❝𝒇𝒂𝒍𝒍𝒊𝒏𝒈 𝒇𝒐𝒓 𝒚𝒐𝒖❞ ⁽ᶜʰᵃⁿᵇᵃᵉᵏ⁾

[ 𝟎𝟏 ; 𝟐𝟔 ; 𝟐/𝟐 ]

Hace unos días decidí volver al cabello de color gris platinado, me sentía cómodo y tener algo nuevo en mi, era como una especie de distracción a mis problemas o pensamientos negativos. También tenía que admitir que me quedaba bastante bien junto a mi selección de ropa a última hora, gracias a que Kris me obligó a ir a la fiesta, diciendo: "Lamentarás no haber ido". Aunque, sinceramente estaba agradecido con él, porque ya no me encontraba en mi casa deprimido y ahora podré bailar hasta perder la noción del tiempo, junto a alguien especial. Porque Kris era alguien muy especial. Incluso, me enteré que él también estudiará en el área de cine al igual que Sehun y yo.

Salí del auto de Jongdae, quien aprovechó que Kyungsoo estaba de encargado en la puerta, para así poder entrar junto al rubio y pasar un buen tiempo con su novio "Minseokkie", tal y como dijo durante todo el trayecto. Por lo tanto, los tres entramos, saludando al pelirrojo, que se sorprendió de verme y me avisó que en poco iría con todos nosotros.

-¡¿Baek?! -corrió hacia mi el mayor, que horas antes le había dicho mil veces que no vendría -¿Por qué no me dijiste que él también vendría, Jongdae? -exigió, lo que se me antojó un poco extraño, pero me alejé de ahí, saludando a los otros tres, que se alegraron de verme.

Busqué un poco a algún azabache alto, para saber donde ir. No quería toparmelo de cerca, tampoco quería hablar con él, pero siempre he sentido esa necesidad de saber donde está a pesar de todo aquello, y me odiaba por eso.

Me senté al lado del rubio, viendo de reojo a mi mejor amigo hablando por el teléfono, pero mi concentración en el ambiente se esfumó cuando la mano de Kris se posicionó sobre mi muslo, tratando de llamar mi atención.

-¿Quieres algo para tomar? -alzó una ceja.

-Agua, aunque no sé si haya de eso aquí -reí.

-Veré que consigo -agitó su cabeza, negando -. Espérame aquí.

-Si.

La música era fuerte y resonaba en todo el lugar que estaba iluminado tenuemente por luces blancas, pero con bastantes de color rojo neón. Era muy bonito y la pista de baile estaba llena, lo que me incitaba a mezclarme con todos esos conocidos con los que de vez en cuando intercambié palabras y ahora -a la mayoría- no los volvería a ver en mi vida. Pero me mantuve en este lugar a la espera de Wu, que me pidió que no me moviera, si no, nos perderíamos y costaría hallarnos.

-Su agua, señor -un vaso con un líquido transparente se apareció por delante de mi vista.

-Gracias, caballero -le seguí el juego, formulando una pequeña risa.

Una conversación amena se formó entre ambos. Hablamos de como extrañaríamos este periodo tan fácil, como lo era la escuela y ahora tendríamos que ingresar al mundo de adultos, donde una vez fuera te espera la cruda realidad. Tener que mantenerse a uno mismo, encontrar una pareja estable y tener familia, aunque eso último no me interesaba mucho, y que decir de tener pareja estable. No. Si las cosas siempre terminarían así de mal, no, no quería nada estable, era más divertido dormir con otros y olvidarte de ellos después de un par de semanas.

Por otro lado, mencionamos nuestro futuro como productor -en el caso de Kris- y guionista -en mi propio caso-, prometiendonos que nos ayudariamos mutuamente si uno se hacía famoso antes. Era genial poder hablar tan libremente con otra persona que le gusta lo mismo que a ti. Me hacía sentir comprendido, de igual manera con Sehun -que también estaba interesado en ser guionista-, chico por el que alguna vez tuve sentimientos, que rondaban más por lo físico, pero que por el contrario, ahora ya no podía ver nada más que un amigo y futuro colega cuando entremos a nuestro primer año.