Capitulo 89

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-Capitulo 89-

Jueves.

Reí por el simple hecho de que él me estaba enseñando a cómo cocinar un salteado de verduras con fideos. Sí, sonaba tonto pero las veces que había intentado se me había quemado o no se cocinaba bien.

Yo estaba picando las verduras mientras él me rodeaba con sus brazos en mi cintura y apoyaba su mentón en mi hombro derecho. Estaba poniendo lo mejor de él para que los dos días que restaban, sean los mejores de mi vida y no los olvidara jamás. Su aliento chocaba contra mi cuello cada vez que me dirigía la palabra, lo que me hacía estremecer.

-¿Recuerdas cuando tratamos de hacer fideos? –Los dos reímos ante el recuerdo. Lo menos que hicimos fue cocinar, todo tomó otro camino y termino… con nosotros dos juntos.

-Sí, lo recuerdo. –Le afirmé mirándolo por el rabillo de mi ojo.

-Esos eran buenos tiempos… -Susurró más cerca de mi cuello y me dio un beso algo duradero y tranquilizante. –Pero no lo puedo comparar con lo de ahora… -Mordió el lóbulo de mi oreja haciéndome un efecto electrizante en todo mi cuerpo, de tal manera que solté el cuchillo haciendo que haga ruido. Harry rio por eso y me dijo al oído. –Amo lo que produzco en vos. –Su voz estaba llena de lujuria y su tono era profundo. Otra vez el tema de la cocina nos estaba llevando a otras cosas. Segunda vez.

-Harry. –Le dije con toda la voluntad que pude juntar ya que él sabía muy bien lo que él producía en mí. –Tratas de enseñarme a cocinar, ¿no? –dije algo divertida ya que él se había apartado, poniéndose a un lado de mí, apoyado en la mesada. Levantó sus manos en modo de defensa. –Conozco tus intensiones y te aprovechas de mí. –Sentí uno de los sonidos más hermosos que él emitía, su risa.

-Ok, ok, nada de sexo. Entiendo. –Me decía mientras él se encargaba de rehogar la cebolla y el morrón y vigilar que no se pasaran los fideos.  Ante su respuesta, le tiré con el repasador.

-Eres un pervertido.- Sentí otra vez sus manos en el mismo lugar de antes. Se puso en la misma posición. No había caso.

-Sí, pero me amas, eso es lo importante, ¿No? –Lo miré a los ojos. Realmente lo amaba y la idea de irme, dejarlo solo y empezar una vida nueva en Nueva York, me atormentaba. Le respondí uniendo nuestros labios por un largo tiempo. –Tomaré eso como un sí. –Reí ante su duda.

-Harry. –Inmediatamente se separó de mí al escuchar la voz de su padre, pero seguía teniendo sus brazos envueltos en mí. Lo miró esperando una respuesta. -¿Qué hacen?- Harry lo ignoró y volvió a la posición anterior.

-Me está enseñando a cocinar, un salteado con fideos, la cocina no es lo mío. –Le expliqué a Des, tratando de sonar lo más amable posible. Él sonrió.

-Me enteré que te vas y… -Harry lo interrumpió.

-¿Quién te lo dijo?- Creo que si las miradas mataran, Des ya estaría bajo tierra. –Mamá, ¿cierto? –Él se encogió de hombros. Harry gruñó ante eso.

-Lo siento mucho por ti TN ya que te separarás de Harry, pero sé que cumplirás con tus sueños. –

-Muchas gracias Des, y también lamento el irme de aquí y dejar a mi madre y mis amigas… -Harry me miró algo confundido al no mencionar su nombre, yo lo miré y él entendió.-

Al finalizar con la conversación Des se retiró de la cocina dejándonos solos de nuevo, ya que mamá no estaba en casa porque se encontraba en un curso de su trabajo.

Love, Sex & Magic||H.S||Terminada||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora