In the paradise 35

164 12 0
                                    

Habíamos llegado a la casa de los padres de Michael, todos estaban sentados en la mesa. Michael estaba a mi lado izquierdo y Janet en el derecho.

—Todos estamos muy contentos de saber que formaras parte de la familia, Elizabeth. —Dice Katherine y me sonríe.

Sonreí: —Gracias, señora Jackson. Créame que me siento muy feliz por pertenecer a una familia tan bonita como la de usted. —Digo nerviosa y Michael sonríe tomando mi mano por debajo de la mesa.

—Y cuéntame, hija. ¿Ya tienen fecha fija para la boda?

Limpié mi boca con la servilleta y me limité a contestar: —No aún no. —Miré a Michael. —Quisiera esperar para que Michael termine su gira y pueda estar sin ese compromiso por el momento. Sé que ya la gira lo absorbe bastante. —Digo y Katherine sonríe.

—Pues por mí, me caso hoy mismo. —Dice Michael y me besa el cien. —¿No es fabulosa, madre?

Sentí mis mejillas teñirse. —Y dime Elizabeth, ¿Cuándo me vas a dar nietos, preciosa? Estoy esperando por ellos. —Dice Joe y lo miré.

La mano de Michael se coloca en mi pierna lentamente, subiéndola y metiéndola entre el vestido.

Tosí por los movimientos de Michael debajo de la mesa, me impedía pensar con claridad. —Y-Yo—Aclaré mi voz, Michael sonríe en victoria. —No sabría decirle, no hemos pensado en ello todavía—Sonreí. Y bajé mi mano para detenerlo, con discreción.

—Joe, todo a su tiempo cariño. —Dice Katherine y nos mira a ambos—Los chicos aún tienen muchos planes.

—Sí, lo sé, pero de verdad ya muero por tenerlos.

Todos en la mesa comenzaron a reír.

—Estás muy sonrojada, Beth ¿Te encuentras bien? —Dice Janet y yo tallo mi rostro en frustración, Michael seguía molestándome por debajo de la mesa y yo no podía detenerlo.

Asentí, sentía mi cuerpo entrar en calor. Michael estaba como si nada, conversando mientras que debajo de la mesa estaba portándose mal. —Sí, muy bien. Es sólo que me ha tomado por sorpresa las preguntas—Mentí.

—Bien. —Dice y continúa comiendo.

Michael se acerca a mi oído y me susurra: —¿Te acuerdas que te gané en nuestro encuentro y no puedes negarte a nada de lo que te pida por un día entero? —Dice seductor.

Tragué saliva, temía por lo que me pediría. Lo miré—No pidas hacer nada inapropiado frente a ellos. —Le digo en susurro.

—No será frente a ellos, si no en su habitación. —Dice besando mi mejilla.

Cerré los ojos por un par de segundos.

—Discúlpate y sube al baño, te veo en ahí en cinco minutos. —Me dice en el oído y se voltea al frente. —Disculpen, olvidé que tenía que hacer una llamada importante, no demoro. Con su permiso. —Dice y todos asienten. Michael continúa y sale del comedor.

Dejé pasar un par de minutos.

Dios mío, perdóname por esto.

—¿Me disculpan? —Pido permiso para levantarme—Ya regreso.

—¿Todo bien, cariño? —Me pregunta Katherine.

—Sí, todo bien. Subiré al baño.

—Bien.

Salí del comedor y subí las escaleras. Me senté en la tapa del baño y a los dos minutos Michael la abrió. —Sígueme—Dice con una sonrisa, en el marco de la puerta.

Neverland | EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora