❂Mi primer despedida❂

1.7K 251 30
                                    

¿Me recuerdan diciendo que el peor día de mi vida fue cuando Sakura me dio la noticia de que se iría por tres años? Bien, me equivoqué; el peor día de mi vida sin duda es hoy, el día de su partida.

Después de aquella pesadilla pasaron tres meses que parecieron una montaña rusa, no sabía cómo sentirme al respecto, y si, como siempre, recurrí a mi hermano mayor que todo lo sabe justo después de enterarme.

-¿Qué? -fue lo primero que me dijo tras contarle todo.

-Tsk, no me hagas repetir todo de nuevo. No seas tan cruel.

-No es eso, solo que... -se rascó la cabeza un poco confundido- ¿Se va a Estados Unidos? ¿En serio? -asentí- No puedo creerlo.

-Ni yo. -resoplé y me acosté a su lado porque si, estábamos en su habitación- ¿Qué hago? Tú eres bueno en los consejos. -si, un poquito de presión, ¿y qué?

Itachi me miró: -¿Sabes lo que es una relación a distancia? -negué- Bueno, es seguir siendo novios aún cuando los dos están lejos. ¿Entiendes?

Emití un sonido gutural no muy convencido. ¿Seguir con la relación estando muy lejos? ¿Por qué alguien haría esas cosas?

-Pero, ¿si hacemos eso funcionaría por tres años? -él calló. No dijo nada- ¿Eso es un no?

-Pues, estadísticamente no hay buenos resultados. Muchos de las parejas que lo intentan terminan después de un tiempo, ¿sabes?

Chasqueé la lengua: -Qué alentador es eso. -dos minutos de silencio- Supongo que es el fin, ¿verdad?

La respuesta era más que obvia. Todo esto apestaba, con mayúsculas.

Por esta plática me costó un poco de trabajo "volver a la normalidad"; me dolía un poco ver diario a Sakura y saber que estábamos en cuenta regresiva, cada vez faltaba menos para la despedida oficial. Pero luego pensé las cosas, aclaré mi mente y llegué a la conclusión de que recluirme no me llevaría a nada, no cambiaría nada y definitivamente solo lograría que Sakura pensara que ya no me importaba.

No podía permitir eso.

Poco a poco volvimos a nuestra rutina, pero ahora la invitaba a ir a muchos lugares, tantos como podía. Tuve que pedirle dinero prestado a mi hermano y autocontratarme para podar el césped de los vecinos y poder darme todos los lujos con ella.

Tanto sus padres como los míos no decían nada, de hecho, nos veían con tristeza, sí como cuando ves a un cachortito que sabes que pronto morirá. Justo así.

Solo que decirle adiós a Sakura no era para nada lo mismo que decirle adiós a un perrito.

Estando en el aeropuerto, con las maletas de Sakura siendo abordadas en el avión fue cuando sentí el verdadero miedo.

Ella lloraba y les pedía a sus papás como último recurso que la dejaran en Japón. Obvio la respuesta fue negativa, ya tenían todo listo para su nueva vida.

-Te vemos arriba, hija.

Hasta aquel momento yo empecé a llorar sjn darme cuenta. La abracé como pude y besé su mejilla.

-Te quiero, Sakura.

-Yo mucho más. -susurró contra mi hombro- Prometo que en cuanto regrese te buscaré.

Se separó y entró corriendo a la sala que le llevaba a abordar el avión. No tardó mucho en despegar.

¿Qué pasó conmigo? Bueno, no sabía hacer otra cosa más que llorar. Llorar y llorar por mucho tiempo.

Mi primer todo 》SasusakuWhere stories live. Discover now