Capitulo XIV

3.5K 255 78
                                    

Capitulo XIV: "Dolorosas letras"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capitulo XIV: "Dolorosas letras"

Perspectiva de Björn Hoffman

Mis ojos azules al ser abiertos luego de un sueño raro se topan con la soledad, nuevamente la soledad de mi habitación levemente a oscuras sin rastro de alguien más aparte de mí. El lado donde ella estaba se encuentra vacío, o cuando se echaba sobre mí tampoco hay nada, no hay nada sobre mí más que estás sabanas acariciando mi piel desnuda. Ha sido solo una noche pero extraño la sensación de despertar dentro de ella, la sensación de su delicioso coño apretando mi polla, succionándola, extraño eso al igual que sus labios que hace menos de un día lo he sentido. La blancura de mi techo es tan absorbente como la confusión que continua presente en mi mente. No entiendo su actuar, no entiendo o como la vida de tan rápida manera me ha arrebatado todo.

El reloj marca las cinco de la mañana, cinco y media mejor dicho, una hora normal de la madrugada casi día pero es una hora donde decido que no pienso seguir envolviéndome en sus mentiras, es una hora donde decido que debo ser lo más cortante con ella hasta que decida ser sincera conmigo, es una hora donde tomo quizás la mejor o peor decisión de mi vida. Pero no hay lugar para arrepentimientos, en mi vida no puede haber lugar para eso.

Sin nada mejor que hacer, únicamente observo como cada cierto tiempo un número del reloj digital es cambiado, de las cinco y media pasan a las cinco y treinta y cinco, así sucesivamente sigo ahogándome en el aburrimiento que siento al no tener nada que hacer, a su vez también reprimo las ganas que siento de salir de esta habitación e ir a buscarla, ir a adorar sus labios con los míos, con mi lengua hacer lo mismo con cada centímetro de su piel y con mi polla a su vez adorar su coño. Sacudo mi cabeza ya que no quiero hacer de esto algo difícil, si fácil entre a mi vida, si fácil entro a mi cama espero poder sacarla de igual manera, fácilmente.

Podría irme a correr, tal vez sea una buena forma de decirle a la vida que a pesar de sus golpes seguiré siendo el mismo seguro hombre, tal vez sea la mejor forma de mandar a la mierda a la vida, de decirle que no pudo conmigo. Creo que esa es la mejor opción que quedarse recostado esperando que las cosas vengan a mí, poner en movimiento mi cuerpo es lo mejor y no solo mi pelvis para follar, sino todos mis músculos. Me pongo de pie, estirándolos mientras el lento aire que ingresa por la ventana golpea mis piernas, golpea la delegada tela del bóxer blanco que se ciñe de perfecta forma a mi cuerpo pareciendo una segunda piel. Estoy dispuesto a irme a la ducha para darme un baño antes de ir a correr pero el sonido del celular me interrumpe, el lento vibrar sobre la mesita de noche hace que guíe mi mirada a ese lugar.

Con una mueca de desgano veo el nuevo mensaje que me acaba de llegar por parte de aquel hombre, un simple Christopher se marca como remitente acompañado de una imagen sonriente de él, bueno siempre anda sonriente así que es una de las muchas que tiene. Leo el mensaje intentando procesar todo aún con mi cabeza pérdida un poco en el sueño que estaba teniendo con ella.

Mis Pervertidos II (Grey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora