Dentro de tus ojos. |Axl Rose, Slash|

Capítulo veinticuatro.

"No tengo ninguna esperanza.
Un paso más en falso, podría provocar mi caída.
Cuando estoy lejos de casa,
no me llames por teléfono
para decirme que estás sola.
Es fácil engañar.
Es fácil tomar el pelo.
Pero difícil ser liberado."

Eyes without a face. - Billy Idol.

Axl.

Ha pasado alrededor de dos meses desde ese día. Las dos presentaciones en esa noche, fueron espectaculares y lo del día siguiente, también. Ha cambiado tantas cosas desde ese entonces, las peleas entre Adriana y Steven se hicieron más fuertes, supongo que es porque ellos se engañan mutuamente. Duff y Slash producen más melodías, e Izzy está más inspirado al igual que ella.

Erin y yo hemos regresado a nuestra típica relación de novios enamorados. La veo y me pregunto: "¿Por qué a veces piensas en tu mejor amiga?". No sé qué responderme, aun así no podría dejar a mi dulce, ahora más que nunca. La necesito y mucho.

Tenemos altibajos como toda pareja, llevar juntos un año no es un juego. Ella hace que a veces la quiera con vehemencia y en otras, la repudie y odie con toda mi alma, es una relación rara. No podría dejarla, porque nos necesitamos juntos. No lograríamos vivir separados.

Ella sabe como soy, cómo me comporto con las chicas y lo toma normal. Desde que Pamela se convirtió en nuestra bailarina en lo shows, no he podido dejar de verla (más seguido), durante todas estas semanas. Es una mujer hermosa y atrevida; además, con ella no discuto. Somos como una pareja de amigos que se tocan y follan del bueno. Con una, siento cariño por estar a mi lado, y en ella, siento pasión y atracción inmediata. Erin jamás podrá darme lo que necesito en la cama.

Los chicos y yo nos llenamos más de problemas con el alcohol y las drogas, ahí es cuando sale nuestra "mamá" Kayla y nos trata de sacar del hoyo. Es difícil cuando siempre hemos sido así, y más cuando la veo, no puedo dejar de tomar y discutir con ella. Estoy empezando a verla como mi amiga, y eso es bueno, hay veces en que en la odio por lo que causó en mí. Por convertirme en un idiota sentimental.

Desde aquella mentira, cuando le dije que solo la quería porque era mi amiga, todo cambió para mejor. Porque ya no sufriría por una tonta sangrona y aguafiestas que solo piensa en un tarado.

Adriana cuenta muy animada a Duff sobre la amistad muy "cercana" entre su mejor amiga y Slash. Yo no me creo el cuento de que eso "cercano" no haya pasado a mayores. Saul no es ningún santo y menos lo sería con alguien que quiere. Izzy me mira como buscando respuesta a mi actitud, ya que me siento harto de esa "parejita". Steven habla con Marc, se han hecho muy cercanos por Slash. Pasa mucho tiempo con nosotros al igual que Del James.

Dentro de tres meses, ella se alejaría un tanto de nosotros por la universidad, y es la mejor noticia. No verla más, algo que ansío tanto.

Camino con molestia y con un cigarro en los labios hacia afuera, me tienen cansado con ese tipo de conversación. Falta poco para que Pamela viniera, necesito un rato de ella y en la noche, ver a Erin.

Unas risas desde la esquina de la calle llaman mi atención. Mis ojos se detienen sobre el par de tortolos. Él se mueve al lado de ella, mientras que la castaña tiene puesto su galera, y sostiene con sus manos los lados de aquel sombrero. Su sonrisa grande y las risas de mi amigo hacen que un profundo dolor de cabeza, cayera sobre mí.

—Soy Slash, ¡me encanta tomar Jack Daniel's y flirtear a toda chica que se cruza en mi camino! —ella hace una postura de chico malo y él está al borde de estallar en carcajadas.

—Kay, ¡tú sabes que a la única chica que flirteo es a ti! —le lanza un suave codazo, y sus mejillas de ella se sonrojan. El brazo alrededor de los hombros de la chica no se hace de esperar. Mi mano se forma en un puño con el aumento de sus escenas. Tranquilo, Axl. Ahí es cuando me doy cuenta que no la he olvidado.

Al estar casi a medio metro, ellos se dan cuenta de mi presencia. La sonrisa hipócrita de mi amigo me causa náuseas, y su sola presencia de ella, me produce un amargo sabor a traición.

—¡Axl! —se acerca hacia mí y me da un leve beso en la mejilla, produciendo un cosquilleo en el centro de mi pecho. Por unos segundos, pude sentir la calidez de sus labios. Finjo una sonrisa, mientras el moreno está con malhumor por tal acercamiento—. ¿Por qué estas solo aquí? ¿Los chicos...?

—No... —mi voz sale gruesa y rasposa, cómo un cuchillo afilado a punto de entrar en su próxima víctima—. Ellos están adentro —su mirada perpleja, se produce porque está entendiendo mi punto—, espero a alguien.

La veo abrir su boca para responderme, pero una cabellera rubia la interrumpe. Se cuelga alrededor de mi cuello, y el aroma de su perfume es embriagador desde la distancia.

—Pamela... —susurra a lo bajo, como si le tuviera tirria por el solo hecho de estar con ella. Una mirada de desacuerdo se forma en sus ojos.

Sonrío con malicia, al verla tan molesta como si quisiera arrancar a Pamela de mi lado, como si le incomodara que ya no estemos tan juntos como antes.

—Hola, chicos —la rubia está esplendida y tan extrovertida como siempre, porque les saluda con la mano. Slash regresa el gesto al igual que Kayla. Esta última nos sigue mirando entre decepción y celos—. ¡Lindo! ¿Nos vamos?

—Sí... ¡Vamos! —la tomo de la mano y sin despedirme, corro hacia la calle opuesta de nuestro lugar de ensayo. Pamela habla entretenida de lo que quiere hoy entre nosotros, pero mi mente se encuentra en un trance que no está dispuesto a salir... Aun.

Los días son largos desde aquel día.

Estoy fuera del amor, pero lo voy a arrancar a partir del pasado. 

Voy a dejar esas palabras, porque estoy seguro de que nunca va a durar.