"Prometí nunca más enamorarme de alguien, y tú no serás la excepción."
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"No conozco al amor, sólo al odio y la venganza."
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"Después de todo, no somos tan diferentes."
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"Eyy Joel!" lo saludo con una sonrisa al contestar.
Sin embargo, él no parecía estar muy contento. Básicamente, su cara lo decía todo.
"Que sucede Joelito?" le pregunto, aún sabiendo que estaba enojado conmigo.
"Dónde estas Morín Ignacia Georges Ramos?!"
Al escucharlo decir mi nombre completo, supe que estaba más que enojado conmigo.
"Estoy con Mario," le respondo.
El se tapa la cara, "Morín, por qué?"
"Ya te conté mi plan, Joel."
"Sí pero nunca acordamos en que te escaparías del colegio!"
"Es sólo un día," le digo.
"'Is síli in díi,' si como no, ese día se convertirá en días, después semanas y luego meses!"
"A ver Joel cálmate."
"Que me calme?! Cómo quieres que me calme si estás con ese tal Mario, quien sabe que está planeando en hacerte," me dice.
"Joel, te preocupas como si no me conocieras!"
-Narra Joel-
"Morín es que yo..."
"Que parte de no te preocupes no entiendes?"
"Morín escúchame!"
"Ya se que me vas a decir-"
La interrumpo, "No sabes que te voy a decir por que esto es algo importante."
"Dime entonces."
"Es algo que quise decirte hace mucho tiempo pero-"
De pronto veo a Mario aparecer detrás de ella.
"Perdón por interrumpir pero decidí comprarte otro helado, pero esta vez de arcoíris, tiene de todos los sabores, mira pruébalo," él le dice.
Ella lo prueba con una sonrisa.
"Me encantó! Gracias Mario," le dice antes de abrazarlo.
Honestamente, ya no sabía si seguía fingiendo o si en realidad se había enamorado de él.
"Perdón, que me ibas a decir Joel?" ella me pregunta.
"No... Nada, luego te digo," le respondo.
"Está bien, nos vemos mañana, bye."
"Bye..."
Ella termina la videollamada.
Doy un gran suspiro antes de acostarme en la cama a mirar el techo de mi cuarto. No podía pensar en otra cosa más que en ella. Yo no quería que saliera lastimada de esta batalla, pero tampoco que ganara. Si ella saliera lastimada, me afectaría a mí también por que su dolor es mi dolor, pero si ella saliera ganando, seguiría siendo igual de fría, tal vez más y sin siquiera saber lo que es el amor. Yo sólo quería que todo volviera a la normalidad, cuando sólo éramos ella y yo.
-Narra Morín-
Al día siguiente, lo primero que hice al levantarme fue llamarle a Joel.
