"Prometí nunca más enamorarme de alguien, y tú no serás la excepción."
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"No conozco al amor, sólo al odio y la venganza."
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"Después de todo, no somos tan diferentes."
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Rápidamente, salí de ahí corriendo hasta que llegué a mi casa. Me acosté en mi cama boca abajo y lloré con la misma intensidad de aquel horrible día en mi pasado.
Flashback "Odio a los hombres, los odio!" gritaba llorando mientras cortaba y quemaba cada una de las fotografías que tenía con mi novio, "y siempre los voy a odiar por qué nunca jamás me volveré a enamorar!" Fin de Flashback
Dentro de unos minutos sonó el timbre, y como no había nadie en casa, tuve que bajar yo para ver quien era. Al abrir la puerta, me encontré con la persona que menos quería ver en ese momento.
"Qué haces aquí?" le pregunto.
"Sólo vine a ver cómo estabas.."
"Estoy bien, adiós."
Estaba a punto de cerrar la puerta cuando Mario puso su pie para evitar que la cerrara.
"Sé que sólo lo dices para que te deje en paz, pero en realidad no lo estás," me dice.
No pude evitar soltar la puerta y comenzar a llorar. De alguna forma, terminé acurrucada sobre Mario en el sofá de la sala. Básicamente, no tuve de otra más que abrazarlo por que en el momento, necesitaba del abrazo de alguien. Mientras yo miraba hacia la nada, él acariciaba mi cabello.
"Gracias," le digo sonriendo, "gracias por ser un idiota y seguir regresando a pesar de como soy."
"Lo tomaré como un cumplido."
Ambos nos reímos.
"No quiero imaginar lo que me espera cuando mis papás se enteren de lo que hice.."
"Lo más probable es que serás suspendida y qué tus papás te castigarán diciendo que no podrás salir en la cantidad de días que te suspendieron."
"O también puede que me expulsen."
"Si eso pasa, yo me iré contigo al colegio que decidas ir."
"Por qué eres tan lindo conmigo?"
"Cómo me quedó claro que no me quieres como novio, sólo quiero ser tu amigo."
Me puse a pensar por un momento. Lo más seguro era que yo y Joel no nos volveríamos a dirigir la palabra. Honestamente, no tenía a nadie más que me entendiera.
Doy un gran suspiro, "No lo sé.."
"Prometo no fallarte."
"No sé si eres capaz de soportarme."
"Oh, créeme que sí lo soy," responde con una sonrisa.
"Está bien," reí, "pero sólo por que yo también soy capaz de soportarte."
