Capitulo 32.

1.5K 79 3
                                    

Hola, lamento mucho haberme desaparecido tanto tiempo pero no tengo wi-fi y se me hace imposible subir. Intentare escribir lo mas que pueda para subirlo cuando tenga internet. Las quiero.

ULTIMOS CAPÍTULOS.

Capítulo 32.

Los días habían pasado demasiado rápido, Justin y ________ estaban de un humor de perros. Ella cada día se ponía mas irritable y a todo respondía que eran las hormonas, había entrado a los tres meses y se sentía una ballena andante. Lloraba todo el tiempo y Justin sentía que en cualquier momento iba a explotar a gritarle que lo dejara en paz.

-¡Quiero ir al centro comercial por mi vestido! -exclamo la castaña a Justin. El suspiro.

-Ahora no puedo preciosa, estoy hablando con los inversionista de asiáticos necesitan que les envié el documento hoy mismo.

-Nunca tienes tiempo para mi, estoy cansada y embarazada. Ya no me quieres porque estoy poniéndome gorda -susurro mientras los ojos se le llenaban de lágrimas, no sabia ni siquiera porque estaba haciendo tanto drama.

Justin se paro de la silla del escritorio y fue hasta ella que se había sentado en el sillón de cuero negro, lloraba como si se hubiera muerto alguien y Justin no sabia si podía aguantar un poco mas. La vio con lagrimas en los ojos y un adorable puchero. Era tan hermosa. El corazón le dio un vuelco cuando ella se aferró a el y luego subió la cabeza y le dio un besito en los labios.

-Soy una llorona pero.... -suspiró y luego asintió- esperare hasta mañana por mi vestido.

-Preciosa, son las hormonas -le dijo Justin riendo suavemente- Le diré a Martha que llame a la tienda donde Jazzy compra sus vestidos, ellos vendrán aquí con una colección solo para ti ¿te gusta la idea?

-¡SIII! -exclamo con alegría dando saltitos en el sillón- Quiero que sea verde o tal vez rojo y con liguero ¿te gustaría, eh? -añadió moviendo las cejas pícaramente.

-Sabes que si -le dijo Justin besándola- ahora ve y comete ese pastel de vainilla y chocolate que compre para ti en esa tienda tan cara.

-Ya lo comí -murmuro sonrojada..- y créeme que no sabia igual a como se veía. Ahora... Me voy.

La castaña casi salió corriendo del despacho, Justin tomo el teléfono y llamo a Matt, necesitaba que viajará por el y Phill se quedaría a cargo de la empresa mientras el se iba de luna de miel. Faltaba tan poco para su boda y no podía creer que se iba a casar con la chica que le había hecho tanto daño una vez o al menos, con la que creyó.
Ella era totalmente inocente, virgen y ahora embarazada de un bebe suyo. Pero eso era lo único que lo impulsaba a estar con ella, sino fuera así, estaría seguro que ya no estuviera con ella.

Dos horas después estaba sentado frente a ella viéndola como comía de su comida china mientras miraba en televisor totalmente concentrada, tenía las piernas cruzadas y el cabello revuelto por haber dormido, fruncía el ceño de vez en cuando y Justin pensó que no había nada mas hermoso que ella y que aunque el no lo quisiera, ella se estaba enterrando en su piel con cada pequeña cosa que hacia.

-Justin...

El salió de sus pensamiento cuando la escucho y la miro a los ojos.

-¿Que?

-¿Crees que podré volver a trabajar cuando salga del embarazo? -preguntó mirándolo. Justin era realmente atractivo.

-No necesitas trabajar -le contesto parándose de la cama y agarrando las cajas de comida china vacías.

-Pero Justin... -alargo- yo soy pediatra y no quiero desperdiciar todos los años de carrera que hice en la facultad porque estoy embarazada...

-No quiero que trabajes, así de simple -puntualizó Justin duramente, su voz había cambiado.

-¿y cuando decidas dejarme? ¿Uh? -contestó molesta- el bebe estará bien pero yo no, ni siquiera se si todavía no me has quitado mi departamento.

-________ cállate... -murmuro pasándose las manos por el cabello, como si estuviera desesperado por gritarle.

-¡No! ¡Estoy cansada de que me tengas en una maldita caja de cristal! -le grito parándose de la cama y yendo hacia el- Estoy segura que cuando te canses de mi y me dejes tendré que hacer mi vida de nuevo y quiero hacerlo antes de que eso suceda.

-¡CÁLLATE YA! -le grito furioso- tu no vas a trabajar y punto. No discutiré esto contigo. Créeme que cuando tengas a mi hijo quiero que todo tu tiempo sea de él, no aceptare que te alejes y le dejes una niñera y sácate esa idea de que te dejare, mi hijo nunca tendrá padres por separado ¿de acuerdo?

Dicho eso salió de la habitación echo furia. Odiaba que ella hablara de ese tema, odiaba el hecho de que ella pensara que el la iba a dejar, nunca haría tal cosa, su hijo estaba de numero uno en sus prioridades y el había visto tantas familias rotas que no se imaginaba que su hijo pasaba por aquello.
No la amaba, pero no sabia porque sentía que si la dejaba, su vida ya no tendría sentido.

Mi cenicienta (Justin Bieber 1ra y 2da temp) #wattys2016Where stories live. Discover now