Capítulo 55 | final.

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📘—;; Las letras en cursiva, o son recuerdos, o son intervenciones mías.

Leer con este sonido de fondo. Lo hará mágico.

— ¿Estás segura? —  murmuró Jimin, a mi costado

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— ¿Estás segura? —  murmuró Jimin, a mi costado.

Lo miré con adoración, al notar su inquietud. Asentí lentamente.

El padre abrió su biblia. Luego levantó su mirada para regalarnos una cálida sonrisa.

—  Queridos hermanos, estamos aquí reunidos para unir a estas dos almas en el nombre de nuestro padre todo poderoso. Estas dos personas, han atravesado por tantas pruebas en la vida, pero que han sabido superarlas con amor...

Mientras el padre hablaba, se me vinieron un montón de recuerdos  con Jimin, algunos buenos, otros no tan buenos, pero en todos estábamos juntos.

— Hola, ¿me prestas un borrador? 

— Sí.

—   ¿Cómo te llamas?

—  Azul, digo, me llamó Gaila. 

Ese recuerdo. Entonces, ahí fue cuando descubrió mi nombre. Volteé a mirarlo, sorprendida; pero a la vez emocionada.

—  Entonces, así fue como lo supiste —  murmuré bajito, para que solo él me oyera.

Él giró a mi dirección, algo desconcertado por mis palabras. Su ceja estaba algo arqueada.  

—  Me gustas, Park Jimin. 

  ¡Bravo, Grey! ¡Excelente broma! ¡Ya salgan de su armario!

Nuevamente ese recuerdo aun amargo apareció en mi mente. Pero ahora, todo tenía un aura diferente; pues lo que antes dolía recordar, ahora lo recuerdo con gracia y con cierta emoción.

—  Estoy embarazada.

—  Tendremos que casarnos, él o ella se merece crecer en una familia.

En ese momento, me convencí por completo que él era el indicado. Al ver su entusiasmo por la paternidad y la responsabilidad que demostró en el momento más idóneo.

El padre después de haber citado varios pensamientos que contenía la biblia. Nos sonrió, para seguidamente hacernos la pregunta de rigor.

— Esposa y Esposo, ¿venís a contraer matrimonio sin ser coaccionados, libre y voluntariamente? —  preguntó el sacerdote.

—  Sí, venimos libremente — contestamos en unísono.

— ¿Estáis decididos a amaros y respetaros mutuamente, siguiendo el modo de vida propio del Matrimonio, durante toda la vida?

— Sí, estamos decididos.

— ¿Estáis dispuestos a recibir de Dios responsable y amorosamente los hijos, y a educarlos según la ley de Cristo y de su Iglesia? — cuestionó, el sacerdote.

Artificios ❲ Park Jimin ❳ | Terminada.Where stories live. Discover now