The Huntress [ Winchesters / Supernatural ]

51.

Dean salía del bar eufórico. No habían hecho nada nuevo, habían bebido como cosacos en un bar de carretera como llevaban haciendo desde antes de tener edad para beber. No era nada novedoso. Pero Dean se sentía una persona totalmente nueva. Podía verse de verdad en el piso de Ashley, viviendo con un perro, reparando coches para vivir, alejado de lo sobrenatural. Incluso podría tener una hija preciosa que tendría los ojos azules de Ash y, seguramente, su mal genio también.
Sammy encontraría a una chica y vivirían todos en la misma ciudad, quedarían a beber vino como hacían las personas adultas en restaurantes medio elegantes y planearian sus escapadas a la playa y sus cenas de Navidad. Para Dean, el Colt y esa noche eran el principio de una nueva vida.

Andaba hacia el motel bajo el brazo de Sammy. Se agarraba a su chaqueta vaquera para no caerse y con el otro brazo agarraba a Ashley. Estaba en casa. Ashley y Sammy eran su hogar y, aunque fueran nómadas desde que tenían uso de conciencia, eran el mejor hogar que podría imaginar.

-Os quiero tanto.-dijo casi gritando

Ashley soltó una sonora carcajada.

-Wow, estas realmente borracho.

-¿Por qué dices eso?-se quejó-¡Lo digo en serio! ¡Te quiero mucho, Ashley!-gritó con todas sus fuerzas

Ash lo empujó lejos de ella con una risa boba en los labios.

-Y a ti también, Sammy, te quiero muchísimo.-pronunció torpemente apoyándose en el brazo de su hermano

Sam era el tipo más alto que había visto jamás, y había visto muchos Windigos. Se agarraba con fuerza del brazo de Sam para no caerse y parecía tan bajito a su lado. Era cómico. Ash no podía dejar de reírse.

-Yo también te quiero, hermano.-se rió él mientras metía a Dean en la cama

-Se te ha ido totalmente la cabeza.-se burló Ash de brazos cruzados mirándole mientras se acurrucaba en la cama

-¿Vas a venir?-extendió los brazos buscando un abrazo de Ash

Ella negó riéndose y se agachó para ponerse a su altura, le besó la frente y le acarició el flequillo hacia atrás. Pero Dean no tenía suficiente con eso, la cogió de la cintura y se la apretó contra sí. Sin darse cuenta, Ash ya estaba en la cama y Dean le besaba la cara como llevaba queriendo hacer desde hacía tanto tiempo.

-Dean...-susurró sonriente antes de darle un beso en los labios

Hacía tanto tiempo que no le besaba de esa manera. Dean se sentía en una nube, no había ninguna situación posible en la que él fuera más feliz que justo en ese momento.

Pronto se intensificó el beso y Ash abrazaba a Dean con fuerza. Estaba tumbada sobre él. Pero alguien tosió a sus espaldas y ellos se dieron la vuelta:

-Sigo aquí.-dijo Sammy con cara de pocos amigos-Haber pedido una habitación de matrimonio.-se quejó antes de meterse en la cama de al lado