Cap 1.

17.4K 473 22
                                    

Feeling my way through the darkness  Guided by a beating heartI can't tell where the journey will end But I know where to start They tell me I'm too young to understand They say I'm caught up in a dreamWell life will pass me by if I don't open up my eyesWell that's fine by me

So wake me up when it's all over When I'm wiser and I'm older All this time I was finding myself And I didn't know I was lost

(Traducción: Sintiendo mi camino a través de la oscuridad Guiado por un corazón que late No puedo decir dónde terminará el viaje Pero sé por dónde empezar Me dicen que soy demasiado joven para entender Dicen que estoy atrapado en un sueño Bueno, la vida lo hará pásame si no abro los ojos Bueno, por mí está bienAsí que despiértame cuando todo termine Cuando sea más sabio y mayor Todo este tiempo me estaba encontrando a mí mismo Y no sabía que estaba perdido. Canción Wake me up de Avicii). 


Amaba despertar con esa canción, pero no tan temprano. Como pude me levante y me estire hasta que crujieron todos mis huesos. 

Camine hacia la ventana y abrí mis cortinas contemplando al menos por un segundo la vista que tenia, definitivamente no me cansaba de ver New York  y menos desde mi cuarto. Gracias al trabajo duro que he hecho durante unos diez años puedo darme el lujo de vivir en un buen departamento en Brooklyn con una excelente vista de Manhattan.  

Soy latina y dado a un problema familiar  tuve huir a los 12 años de mi país. Llegue a la gran manzana sin saber bien qué iba a ser de mí, estaba sola y no conocía a nadie. Por suerte, una pareja de unos treinta años me acogió por unos días mientras trataban de comunicarse conmigo  y confirmar si tenia algún pariente en el país; cuando se enteraron de mi pasado ellos decidieron adoptarme. Ellos me trataron desde el primer día con mucho amor, pagaron mis estudios y gracias a ello tuve una beca en la NYU como diseñadora gráfica.  

Era directora creativa de una agencia conocida de marketing y publicidad; también tenia un trabajo en una editorial, a veces editaba algunos libros y si los autores quieran, diseñaba sus portadas. Amaba mi trabajo. 

Dejando eso a un lado, tenia que prepararme para ir al trabajo. 

Cuando estuve lista fui a la cocina, Rosa me esperaba con el desayuno listo. Ella trabajó para mis padres, pero cuando decidí independizarme ella quiso venir conmigo, ya que mis padres eran pensionados y se la pasaban viajando.

-Hola mi niña, ¿como amaneciste? -pregunto cuando la abrace y me dispuse a desayunar. 

-Bien nonita. Hoy tengo mucho trabajo, así que no me esperes despierta. -le dije mientras trataba de comer todo con un bocado. 

-Come despacio. -me reprendió. - Sabes que eres prácticamente la jefa de tu área y nadie te riñe por llegar tarde cinco minutos. 

-Esta bien.- dije comiendo a mí ritmo. -Hoy podrías salir con Miguel, ¿sabes? -le dije alzando las cejas varias veces. 

-Ay mi niña, ya estoy vieja para esas cosas. -dijo ruborizándose un poco. 

-Nada de eso, estas en tus mejores años y Miguel se derrite por ti. - Miguel era mi abogado y siempre de echaba indirectas a Rosa, pero ella era muy tímida y no le respondía. -Hoy lo voy a llamar para que venga a almorzar. 

-¿Pero no dices que vienes tarde?- pregunto confundida. 

-Si, pero no te quiero dejar sola por tanto tiempo. -le dije como excusa, pero ambas sabíamos que era mentira.

-Bueno, pero no es una cita. -me dijo señalándome y con una mirada seria. 

-Aja. -dije terminando. -Gracias nonita, te veo en la noche. 

-Adiós hija, que te vaya muy bien. -la abrace y prácticamente salí corriendo de allí. Baje por el ascensor al  estacionamiento y me monte en mi tan adorado Mazda. Podría comprar uno más costoso, pero siempre fue mi sueño tener uno de color ciruela y como era mío el dinero, era mi decisión. 

🍃🍃🍃

Llegue a mi oficina y de inmediato vino Kat, mi secretaria, diciéndome todo lo que tenia para hoy. 

-¿Algo mas? -pregunte sentándome prendiendo el Mac. 

-Ehh ...- titubeo nerviosa, lo cual llamo mi atención. -Esta mañana vino el Jefe supremo y quiere verte a las once en su oficina. 

Ahora sabia porque actuaba así. El señor Katsaros era el jefe de la agencia y el dueño de los sueños húmedos de todas las mujeres de la oficina. Kat siempre se ponía nerviosa en su presencia y me causaba un poco de gracia. 

-Esta bien y deja de decirle así. -dije con gracia, todas le decían así menos yo. 

-Es que es todo un dios griego. -dijo babeando como si lo tuviera al frente. -No sé cómo puedes ser tan indiferente con él. - dijo sentándose para ordenar algunos papeles de mi escritorio. 

-Es solo un hombre, ademas parece un iceberg de lo frio y serio que es. -dije volviendo mi vista a la computadora. Hoy tenia que hacer cuatro presentaciones de campañas y todavía no llegaban algunos diseños. -Kat llama a Dan y Aron, por favor. 

-Voy jefa. - se levanto y fue por ellos. 

Es increíble que no hayan enviado nada cuando les dije que tenían un mes para hacerlas, eso sí me sacaba de quicio y no lo iba a dejar pasar. 

-Buenos dias señorita. - Entraron los susodichos relajados. 

-Tomen asiento. -ellos ni dudaron en hacerlo. -Supongo que saben qué hacen acá, ¿no?

Los dos se miraron con burla y Dan hablo. -La verdad no tenemos idea. 

-Déjenme refrescarles la memoria. -voltee la pantalla del computador hacia ellos. -¿Ven sus nombres ahi? - les pregunte. 

-No señora. -respondieron ambos. 

-Muy bien, al menos sé que saben leer. -me burle de ellos. Pude ver que el señor Katsaros entraba discretamente y se quedaba en la puerta escuchando la conversación. -Me pueden decir, ¿por qué no han enviado los diseños de las piezas publicitarias a mi correo?

-¿No puede deducirlo por sí sola?- pregunto con burla Aron. 

-¡Oh! Yo sé porque, solo quiero que lo digan en voz alta. -dije seriamente.

-Porque no lo hemos hecho, no recibimos ordenes de una mujer. -dijo Dan y Aron sonrió. 

-Que comentario tan machista. -dijo finalmente mi jefe. Los dos voltearon de inmediato a ver de quién se trataba y pude ver que sus cuerpos se tensaban. -Que bueno que vine. -se acerco a mi escritorio y se puso a mi lado. -Ya que sus ideologías y comportamiento son tan retrogradas, están despedidos y dado que tienen una actitud ofensiva a su jefa no se les pagara liquidación. Gracias por no trabajar y espero nunca verlos. -ellos se quedaron como estatuas. -Esta es la parte que salen de su oficina y recogen sus cosas. -les dijo con burla y los dos prácticamente salieron volando. 

-Gracias señor, pero no tenia que molestarse. -pause mirándolo con gracia. 

-Para mí no es ninguna molestia, Señorita Sofia. -dijo amablemente. 

Camino de nuevo a la salida y se volteo brevemente para decir. -La espero a las once en mi despacho. 


Virgen a los treintaWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu