~Jookyun~

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—¿Qué tienes que decir?—pregunta el menor cerrando la puerta detrás de él mientras el mayor toma asiento en la cama del dueño de la casa. Changkyun apoya su hombro en el gran mueble de madera en el que guarda su ropa posando sus ojos en Jooheon.

Lee no sabía por dónde empezar, había varias cosas que debía decirle al menor. Y por mucho que se esfuerce, no lograba ordenar las palabras adecuadamente para no saltearse ninguna parte. ¿Por dónde debe empezar? ¿Por el beso? ¿Por el momento en el que se conocieron? ¿Por la homofobia de sus padres? Hay mucho de qué hablar y no está totalmente seguro de que Changkyun lo deje terminar con su larga historia. Toma aire y lleva sus pequeños ojos al más chico, que lo miraba con desaprobación.

—Empezaré por el principio.—dice por fin.—¿Prometes no interrumpirme?

—Solo habla ya.—gruñe Chang en modo de respuesta.

No está del todo seguro en hacerlo, tiene la sensación de que nada va a salir bien de esta, que cagó todo desde un primer momento. Ay, pero está muy en lo cierto. Finalmente, se convenció de comenzar a explicar de una buena vez sin importar lo que pase después. Si Changkyun se va de su vida, se lo merece, merece todo lo que pase en un futuro con tal de cobrar el infierno del pobre menor, que Changkyun lo deje es lo mínimo que el karma podría hacerle. Comienza contando desde el momento en el que de conocieron, admite que en un principio no le había caído bien porque parecía ser alguien que se creía el centro de atención, pero que a más lo iba conociendo, más le iba gustando sentimentalmente. Changkyun le parece alguien hermoso y simpático, se odia por haberlo hecho sufrir todo este tiempo. También explica la triste realidad de sus padres, que dejaron de hablarle a un familiar por ser gay, impidiendo que Jooheon vuelva a verlo de nuevo en su vida. Entonces, le hablaba mal a Changkyun para alejarlo y autoconvencerse a sí mismo de que lo odiaba. Pidiendo disculpas de mil maneras, casi a llantos, se arrodilla ante los pies del menor, rogando de que le conteste, no importa si le grita, solo busca una respuesta.

—Lo siento tanto, Changkyunnie...—musita con el dolor y el arrepentimiento demostrándose en cada acto que realiza.—Si tienes algo que gritar, hazlo... lo merezco...

Chankyun lo mira desde arriba con recelo y que Jooheon está arrodillado en el suelo, suplicando su perdón. Se cruza de brazos sin saber qué pensar. Es cierto que lo lastimó mucho, pero no le guarda resentimiento por eso y por mucho que le pidiese, no le gritaría. Por más que tenga miles de palabras horribles en la mente, no le hace caso a su lado impulsivo. Solo suspira para quitarse las ganas de gritar y dice:

—Escucha, hyung...—el mencionado levanta la vista a los ojos del menor, a lo que sigue hablando:—No puedo gritarte, no te odio, tampoco siento ganas de desquitarme por lo mucho que me hiciste pasar, no importa cuántas cosas tenga en mente por decirte. No me parece correcto lo que hiciste porque nos lastimaste a ambos, y quizás... si hubieses sido franco contigo mismo y aceptado que te gustaba, ahora estaríamos los dos juntos enfrentando al mundo. Pero en lugar de eso, decidiste ser terco, engañarte y lastimarme.

—No era mi intención...

—Sé que querías alejarme de ti.—lo interrumpe el menor.—Pero había miles de otras maneras para hacerlo.

—Lo siento...

—¡Deja de decir que lo sientes, joder!—Changkyun eleva la voz, lo que hace que Jooheon se ponga de pie abriendo los ojos.—¡No voy a perdonarte por esto por mucho que me lo pidas! Pero tampoco puedo odiarte... ¿Sabes por qué? Porque sí soy sincero conmigo y acepto que me gusta el idiota sin cerebro que me hizo pasar un mal momento con sus hirientes palabras.

—Lo... Espera, ¿qué?—se interrumpe a sí mismo y agarra de los hombros al menor.

—N-nada. Olvídalo.—las mejillas de Changkyun se tornan de un rojo carmesí y aparta sus ojos de los de Jooheon apenado.

—No, te escuché perfectamente. Repítelo.—ordena sacudiendo un poco al más chico.

—Solo vete...—pidió.

—Changkyun, podríamos hablar esto y...

—Jooheon, necesito pensar sobre esto.—lo interrumpe con un tono serio. Primera vez que le hablaba informalmente a un mayor, pero no le da importancia, ninguno de los dos lo hace.—Solo vete, más tarde hablaremos.

