Destruida

Capítulo 33. Decisiones

Miraba atontada la escena, a nuestro alrededor aun había algunos lobos peleando, pero él parecía haberse envuelto en una burbuja donde solo existían ellos dos. Cuando él me dijo que sentía que su compañera tenía alguna clase de conexión conmigo, jamás me imaginé que fuera ella, sobre todo cuando dijo que tal vez, ya no estaba en el mundo de los vivos.

Una parte de mí estaba feliz por él, feliz de que haya encontrado a su alma gemela, pero la otra parte sentía que estaban robándose a mi mejor amiga antes de tiempo. Le hice gestos a Ethan para que se acercara a ellos, él solo caminó unos pasos y no me dejó bajar de sus brazos, era de esperarse, pero él seguía muy enojado y estaba haciendo un esfuerzo enorme por aguantarlo. Lo entendía, pero toda esa sobrecarga la estaba absorbiendo yo.

—Te he buscado tanto tiempo, mi alma anhelaba entre suspiros el momento de encontrarse contigo —murmuró cerca de sus labios, yo aún no salía del shock, deseaba gritar de la emoción—. Y por muchos años creí que ya no estabas en este mundo.

—Yo soy tu, tú eres mi... no sé qué decir —respondió con miedo, él besó sus labios cortamente, la tomó en sus brazos y comenzó a correr hasta que llegó con nosotros.

Le costó un poco convencerla ya que Lyd lo seguía regañando por besarla, Jake tomó una de las cestas que había en el lugar y la envolvió en una camisa, Ethan hizo lo mismo conmigo, seguido lo hicieron ellos.

—Ay no me jodas Jake ¡Lyd es tu compañera! —dije despertando de mi trance—. Oh jojo que jodido estás, esto no será nada fácil para ti, amiga, no te preocupes por nada, te ayudaré en todo lo que pueda.

<<¿Qué tanto vas a decirle tú? Ni que tuvieras tanta experiencia>>.

<<Ay cállate Kiara, solo estás preocupada por Ryder, no te robarán su amistad ¿Sabes? Eres una acaparadora>>.

<<¿Cómo me acabas de llamar? ¿De qué estás hablando? ¿Quién dijo que estoy celosa?>>.

<<Ah jajá, desde luego que yo no fui>>.

—Compañera —murmuró Ethan—. Diablos, no habrá manera de que él se separe de ella hasta llegar a Diamante Oscuro —y eso era evidente, ya que Jake la abrazaba como no queriendo soltarla jamás.

—¿Qué? ¿Diamante Oscuro? ¿Esa es tu manada? No, yo no puedo irme de aquí, mi hermana será la luna, yo no puedo, acabo de verla después de muchos años y yo no voy a dejarla.

Por más que deseara intervenir, no podía hacerlo, miré a mi alrededor, aun teníamos cosas por hacer, las chicas seguían peleando junto con sus compañeros, quedaban pocos desterrados y los vampiros comenzaron a huir dejando a los lobos atrás.

Sin un líder que les ordenara atacar, ellos ya no tenían razón para quedarse y seguir en la batalla. Los mensajeros de la muerte que acompañaban a Viktor se marcharon tan rápido como el vampiro que acosó a Lyd fue derrotado, los demás comenzaron a huir de manera inmediata después, no estaba muy segura de su estrategia, pero me extrañaba que simplemente se marcharan sin la información que necesitaban.

<<También me parece raro, han estado detrás de esto desde hace mucho tiempo>>.

<<Entonces ¿Porqué marcharse tan fácilmente? No lo entiendo, ninguno de ellos logró llegar a Matt y él es el único que tiene esa información, al menos, para ellos él era el de más fácil acceso>>.