The M.I.L.F. [Peterick/Frerard/Brallon/Jalex]

32

—Lo siento —susurró—. Es que... no puedo hablar... —Patrick ahogó un sollozo.

—Tranquilo... saca eso primero... te hace mal aguantarte.

Pete lo abrazó más fuerte intentando hacer que Patrick se calmara un poco.

En un momento, Patrick se tranquilizó y se secó la cara con las mangas.

—¿Me quieres contar lo que pasó?

—Es... una tontería. Es muy estúpido...

—No creo que una tontería te tenga así.

—Es que son varias tonterías...

—Dime...

Patrick suspiró.

—Es que... Brendon...

—Puta, ese imbécil. Patrick, es que en serio, en serio, no...

—Déjame terminar... es que... es mi mejor amigo, desde los 6 años... tú cuando peleaste con Jack y Dallon, ¿no te sentiste mal? Yo me siento mal ahora, porque... siento que me odia y... me hace sentir un mal amigo, por el simple hecho de ser su amigo y no verlo como nada más... y no puedo creer que se enojó por eso y ahora además está de puta con Dallon. Él no era así, jamás fue así.

—¿Y yo puedo hacer algo al respecto?

—No sé si eso esté bien... p-pero si quieres hacer algo... podrías... solo escucharme...

—Por supuesto que sí.

—Eso... es que en realidad yo... no sé qué le pasa... o si hay algo que yo hice mal...

—Tal vez debiste decirle desde un principio...

—Lo sé, pero él jamás fue serio, así que a veces no sabía si era broma o no... jamás me lo dijo en serio, yo intentaba dejar en claro que solo era mi amigo, pero seguía insistiendo... no sé cómo quería que yo fuera serio si el jamás lo fue.

—Bueno, eso también es cierto...

—Y lo otro... es por mi mamá...

—¿Qué pasó?

—Desde que fue al instituto, quedó la cagada en mi vida... o sea, primero, todo el mundo diciéndome cosas asquerosas de ella... después me entero de que está saliendo con alguien que conoció allá, y sabía que era malo, si era uno de los padres, algún profesor... pero no. Tenía que ser el director, el papá de una de las personas que más me detesta en todo el mundo...

—Ay, Patito... Meagan no te odia...

—¡¿Me estás webiando?!

—No me grites...

—Pete, ¿estás ciego? Si antes de conocerte me odiaba, imagínate ahora... soy el estúpido niñito que se interpuso en el romance de película...

—No entiendo por qué crees que te odia.

—Por favor, antes solo de limitaba a burlarse de mí, decirme cosas feas y de vez en cuando empujarme o tirarme el almuerzo encima. Pero ahora, a parte de hacer eso, me lanzó el batido de chocolate, me quería tirar ese balde de cosas asquerosas... se empeña en humillarme, en hacer que me sienta una basura, en llevarse bien con mi mamá, con lo obvio que es que yo a mi mamá no la comparto... estoy seguro de que ella quiere destruirme.

—¿Ella hizo lo del balde?

—Eso es lo más obvio de todo...

—¿Como lo sabes?

—Vivo al lado de una de sus lameculos, la escuché hablando de eso... además, ¿quién más haría algo así? El resto tiene una vida, por favor. El punto es que ahora me odia el doble porque ahora nuestros padres están juntos y el triple por estar contigo.

—¿Por estar conmigo?

—No me vas a decir que no es obvio que le gustas, incluso de fue a pajear al baño diciendo tu nombre, hay un video y todo... pero...

—Estaba casi 100% seguro de que ella era lesbiana. Y no sé, yo no veo lo que ponen en ese Instagram, no me interesa. Me gusta leer las confesiones y nada más.

—Como sea, ella me odia y me da miedo que después nos separe...

—No, bebé. Solo tengo ojos para ti. Lo que te pasa a ti con Brendon, me pasa a mí con ella. No la veo como nada más que una amiga, de hecho, es mi amiga desde los 8 años. De verdad, no hay nada más.

—Eso no quita el hecho de que me odie... y ahora mi mamá está con su papá... y eso es otra cosa... no estoy acostumbrado a compartir a mi mamá... jamás había tenido que lidiar con esto... y es patético... jamás tuve que compartir nada... y ahora, de un día a otro, mi mamá está con el director... y eso me da miedo, porque es el director... sé que tú no tienes problemas, eres un alumno ejemplar, estás en todo, haces deporte... el director adora a todos los chicos como tú. En cambio yo, soy invisible, no me gusta hacer deporte, soy buen alumno, pero no me gusta meterme en muchas cosas o participar en las actividades, o competir... no me gusta nada de eso... no me siento muy... bienvenido en este lugar... pero mi mamá me dijo que sería la única persona que nos aceptaría a los dos... porque nadie lo hace...

—Yo sí. Te adoro...

—Pero no... es que... es diferente. Entonces es eso... no puedo hacer nada al respecto, solo callarme y dejar que mi mamá sea feliz.

Patrick suspiró.

—Está bien... yo soy su amigo... si quieres puedo hablar con ella, además, siempre vas a ser bienvenido aquí. Si te sientes mal, si no quieres nada, si quieres escaparte un rato... siempre puedes venir aquí, no importa cuando, no importa si llueve, no importa si es que hay un huracán afuera, no importa la hora o el día. Me llamas y yo voy a estar para ti.

Patrick sonrío levemente, se había quedado sin palabras.

—Ni siquiera en mis sueños más cursis me habría imaginado una cosa así... —se rió—. ¿Como fue que alguien como tú se pudo fijar en una cosa tan caca como yo...? —Patrick lo abrazó—. Muchas gracias...

—Te amo. No sé cómo siento tanto por ti en tan poco tiempo, pero... te amo.

Patrick no le respondió, solo lo abrazó más fuerte. Sintió por primera vez en su vida, que era la persona con más suerte de todo el mundo.

—¿Estás mejor?

—Sí... gracias por escucharme...

—Cuando quieras. Te dije, una de mis funciones es ser psicólogo. Soy lo que tú quieras que yo sea.

Patrick sonrió levemente.

—Gracias...

Pete le puso una mano en la cabeza y le empezó a hacer cariño.

—Ya... te prometo que todo se va a poner mejor.

Patrick suspiró y le pasó un brazo encima.

—Tengo frío...

—¿Quieres un tecito?

—Bueno.

—Aw, ya... vamos abajo entonces...

Pete se levantó y ayudó a Patrick a que lo hiciera también. Cuando fueron a la cocina, Pete puso a abrir agua e hizo a Patrick elegir un té.

Pete apoyó a Patrick contra el mueble de la cocina y puso sus manos sobre este para dejarlo sin salida.

Patrick puso las manos en sus hombros y le sonrió.

—Bebé. —Pete juntó su frente contra la de Patrick.

—Qué.

Pete le dio un beso.

—Hola.

—Holi.

Pete continuó el beso aparentando más a Patrick, para que se sentara sobre el mueble de la cocina, haciendo que Pete quedara entre sus piernas.

OOOOOOOOOOOO

Y eso con el peterick po

Pal protzimo

Chip miztherioxo

Besos con sida<3