No me dejes caer

Capítulo 20

Narra Inés:

Creo que este era el primer día de instituto más raro que habíamos tenido. Después de que Lauren se me tirara y yo pudiera reaccionar y cogerla nos empezamos a partir el culo delante de todos, creo que cerca de esta chica mi reputación empezaría a cambiar. Después cuando llegamos a clase intenté sentarme con Amy y Lauren pero Jackson se cogió el sitio que tenía a mi lado y el del otro lado lo ocupó una chica que no conocía. Y cuando me vine a dar cuenta Lauren había sido arrastrada por Luke al final de la clase. Me aburrí como una ostra las 4 horas, a quien demonios se le ocurre empezar ya con maldita materia el primer día? A si, a los malditos demonios que tenemos como profesores. Ni si quiera le pidieron a Lauren que se presentara, creo que ya sabe todo el colegio quien es.

Ya estábamos yendo al comedor y la sonrisa se me borró de la cara. El olor más característico del instituto llegó a mis fosas nasales, la bazofia ganadora por tres años consecutivos a la mierda más grande del planeta.

-Hola gente! Que preparados para un año más comiendo...ems... esta comida con el sabor tan característicamente asqueroso?! -dije en alto cuando entré. Mierda, todo el mundo se me giró y me miró raro, yo, la que no se abre con nadie ni levanta la mano en clase por maldita vergüenza aquí, chillando como una posesa. Me puse roja y bajé la cabeza y me dirigí a paso rápido a las bandejas.

-Hey! Estas bien rubia? -me preguntó Lauren que alcanzó mi paso cogiendo su bandeja.

-Rubia? Castaña más bien...oye, y me puede quitar lo que me ha puesto por favor? Realmente no tengo ganas de comer... este tentempié -le dije a la cocinera apartando la mirada de Lauren con una mueca de asco al ver el potingue amarillo que cubría mi bandeja.

-Rubia esta bien, me gusta -Lauren tenía la mirada clavada en la bazofia que le acababan de echar tras ignorar mi petición -seguro que es comestible?

-La verdad, no estoy segura, incluso dudo de que no sea venenoso, pero sabes quien selo come muy bien? La basura -reí.

Nos sentamos en la primera mesa que vimos vacía y esperamos a que el resto llegaran.

-Bueno y como es que has llegado aquí? -pregunté a Lauren que estaba enfrente mío al lado de Luke, el cual le miraba fijamente, parecía que quería leer sus pensamientos.

Ella se revolvió en su asiento y se mordió el labio inferior mirando hacia la mesa. Era realmente adorable, tenía unas ganas incontrolables de abrazarla. Pero me mantuve en mi sitio y espere su respuesta. Cuando levantó la mirada tenía los ojos con una capa cristalina.

-Esto... me he venido a vivir con mi tío, aquí hay mas posibilidades con los estudios..y eso ya sabes, lo típico -parecía nerviosa y no paraba de tragar.

-Y dejaste a tu familia allí? -Amy frunció el ceño mirándola raro. Lauren apartó la mirada a un lado y cerró los ojos. Parecía que intentaba no llorar, al ver que Amy le iba a volver a preguntar la interrumpí, no quería presionarla a que dijera nada, y mucho menos que todos la vieran llorar.

-Creo que si es por los estudios no pasa nada -sonreí y Lauren se giró hacia mí y me sonrió. No sabía lo que le pasaba, espero que en algún momento me lo contara, sentía la necesidad de protegerla. -Bueno, que vais a hacer en el descanso? -les pregunté a todos después de terminar de meter el "puré" que era una pasta pegajosa en una servilleta.

-Tenemos las pruebas de fútbol. A, no te lo había dicho nena, juego al fútbol, es más, soy el mejor del equipo y...-respondió Luke mirando a Lauren la cual levantó una ceja incrédula.

-Yo hice que ganáramos la última temporada, soy yo el mejor, admítelo. ¿Vas a venir a verme y a apoyarme Inés? Seguro que vienen las novias de todos y no querrás que sea el único verdad? -Jackson me hizo un puchero, resoplé, ahora tendría que buscar una excusa para no ir.

-Que vas a hacer tu Amy? -le ignoré, ya le respondería.

-Conocí un chico en el pasillo mientras Lauren hacía la aparición más extraña que he visto -se encogió de hombros.

-Hum pos yo voy a ser cono como siempre en las pruebas, me pregunto si alguien se dará cuenta de que existo -Rick resopló.

-Teniendo un monumento como yo en el campo no miran a nadie más -respondió Luke sonriendo cínico.

-Bueno, si les gusta ver cerdos cargados de ego, no te preocupes que ocupas todas las miradas -me reí y giré a ver a Lauren la cual había estado callada todo el tiempo. Parecía que su sonrisa había vuelto. Me contagié de su ánimo, de verdad, esa chica sabía alegrar a la gente.

-Bueno, quieres que te enseñe el instituto en el descanso? -le pregunté antes de que alguno le dijera cualquier cosa.

-Estaría verdaderamente encantada rubia, es un gran honor tenerte como guía -me sonrió.

-Genial por que nos vamos. A Jackson, lo siento, no queremos que se pierda verdad? Será otro día -le dí un beso en la mejilla y cogí de la mano a Lauren y la arrastré corriendo a la puerta del comedor. Recorrimos los pasillos vacíos, por que mierda el baño estaba tan lejos? Después de girar varias veces conseguimos llegar y abrí la puerta de golpe metiéndome y arrastrando a Lauren con migo.

-Oye, y la manía esa de arrastrarme? Parece que me vas a secuestrar. Además, por que corremos? Mis piernas necesitan un proceso de aceptación. Hey, esto del baño no te recuerda algo rubia? -se quejó cuando llegamos al baño.

-Corremos por esto -le tapé la boca acercándola a mí y me apoyé en la puerta del baño. Ignoré su comentario, pero en mi mente no paraba de repetir el momento en el que su hermosa cara roja desapareció tras la puerta del baño del avión.Era difícil no recordarlo al tener sus ojos fijos en los míos. Pero mis recuerdos se esfumaron cuando pronto se oyeron los pasos fuera.

-¿Donde estáis mocosas? Volver ahora mismo a comer! -gritó un profesor enfadado. Los pasos se alejaron y le destapé la boca a Lauren. En eso de apoyarme en la puerta y taparle la boca nos habíamos pegado mucho. Podía sentir su respiración y ver perfectamente el verde brillante de sus ojos. Tenía miles de pecas, y no le quedaban para nada mal, más bien me provocaban a abrazarla y no soltarla. Levanté una mano y le pasé el pelo por detrás de la oreja. Sacudí mi cabeza para deshacerme de los pensamientos y Lauren se alejó en seguida de mi también frunciendo el ceño.

- Lo siento, es que...pensaba que tenías una mancha en la cara y no lo veía con el pelo -vivan mis super escusas, tan coherentes y todo. -Bueno... esto es... el baño. Es realmente bonito, lo mejor del colegio, obsérvalo bien, por que aquí se escuchan todos los rumores de las malditas marujas y pijas del colegio -reí.

-Pensé que tu eras la pija -levantó las cejas acusándome con la mirada.

-Hm, la gente me clasifica de muchos modos, quédate mejor con Rubia, soy muy difícil de entender -le sonreí.

-Seguro que acabaré conociéndote mejor de lo que esperamos -rió y dio una vuelta observando el baño justo cuando el calor subió a mis mejillas.