzar sus brazos en el pecho.

Él me miro seriamente. Dio un paso hacia mí para quedar cerca de mí para decirme:

            - Ni loca te dejo ir con él - dice.

Su tono de voz suena demandante y controlador. 

Me quedo con la boca abierta. Ahora es en donde me doy cuenta de otro nuevo comportamiento en él.

Dominante.

Doy un paso hacia atrás y aparto la mirada. No aguanto su mirada pesada en mí.

           - Entonces no te estés comportando de esa forma, Harry - le digo con tranquilidad -. Lo he dicho porque siento que te está molestando el estar aquí. Lo dije por ti. - Ahora lo miro, pero él está viendo a la pantalla de su celular.

Ni siquiera ha escuchado lo que le dije. Ahora siento un poco de enojo porque me ignoró.

            - ¿Me escuchaste? - le pregunté.

Él levanta la vista por un segundo, pero luego la vuelve a posar en su celular. Pongo los ojos en blanco.

            - Has lo que tengas que hacer con ese niño. Yo estaré por allá - señala a ningún lugar en específico.

Lo veo alejarse mientras va poniendo el celular en su oído.

Si iba a venir conmigo para ignorarme, entonces ni siquiera le hubiera dicho sobre el partido. Es como si yo hubiera estado sola en todo momento. En verdad que me ha molestado mucho esta actitud de Harry.

Y me quedé parada ahí, esperando por Connor.

Mi celular empezó a sonar, y el nombre de Connor iluminó la pantalla. Respondí a su llamada.

           - Hola, Connor - le digo amablemente.

           - Hola. ¿Estas en donde mismo? - lo oigo preguntarme.

           - Sí.

           - Excelente. Espera ahí. En menos de diez minutos estamos ahí - dice.

¿Él quien y más?

           - ¿Con quien más vienes, Connor? - le pregunto.

           - Ah, ya verás - dice para luego colgar la llamada.

En verdad espero que no sea su familia la que viene con él. Aunque lo dudo. Estoy segura de que voy a morir de la vergüenza.

Comienzo a acomodar un poco mi cabello y mi ropa. Tengo que tranquilizarme, y tener en mente que solamente es la familia de Connor. Él sólo es mi amigo. Sólo mi amigo.

Para distraerme, comencé a observar a las personas que había a mi alrededor. Muchas se estaban tomando fotografías con sus hijos que son parte del equipo. Algunos solamente se concentran en hablar y felicitar a los demás. Aproveché para buscar a Harry. Lo vi a lo lejos. Estaba recargado sobre una estatua de la escuela. Al parecer aún estaba hablando por teléfono. ¿Quien podría ser?