|| Eres el Correcto || Joel Pimentel y Tú || TERMINADA ||

•39

Narra _______ :

-Me arrepiento de esto -menciono mientras trato de recuperar el aliento al igual que Joel, quien me ofrece una sonrisa mientras deja caer las bolsas al césped.

Ninguno de los dos pudo llegar al final quedando en primer lugar. Al inicio pensé que él iba ganar por los dos escalones que llevábamos de diferencia pero cuando me di cuenta íbamos a la par y luego de un tiempo ya ni siquiera podíamos seguir.

Me dejo caer en el césped mientras observo el cielo estrellado sobre mi. Es inevitable para mí no pensar que esta noche el cielo se ve mejor que nunca; que las estrellas se ven más brillantes que todas las veces...

-Siento que voy a morir -se queja al dejarse caer a mi lado -Aunque no fue una mala idea llegar hasta aquí arriba.

-No lo niego. Me gustó apesar de que creí que iba desmayarme por deshidratacion -suelto una risita y volteo cuando Joel toma mi mano.

No decimos nada y simplemente nos dedicamos a mirarnos. En realidad quiero decir tantas cosas pero no encuentro la manera en la que podría expresar lo feliz que me siento en este momento.

Los sentimientos suelen ser inexplicables algunas veces y en realidad con una mirada sincera, basta para que la otra persona sepa lo que quieres decir y piensas de ella.

Mutuamente.

-Deberíamos comer el helado antes de que se arruine -opina él y yo dejo un casto beso en sus labios para seguido incorporarme y tomar la bolsa.

-Helado con chocolate y gomitas con ¿papas, cheetos o doritos? -le pregunto sacando las bolsas.

-¿Y si hacemos una mezcla? -me pregunta al incorporarse -Busquemos nuevos sabores.

Dejo de hablar mientras veo como abre la bolsa de papas seguido del tarro de helado, el cual ya no está tan sólido como en un inicio.

-Come -me dice al estirar una papa con helado frente a mi y yo frunzo mi ceño ya que aunque no la haya probado se que no debe tener un sabor agradable.

-¿Por qué yo primero? Hazlo tú. -aparto su mano.

-Las damas primero, así me enseñaron en la escuela.

-No creo que sea de mi agrado.

-Si no la pruebas no vas a saberlo. Anda, ya no eres nena, come.

-Deja de insinuar que también estoy vieja.

Él ríe y yo tomo la papa de su mano para llevarla a mi boca y comerla. No es que tenga un sabor malo simplemente nunca he sido de las personas que buscan mezclar su comida, a excepción de algo que en verdad sí me gusta mezclar.

-¿Agradable?.

-No te voy a mentir, si es agradable pero nunca he mezclado la comida.

-Yo tampoco hasta ahora -menciona volviendo a meter otra papa en el helado para seguido comerla -, y no pensé que sabría tan bien.

-Me conformó con el pan con maduro.

-¿Eso sabe bien?.

-Así como a ti te gustan tus patatas con helado a mi me gusta el pan con maduro -sonrío metiendo una cucharada de helado a mi boca.

-Cuando regresemos a casa voy a hacer eso.

-¿Me invitas? -pregunto mirándolo y él asiente.

-No lo preguntes, sabes que si.

Hablar con Joel mientras comemos mezclas extrañas en medio de risas, en realidad es lo mejor que pudo pasarme esta noche.

No quisiera que este momento termine, si pudiera detendría el tiempo para no tener que regresar a la que ahora es mi vida.