6. Mark

1K 60 6
                                    

Después de escuchar lo que dijo Lexie, no podía dejar de pensar en ella, era el poder que tenía sobre mí esa mujer.

Cuando bajé de la azotea, me encontré a Callie viendo el tablero de operaciones. Quería decirle lo que me había pasado, pero si le decía me empezaría a molestar y no quería tener una pelea sobre eso así que solo la evité y me fui a cambiar para salir. Cuando terminé me llegó un mensaje de Julia, estaba abajo esperándome.

Tenía que dejar de pensar en Lexie, yo ya iba a hacer mi vida con alguien más y esta duda de saber si Lexie me ama está constantemente en mi cabeza. Pero no tenía sentido yo sabía que no me amaba ya no lo hacía ella me pidió que la dejara y eso hice tenía que asimilarlo ya si no me volvería loco de desesperación. Tenía que dejarlo ya, además hoy iba a ser un día especial y no iba a dejar que nada ni nadie lo interrumpiera. Lo que haría sería llevar a Julia a un restaurante y pedirle que se case conmigo. Así que tenía que dejar a Lexie de un lado, esta era mi vida ahora y tenía que aceptar que Lex ya no era parte de ella.

Cuando bajé me encontre con Julia que tiene una sonrisa enorme en la cara me acerque a ella y sin pensarlo le doy un beso que parece que dura una eternidad.

-Hola, L... AY Dios, hola, Julia.- casi a punto de decir Lexie en vez de Julia, realmente me estaba afectando mucho esto. Pero esta sería la única manera de retener y olvidar aquellos sentimientos.

-Hola, amor, ¿estás bien? Te ves algo cansado no quieres mejor ir a casa a dormir.- la beso para evitar contestar, no quería ir a la cena, pero ya era un hecho tenía que hacerlo de una buena vez.

-Si estoy muy bien, y más porque tengo una sorpresa para ti, que te va a encantar.- sonrió mientras caminábamos hacia el estacionamiento.

Le abro la puerta y la ayudó a meterse, le doy la vuelta al coche y me meto, me pongo el cinturón y arrancó. Ya era hora no seguir con esto, es mejor así, que sigamos por separado y que un buen día podamos ser amigos, yo aprecio mucho a Lexie y sé que algún día la olvidaré como ella a mí.

Llegamos al restaurante, cuando nos bajamos del coche le di las llaves al valet Parking, ayudó a bajar a Julia. La miró y de repente su cara se transformó en la de Lexie. Me quedo mirándola y no doy crédito a lo que mis ojos visualizan, parpadeo muchas veces y su cara regresa a la normalidad. Ignoro lo que acaba de pasar y entró al restaurante, le arrimo la silla para que tome asiento.

Me siento y sonrió; para dar este paso tan importante debería estar nervioso, pero no lo estaba, no sé qué siento, pero tal vez si doy este paso tendré las cosas más claras.

-Qué lindo lugar Mark, ¿Qué celebramos?- se acomoda en la silla y desdobla su servilleta para ponérsela en las piernas.

-Nada, pero quería traerte a cenar, últimamente no nos hemos visto y quería pasar más tiempo contigo. Y bueno aprovechando a tener una cita.- sonrió lo más sincero posible.

-Está bien.- me mira con una sonrisa muy grande en la cara.-

Después de pedir nuestra cena y una buena botella de vino, hablamos de cómo estuvo nuestro día, lo que nos gustó y lo que no. Lo triste es que se nos acababan los temas de conversación algo que con Lexie no pasaba, podríamos estar hablando de cualquier cosa sin que se nos acabaran los temas, hablábamos de todo y nada. Muchas veces nos quedamos en silencio para admirarnos el uno al otro, pero no de una forma incómoda.

Tenía que dejar de compararlas, esto no era una guerra y más porque yo ya había elegido. Así que para dejar de pensar en ella me tome de golpe toda la copa de vino y me levanta para estar al lado de Julia.

-Mark, calma te vas a ahogar ¿todo bien? Te noto algo, no sé raro.- se ve confundida y parecía que se quería reír, pero se mantuvo seria.

-Julia, desde que te vi, supe que serías la persona que me haría feliz. Yo sé que seré feliz a tu lado, me ofreces una vida, un futuro. Yo quiero que sigamos juntos, Julia yo... yo... t... yo te amo, y quiero pasar el resto de mi vida a tu lado, en las buenas y en las malas, pase lo que pase.- me arrodillo y saco una cajita aterciopelada, la abro y le enseñó un anillo con un diamante muy grande en medio de la argolla.

-Julia Canner ¿quieres casarte conmigo?- la miro esperando esperando una respuesta, por su expresión me di cuenta de que no se lo esperaba y se veía súper emocionado por escuchar que le pedía matrimonio.

-¡Sí! Mark sí, sí me quiero casar contigo.- se pone muy feliz y le pongo el anillo. Me da un beso apasionado y yo le sigo el juego. La tomó del brazo y la levantó, noto como todos están aplaudiendo, mirándonos, sin saber cómo es nuestra relación ni nada, me sentí mal al ver como todos de alguna forma nos felicitaban por la pedida.

No dejo que diga nada y solo pido la cuenta, le sonrió y esperó pacientemente que el camarero nos venga a cobrar, ella leyó mi mente en ese instante, sabía lo que quería. Cuando terminamos, salimos y ansiosos esperamos el coche. Cuando aparece y me dan las llaves; nos metemos y vamos a mi apartamento lo más rápido posible.

Al llegar no nos da tiempo de nada y sin abrir la puerta, me acerco a ella y la beso con lujuria. Mientras la besaba trate de meter la llave en la cerradura, pero se me dificulta un poco. Ella entierra sus dedos en mi pelo mientras que seguimos con el beso apasionado.

Cuando al fin encuentro la cerradura, me separo de Julia y abro la puerta. La dejo pasar primero, entró y me volteo para cerrar la puerta y ponerle el seguro. Cuando la veo, mi cabeza transformó a Julia en Lexie, no daba crédito a lo que veía otra vez, sacudo mi cabeza varias veces, pero parece que no se quería ir. Me rindo y dejo que mi cabeza piense que es Lexie, sonríe y me acerco a ella para besarla con deseo. Siento cada caricia y cada beso como si fuera Lexie, pero mi corazón sabía que no era ella. Lo más sensato era parar, pero no podía, una vez empezado esto no pararía por un simple capricho mío.

La cargo y camino lentamente al cuarto para ponerla en la cama y dejar que fluya y pase lo que tenga que pasar. Mi cabeza sabía que lo que estaba pasando era irreal pero tal vez esto era la última vez que me pasaba y así podría dejar atrás a Lexie. La acarició y le digo -Te Amo- sigo besándola y no paro.

Ok bueno... creo que ya saben qué pasó y me parece que no están contentos, pero es parte de la historia y si no lo escribo pues no puedo seguir con ella. Sé que me van a odiar, pero ya saben que todo lo que vale la pena y trabajo cuesta y esto costará, además siempre es bueno un poco de drama jsjsjsjs.

Y ya sé que este capítulo duró menos que los demás, pero sé que no están contentos por lo que escribí así que...

Como siempre ya saben voten y díganme que les está pareciendo, no olviden votar y comentar si tengo algún error para poder corregir, como siempre compartan y espero que con este capítulo lleguemos a los 200 lectores.

-Sweetyj20 cambio y fuera

Respira, solo respiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora