Eli
Cada vez que me sentía mejor por algo, volvía a recaer y me sentía mucho peor que antes. Estoy feliz porque llevo exactamente sesenta y cuatro días sin autolesionarme y es todo un logro para mí.
Llamaron al timbre y supe que era Eria, ya que habíamos quedado para arreglarnos juntas en mi casa e ir directamente al baile de graduación.
Bajé apresuradamente las escaleras y le abrí la puerta.
-Hola- me dijo ella abrazándome emocionada.
-Holaaa, ¿lista para prepararnos para el baile?- pregunté y ella asintió, así que subimos a mi habitación.
-¿Ponemos música?- preguntó.
-Valeee- alargué la "e de la emoción y cogí mi móvil para poner Aitana. La primera canción que se reprodujo en el altavoz, fue " la chica perfecta" que la cantamos a todo pulmón, sobretodo yo porque sentía que me representaba demasiado, y comenzamos a vestirnos.
Una vez nos pusimos nuestros vestidos, Aria empezó a hacerme el peinado. Me había decantado por un recogido sencillo parecido al de la bella y la bestia y el pelo ondulado.
Acto seguido, me maquilló. Me puso un poco de corrector en las ojeras que tenía a causa de no dormir bien, iluminador, colorete, sombra de ojos azul oscuro y pintalabios.
-Ya estás lista- exclamó emocionada y yo empecé también a maquillarla y peinarla. Le hice un moño y de maquillaje solo quería colorete y pintalabios, lo cual fue mejor para mí así no tenía que esforzarme mucho.
Una vez terminamos ambas, nos miramos en el espejo.
Yo me veía muy diferente. Era la primera vez que iba a dejar que todos vieran mis cicatrices y me asustaba un poco lo que pudieran decir de mí.
-Tranquila, si te dicen algo, me avisas y les reviento la cara- me aseguró Aria.
-Gracias- respondí y le di un fuerte abrazo.
-Denada, Eli. Para eso están las amigas. Venga, hay que irse que sino vamos a llegar tarde al baile- asentí y nos fuimos.
Al llegar, ambas abrimos la boca claramente sorprendidas por el estado en el que había cambiado el instituto.
El gimnasio estaba ilumiado con luces tenue azules y lleno de lámparas y globos amarillos, la combinación perfecta, como una noche estrellada vista desde la barca.
Había un montón de comida y bebida y en el centro estaba la pista de baile, donde mucha gente ya se estaba divirtiendo, junto con un dj.
Empezamos a oír la melodía de la canción superestrella de Aitana y ambas gritamos de la emoción mientras nos acercábamos a la pista para bailar.
-Me ve entrando a la disco y se me queda mirando- empezamos a cantar, mientras veo como Liam entra por la puerta y me surgen mariposas en el estómago como cada vez que lo veo.
-Estoy con mis amigas de reojo mirando- canto mirándole disimulando-. Te queda tan bien esa camisa de Versace.
Un rato después decido sentarme en las gradas a descansar. Veo que Liam se sienta a mi lado.
-Hola, Oasis. Estás muy guapa.
-Gracias- esbocé una sonrisa.
-¿Te apetece bailar una última canción y vienes a mí casa a dormir?- me preguntó.
-Vale- le di la mano y volvimos a la pista de baile.
Empezó a sonar Just the way you are de Bruno Mars y Liam empezó a cantarla sin dejar se mirarme.
-Oh, her eyes her eyes, make the stars like their not shinning- canto con una voz muy desafinado que me hizo reírme con él mientras bailábamos.
-¿Y si la hacemos nuestra canción?
-¿Qué?- preguntó Liam sin entender mucho.
-Todos los personajes de los libros tienen uno y yo también quiero, creo que está canción nos representa.
-Tienes razón, Oasis- indicó-. Pues just the way you are será nuestra canción.
Tiempo después decidimos ir al lago a alquilar una barca y mirar las estrellas, como llevábamos haciendo todos los findes de semana desde hace dos meses.
-¿Liam?- hablé una vez estábamos acurrucado mirando las estrellas.
-¿Si, Oasis?- preguntó.
-¿Qué crees que pasará cuando las estrellas se apaguen en el cielo y por una noche no se vea ninguna?
-Creo que no significará nada ¿y tú?
Creo que algo malo pasará. Digo en mi mente, porque no me atrevo a decírselo.
-Lo mismo- mentí.
No dijimos nada más y volvimos a su casa.
Ambos nos quedamos dormidos al instante.
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C͜͡u͜͡a͜͡n͜͡d͜͡o͜͡ l͜͡a͜͡s͜͡ e͜͡s͜͡t͜͡r͜͡e͜͡l͜͡l͜͡a͜͡s͜͡ s͜͡e͜͡ a͜͡p͜͡a͜͡g͜͡a͜͡n
Romance𝐌𝐢 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐧𝐨 𝐞𝐫𝐚 𝐩𝐫𝐞𝐜𝐢𝐬𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐜𝐨𝐥𝐨𝐫, 𝐬𝐢𝐧𝐨 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐥𝐨 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐫𝐢𝐨. 𝐍𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐦𝐞 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐧𝐚𝐝𝐢𝐞, 𝐩𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐞 𝐩𝐢𝐞𝐧𝐬𝐚𝐧 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐨𝐲 𝐫𝐚𝐫𝐚, 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐮𝐧 𝐝𝐢...
