Amor en notas musicales (#1 Saga Amor entre acordes) EDITANDO

Capítulo 47

La guardé en el bolsillo de mi maleta, algún día haré algo con ella menos tirarla, quiera o no sigue siendo un recuerdo precioso en mi memoria. Me cambié y dirigí a la cocina a calentar el café, definitivamente Dasha no planea despertarse hasta más tarde. Mientras esperaba a que mi bebida caliente estuviera lista me senté en el comedor a observar mi celular y de nuevo ese mensaje del número desconocido llegó a mi bandeja de entrada.

"¿Por qué no contestas?"

Pensé si debía o no responder, me quedé ahí un buen rato mirando la pantalla hasta que después de un debate mental, opté por contestar.

"Porque no sé quién eres, te he dicho que te equivocas de persona, en serio, voy a bloquearte"

"No, espera, no lo hagas... Tengo que hablar contigo urgentemente"

"Para, me asustas, ¿Por qué no me dices quién eres?"

"Porque..."

Tardó un buen rato en escribir, me estaba poniendo nerviosa.

"Solo ignora eso, te pido por favor que hablemos"

"No, no te conozco y no sé quién eres así que disculpa en verdad, pero voy a bloquearte"

"Hazlo, sea como sea yo siempre hallaré la manera de encontrarte"

Me quedé helada y sin pensarlo bloqueé el número, tragué saliva con dificultad ¿Quién es? Y ¿Por qué me habla como si me conociera? Solo un nombre vino a mi cabeza... "Clark" pero me resulta ilógico pues cambié mi número y nadie se lo ha pasado... o eso quiero pensar. Mi mente se nubla de tantos pensamientos, dejándome confusa y totalmente perdida, tanto que pegué un brinco apenas sentí las manos de Dasha en mis hombros.

—Listo muñeca—dice somnolienta—ya me recuperé

Esbocé una sonrisa nerviosa y solté unas risas traviesas.

—Media hora como lo dijiste

—Exacto, yo cumplo ja, ja, ja, y veo que calentaste el café... ¿Me das?

—Eh...—asentí y me levanté—Siéntate entonces, ya lo traigo

—¡Woah! Hoy iré de compras con mi nueva mejor amiga

Solté carcajadas, estoy emocionada por ver que tanto planea hacer Dasha conmigo.

***

—¿Aquí? —Dasha arquea la ceja contemplando la enorme tienda

—Sí

—Pero... ¿No es muy caro?

—Papá me depósito suficiente dinero y hay unos conocidos que quiero volver a ver así que, ¿qué dices?

—Pues—hace una mueca aún indecisa, pero después suspira—De acuerdo, no pierdo nada ja, ja, ja

—Sígueme entonces

Tomé de su muñeca y apresuramos el paso, charlamos un poco antes de pararnos frente al salón de belleza de Jeannette puesto que era seguro que si íbamos al de James primero no nos dejaría salir e incomodaría por completo a Dasha.

—¡Evangeline! —Jeannette esboza una sonrisa y luego se asombra al ver a Dasha de mi lado—¿Dasha?

—¿Jeannette? —primero hay un silencio y después ambas sonríen de oreja a oreja corriendo una tras la otra para fundirse en un abrazo—¡Oh Jeannette! ¡Tiempo sin verte!

—¡Lo mismo digo hermanita!

—¿Hermanita? —dejo caer la mandíbula del asombro

—No, no, no—Jeannette hace un gesto con las manos y ríe de manera divertida—es una de mis mejores amigas en Bolshoi y no nos hemos visto desde qu-