El mayor no tenía ganas de negarse y forzar al menor a algo que él no quería. Es por eso que baja la mirada y se va de su habitación susurrando un adiós y rozando sus manos. Ya bastante daño le hizo y lo menos que podía hacer para remediarlo era darle el espacio suficiente para aclarar su mente y poder decir todo lo que sentía... si es que siguen esos sentimientos.

Pasan los días y las semanas y ninguno de los dos volvieron a cruzar palabras, de hecho, Changkyun no volvió a aparecer en la escuela. Jooheon comenzaba a preocuparse y llegó a creer que de verdad se había ido de su vida, tal y como él lo había dicho antes de su última charla. Las vacaciones comenzaron y ninguno de los dos sabía nada del otro. Jooheon se encerró en su habitación, negándose totalmente a salir al exterior mientras Changkyun miraba por la ventana de su auto el interminable paisaje, donde cientos de árboles se notaban a lo lejos, la carretera que parecía no tener fin y el eterno viaje hacia su destino. Todo está perdido, según Lee Jooheon, no volverá a verlo y todo por su culpa. No tiene idea en dónde se encuentra Changkyun para poder ir a buscarlo en algún futuro si es que realmente se fue, y el menor... el menor no quiere pensar en él, por algo se fue tan lejos.

¿Que si Changkyun de fue a otra cuidad para toda la vida? No señores, esta historia no es tan trágica aunque lo parezca más adelante. Changkyun solo fue a un viaje familiar de unas semanas, y ahora que está desempacando en su habitación, está pensando en Jooheon. ¿Deberían intentarlo para ver si funciona? ¿Debería perdonarlo? ¿Debería pagarle con la misma moneda? ¿Debería decirle que lo quiere como amigo? Sí, sí -aunque no se lo merezca-, no -aunque sí se lo merezca- y no... es lo peor que puede hacerle.

Luego de tantas súplicas de su madre pidiendo salir, Jooheon obedece de mala gana y comienza a caminar a dirección de la casa de Hyungwon, donde el hogar de Changkyun quedaba de pasada, solo se para en la puerta, mira un segundo y sigue con su camino.

Unas cuadras más tarde, pasos desesperados de acercan a él y no se preocupa en darse la vuelta por su propia seguridad para ver de quién se trataba. Solo sigue en su mundo con la mente en blanco, deprimido y mirando sus pies bajo el caliente sol. Los pasos se acercan más a él, no se inmuta. Una mano se apoya en su hombro, no se resiste. Lo dan vuelta, solo espera el golpe. Apoya ambas manos en sus bonitas y gorditas mejillas, no entiende lo que sucede. Los labios del contrario se apoyan en los suyos, finalmente volvió a sí mismo para verlo a Changkyun. Dudoso, corresponde al beso, agarrando su cintura y juntando sus caderas. Los ojos de algunas personas que pasaban por ahí los miraban juzgándolos, por ver a dos adolescentes besándose en público, en el medio de la calle para ser exactos. Se separan y se miran a los ojos sin despegar las manos de sus cuerpos.

—¿Dónde estabas?—pregunta Jooheon para romper el silencio.

—Tuve unas buenas semanas de vacaciones para purificar mi mente y pensar un poco.-le responde.—Me costó mucho llegar a la decisión.

—¿Me perdonas?—trata de adivinar ilusionado y alegre con una hermosa sonrisa.

—No, pero no puedo rechazarte.—contesta.—Eres un maldito egoísta bueno para nada que solo se mete en problemas y aún así no puedo negar el hecho de que te quiero demasiado. Se me hace imposible hacerlo, por lo que intentarlo una vez no sería mala idea. No quiero que cambies por mí, porque a pesar de ser una mierda de persona con los que no son cercanos a ti y con el chico que te gusta... lograste enamorarme.

Jooheon sonríe, ignorando los comentarios ofensivos que el menor le había dicho, solo importaba lo bueno, la oportunidad que le estaba ofreciendo. La única respuesta que pudo darle, es un tierno beso en los labios nuevamente, dando por comenzado una relación en la que se irán conociendo se a poco y se volverán inseparables, una relación que literalmente va a durar hasta que la muerte los separe. Changkyun le dijo que no cambiara por él... Pero lo hará, solo para poder ser mejor persona para el menor.

Estoy deprimida porque BTS está en Chile y luego van a Brasil, y es como... A ver Big Hit y la concha de tu hermana, ESTOY EN EL MEDIO, TANTO TE CUESTA HACER UNA BREVE PARADA EN ARGENTINA? ahre, pero sí :'v

Perdonen por el capítulo, está algo flojo U.U

He [2Won] [Monsta X]Onde histórias criam vida. Descubra agora