Urban Love capitulo 2

Agosto.-Capitulo 1.

-Wow eso es increíble, estoy seguro de que te encantara la escuela, es increíble.

-Sí, enserio no puedo creer que estoy hablando con el capitán del Trenton en pleno Summerslam.

-Amo la lucha libre, es mi segunda pasión después del baseball y pues es mi regalo de cumpleaños, deje a mi novio haciendo fila para entrar.

-Así que Gordon vino contigo- me sorprendí pero luego volví a la realidad.

-Lo siento, a veces olvido que lo mío con Gordie fue noticia bomba, nadie se lo esperaba, solo nuestros mejores amigos lo sabían y al final del primer año lo hicimos público, fue difícil al principio pero nos acostumbramos.

-Lo recuerdo, para todos los seguidores del equipo fue una noticia rara, nunca se había dado algo así en el baseball, bueno tal vez no públicamente, pero si, fue algo nunca antes visto y pienso que fue muy valiente de su parte.

-Sinceramente me alegra escuchar mucho de un fanático, es bueno saber que no fue malo para todos, ¿Y vienes solo?

-Pues al parecer ambos coincidimos y yo igual deje a mi novia haciendo fila para entrar- ambos comenzamos a reír- se llama Leonor, ella igual es fanática de Thunder, de hecho la conocí en uno de sus partidos.

-Eso suena increíble, espera.

Mi turno llegó para comprar, a pesar de la enorme fila para comprar me sorprendió encontrar aún muchas camisas, esos de la WWE siempre estaban listos para todo, sobre todo para una fanaticada loca por comprar sus productos. Una muchacha al igual bastante joven probablemente de unos veinticinco años estaba atendiendo esa parte del puesto.

-Bunas tardes, ¿Qué te doy?

-Hola buenas tardes, me podrías dar una camisa de Seth Rollins talla grande, una del Balor Club igual grande, la nueva de Aj Styles y los guantes azules, igual dos camisas de Kevin Owens y la de Sami Zayn todas en grandes y la camisa y chamarra de Randy Orton, oh e igual la de Brock Lesnar.

La señorita anotó todo en una hoja y fue por todo mi pedido, tardó unos minutos porque era un pedido un poco grande y tuvo que buscar todas las cosas, después llegó con una bolsa que contenía todo mi pedido.

-En total son doscientos diez dólares.

Saqué mi tarjeta de crédito y pague el enorme pedido. Después de recibir la nota me vire para despedirme del muchacho que acababa de conocer.

-Pues me doy cuenta que los del Trenton pagan muy bien- sonreía.

-Solo un pequeño ahorro, bueno fue un placer conocerte, espero verte seguido en la escuela, diviértete...- me quedé pensando cuando recordé que aún no me sabía su nombre.

-Soy Zach Allen, fue un placer Dominic.

Tardé unos minutos en encontrar a Gordie en la enorme fila, para mi fortuna ya estábamos a punto de pasar y conocí un amigo nuevo.

-¿Por qué tardaste tanto?-luego miró la gran bolsa de compras, sorprendido- ¿Todo eso compraste?

-Cállate que te compré dos camisas.

-De toda esa enorme bolsa solo me tocan dos camisas.

-Así es y ahorita que entremos te la pones.

Al llegar a la puerta los guardias nos revisaron y nos dejaron pasar. Los lugares que Gordie compró se veían increíbles y disfrutamos de un increíble espectáculo, Aj Styles dando una increíble lucha contra Kevin Owens,o a Seth Rollins y Dean Ambrose ganando los títulos en parejas contra Cesaro y Sheamus al igual de Finn Balor haciendo su aparición como el demonio, o a Brock Lesnar reteniendo el titulo universal, sinceramente todo fue increíble y Gordie se veía guapísimo con su camisa de Seth Rollins. Saliendo de la arena nos dirigimos a comer unos hot dogs cerca de la playa, íbamos comiendo mientras caminábamos por la arena bajo la luz de la luna.

-Muchas gracias Gordie.

-No es nada amor, por ti lo que sea, hasta estar cuatro horas viendo lucha libre.

-Fue un increíble verano, mañana inician las clases y estoy emocionado por empezar, aunque es un poco fastidioso tener que llevar las pruebas para entrar al equipo.

-Es tu deber como capitán del equipo amor.

-Lo sé, espero que este sea un buen año, es nuestro último de la preparatoria y después a la universidad.

-¿Has pensado algo acerca de los Yankees?

-Sinceramente no, enserio quiero ir a la academia de los Yankees sobre todo porque está en Nueva York y así no pueden alejarme de ti pero algo me dice que debo ir a la universidad para asegurar un futuro.

-Escuché que Chris si irá a la academia, y al perecer él y Lily igual van enserio, se tardaron un poco más que nosotros en volverse novios pero hasta ahora todo bien con ellos.

-Sí, me alegro mucho por ellos, me sorprende que no estés celoso por no recibir invitación a la academia, solo Chris y yo la recibimos.

-Bueno sinceramente nunca fue mi prioridad jugar baseball en las grandes ligas y estoy muy emocionado por mandar mi solicitud a la universidad de abogados de Nueva York.

-Estoy seguro de que entraras Gordon.

-¿Y has pensado lo otro que te dije?- Esa pregunta, esa pregunta que quería evitar a toda costa.

-Sobre irnos a vivir juntos.

-Exacto.

-No lo sé Gordon, aún falta un año y tenemos tiempo para planearlo bien, créeme que me encantaría pasar una vida contigo pero...

Mi teléfono empezó a sonar, era mi papá.

-Me pregunto si alguna vez tu teléfono dejara de interrumpirnos en momentos importantes- dijo Gordie con una sonrisa- contesta.

-¿Sí?

-Dominic ya es muy tarde, ¿En dónde están?

-En la playa comiendo hot dogs.

-Ahí quédense iré por ustedes, ya me urge que recojas tu carro del taller.

Colgó.

Saqué mi cajetilla de mi bolsillo trasero y saqué un cigarrillo y lo encendí para ver claramente el humo saliendo debido a la obscuridad.

-Ya te dije que dejes de fumar Dominic.

-Algún día lo dejare, lo prometo.

-Es gracioso, en menos de seis horas debemos ir a la escuela y estamos aquí en la playa comiendo hot dogs y fumando, bueno tú estás fumando.

Sonreí.

-Ven aquí.

Lo tomé de la cadera y lo acerqué a mi cuerpo, después de eso dirigí mis labios a los suyos para un romántico beso.

-Te amo Gordon, eres lo mejor que me ha pasado.

-Yo igual te amo y pase lo que pase quiero estar contigo.

Y así seguimos abrazados esperando a mi papá con uno que otro beso ocasional aunque a veces con cada beso regresaba ese recuerdo, ese pequeño recuerdo que por más que quisiera no desaparecía, de una promesa que había hecho hace poco más de una año.

Alex.