Kisses on the Bottom ➳ McLennon

Capítulo XLVIII

   Dejé que Paul caminara delante de mí para pode verle el trasero e imaginarme un sinfín de encuentros sexuales.

   Tal vez el estrés me hacía querer tener sexo de una vez por todas.

   —¿Ideas mías o me estás mirando el trasero? —Paul formuló su pregunta sin mirarme, sin detenerse por el pasillo que nos llevaría a la puerta de salida.

   —Ideas tuyas.

   —Sí, claro.

   Quise reírme, pero los nervios lo impidieron cuando los vigilantes del edificio abrieron las puertas y la luz de sol iluminó la entrada. Salimos y nos detuvimos detrás de la cinta roja, la cual estaba rodeada por policías un par de escalones más abajo. Frente a nosotros había un micrófono con un paral.

   La prensa estaba lista para hacer preguntas y anotar, y las cámaras listas para tomar fotos y grabar, mientras que el resto de las chicas sólo alzaban sus carteles y esperaban una respuesta al tweet de Brian. Y yo esperaba que se lo tomaran de la mejor manera y que todo siguiera el mismo curso que antes.

   —Eh, ¿hola? —toqué el micrófono con mi dedo índice para comprobar el sonido. Carraspeé—. ¿Están bien?

   Se escuchó un "no" sostenido, seguido de un ligero llanto en el fondo.

   —Yo sé que todo es confuso y que tal vez piensen lo peor de nosotros, pero les vamos a explicar lo que pasó realmente.

   Todo se quedó en silencio y ellas nos miraron con atención, así como los periodistas. Suspiré, miré a Paul y luego las volví a ver hacia al frente.

   —La primera vez que vi a Paul me pareció el chico más lindo que mis ojos pudieran haber visto. Lo nuestro comenzó como una amistad, luego de que Martin nos rogara aceptar el papel para la serie-película gay... A mí me gustaba estar con él, y a él le gustaba estar conmigo. Luego de un par de días, cuando el primer capítulo de la serie fue lanzado, comenzó a surgir todo esto del McLennon... Y ahí fue donde a Martin se le ocurrió hacer que tuviéramos una relación falsa para darle más protagonismo al asunto...

   Callé durante un momento para poder ver los rostros teñidos de expectativa.

   —Y comenzamos hacerlo, pero no por mucho tiempo... Cada vez que salíamos, cada vez que hacíamos cualquier cosa, algo estaba creciendo en el interior de nosotros y eso fue, incluso, más fuerte que esa relación falsa. Nos enamoramos de verdad, y estamos juntos ahora porque queremos, porque nos queremos y porque nos agrada estar juntos en todo y para todo, no porque sea parte del contrato. Eso lo hablamos con Mal y con Martin: le dijimos que no estábamos actuando, que en verdad nos queríamos, y que eso de la relación falsa la habíamos dejado a un lado desde hace mucho. Ahora, en cuanto con lo de Brian, les explico: él fue contratado por Martin para manejar nuestra relación, pero nos restringía mucho en cuanto a lo que publicábamos en las redes sociales; prácticamente no éramos nosotros, y eso no me gustó: por eso le insistí a Martin que Paul y yo podríamos manejar todo sin él, y aceptó. Eso es todo lo que sucedió. Y si piensan que lo tenemos es una relación falsa, les digo: no es una relación falsa. En serio nos queremos muchísimo.

   Cuando retrocedí un paso, la prensa comenzó a alzar sus manos para hacer preguntas y las chicas comenzaron a gritar emocionadas y a llorar todavía más. Tal vez todo había funcionado.

   "¡Un beso, por favor!"

   "¡Sí, sí! ¡Pueden coger aquí mismo, a mí no me molestaría verlo y grabarlo!"

   Paul emitió una pequeña risita y me miró a los ojos, teniendo el rubor presente en sus mejillas gorditas.

   —Un besito creo que las haría sentir mejor, después de tanta mierda que han pasado, ¿no?