bet ◜ဗ◞ yoonmin

𝓓𝓲𝓪 𝓷𝓾𝒆𝓿𝒆

—Así que... U-mm.. Profesora Lee, ¿P-Podría quitarme diez puntos y dárselos a YoonGi? —El pequeño jugaba con sus dedos, manteniendo su vista en los mismos.

La mujer miró al rubio de reojo y levanto una ceja, ¿Porqué demonios quería que le quitará diez puntos y se los diera a YoonGi? —Señor Park, ¿Porqué razón debería quitarle puntos y dárselos a Min?

—Um... Porqué... Es mí culpa que estuviera durmiendo.. —Rascó su nuca con su izquierda y desvío su mirada hacía algún otro lado que no fuera aquella madura mujer.

—¿Su culpa señor Park? —La pelinegra pusó su pierna derecha encima de la izquierda y entrelazó los dedos de su mano izquierda con los de la derecha.

—Pues sí... Por mí culpa él se fue a dormir muy tarde...

La mujer de cabellos negros con ayuda de su mano derecha retiro sus lentes y miró al de cabellos rubios enarcando una ceja —Usted sabe que los puntos perdidos en este viaje no se van a recuperar, ¿Verdad?

  —Lo sé señorita Lee. —Levanto su mirada y miró fijamente a su maestra— ¡P-Pero no me importa!

—¿Porqué no le importa? —Llevó una de las patas que pertenecían a sus gafas a sus labios, atrapando el objeto entre los mismos.

—Porqué.... Uhm... —Las mejillas de JiMin acogieron calor y un lindo color carmín se hizo presente, sintió como se formaba un nudo en su garganta, es decir, ¿Cómo diablos iba a decirle a su maestra que le gustaba YoonGi? 

—Señor Park. —La gruesa voz de la mujer le hizo salir de su nube de pensamientos— Es bastante lindo que quiera ayudar a su novio. —Sonrío.

—¿Eh? —Rápidamente levanto su cabeza y volvió a fijar su vista en la mujer, la cual tenía una pícara sonrisa dibujada en sus labios.

—Haremos esto, le devolveré los puntos al señor Min y usted se quedará con sus diez, es decir, yo también fui joven, y sé lo que es querer una noche de pasión desenfrenada. —La mujer le dio un guiño, aún manteniendo aquella sonrisa pícara en sus labios.

—¡Oh, N-N-No! ¡U-Usted lo esta malinterpretando! —El belfo inferior de JiMin comenzo a temblar, provocando que titudeara al hablar.

—Tranquilo señor Park, no tiene porque ocultarlo, anoche cuando estaba pasillando para saber si todos estaban dormidos pude escuchar cosas.. Muy buenas cosas. —Esto último fue pronunciado para sí misma por la maestra— Provenientes de la habitación de ustedes dos, pero no se preocupe, ahora, vaya por ahí a hacer quién sabe que cosa.

Una sonrisa se dibujo en la comisura de los labios de JiMin y asintió con la cabeza, para luego abandonar el lugar, ahora, su misión era encontrar al de cabellos anaranjados, aún que, este no tenía un muy buen escondite, ya que en aquellos prados verdes su anaranjada cabellera resaltaba de más. JiMin respiró hondo, dejando salir el aire acumulado en sus pulmones y se puso en marcha al verde lugar, el cual de por sí era realmente lindo y había vegetación de sobra.

Puso su mano derecha sobre el hombro de YoonGi, el último, al sentir el tacto sin aviso alguno y sin siquiera haber escuchado cuando JiMin había llegado dio un pequeño salto en su lugar, volteo a ver hacía atrás con el ceño fruncido, preparado para golpear a la persona que se había atrevido a asustarle, es decir, nadie asustaba a Min Swag YoonGi, pero sus ganas desaparecieron al ver a JiMin, o quizás aumentaron, JiMin no sabía exactamente que era lo que representaba la cara de YoonGi.

—JiMin, ¿Ahora qué quieres? —Se soltó de forma brusca del agarre ajeno, pero JiMin no le tomó importancia.

—La maestra Lee te devolverá los diez puntos, no tendrás que volver a Daegu. —Contestó con una sonrisa, una sonrisa de esas en las que sus ojos se escondían tras pequeñas líneas.

—¿Qué? 

—Que la maestra Lee te devolverá los diez puntos.

—No hablo sobre eso, hablo de que.. ¿Cómo mierda sabes sobre que volvería a Daegu?

—Un mago nunca cuenta sus secretos. —Le dedicó un corto y rápido guiño, acompañandolo con una sonrisa, para luego disponerse a abandonar el lugar.

—¡¿Qué?! ¡Park JiMin! ¡Vuelve aquí! —Rápidamente abandono su lugar y se echo a correr detrás del rubio.

Vaya que, sí que hacen linda pareja.